Y ahí estaba yo, atendiendo y apuntando literalmente toda palabra que el profesor nombraba, respondiendo todas las preguntas.
En un impulso casual, dirigí mi vista a la ventana encontrando nuevamente a la chica del teléfono. Extrañamente, ahora no estaba ese dichoso aparato en sus manos, en cambio, tenía un gran libro.
- ¿A caso nunca estás ocupada?- murmuré frunciendo el ceño.
Nuevamente, sus ojos encontraron los míos. Arqueé una ceja y ella dejó de mirar mis orbes para volver a su, también dichoso y asqueroso libro.
(...)
Rato después salí de la universidad y abrí la cartera para tomar un billete de 5. Había olvidado traer mi caja de cigarrillos winston, así que lo mejor sería comprar en un bar.
Iba directa hacia aquel lugar cuando repentinamente sentí que alguien tocó mi hombro. Paré mis pasos y me giré para mirar sorprendida a aquella chica de pelo corto.
-Oiga, joven... ¿Usted tiene algún cargador de teléfono? ¿O al menos podría dejarme el suyo para poder hacer un par de llamadas?
Eso literalmente explica el hecho que no esté con el móvil.
-Claro.
La analicé de pies a cabeza. Unos pantalones tejanos apegados a sus piernas, una camiseta negra holgada y una camisa de cuadros sin abrochar. ¿Por qué éste estilo tan juvenil?
-Muchas gracias.
Hizo una leve reverencia y miró a otro lado.
Vieja... Pero también nerviosa. Sumamente divertido.
-Espéreme aquí un segundo, señora.- remarqué la última palabra con una media sonrisa en el rostro. Definitivamente mi plan de putear a Shin Ryujin estaba en marcha.
Me dirigí al bar para comprar mis preciados cigarrillos Winston. Pero al ver que no quedaban, tuve que conformarme con los Marlboro.
Sin más los compré y salí del bar con algo de prisa, vi a aquella mujer mirando a los lados, parecía algo desesperada.
-Ya estoy aquí, tome.- abrí mi bolso y le di mi teléfono.
Ella lo tomó rápidamente y algo nerviosa empezó a teclear un teléfono.
-¿Yuna? ¿Ya estás en casa?- arqueé una ceja escuchándola. ¿Quién era Yuna?- Está bien, cariño. Quería asegurarme porque Hui no contesta ninguna llamada. - resopló removiendo su pelo.- Cualquier cosa, llama a Chaeryeong. Yo no tengo batería.
Ella colgó la llamada, automáticamente yo fingí no haber escuchado nada.
Tomé con agilidad un cigarro y lo encendí para llevármelo a la boca.
- ¿Todo bien? -la observé de reojo.
-Sí, todo bien. Gracias, señorita.
Hice una reverencia, nos quedamos viendo a los ojos. Repentinamente empezó a llover, yo no traía paraguas y como era de esperar, Shin tampoco.
¿Quién jodidos traía un paraguas en un esperado día de 40 grados centígrados?
-¿Va caminando sola?- me preguntó devolviéndome el teléfono a lo que yo asentí.-Yo vivo aquí al lado. Déjeme devolverle el favor y quédese a tomar un café en mi casa hasta que deje de llover.
HOLI BEBÉS UWU
OS ENSEÑO UN EDIT QUE HE HECHO ANTES:
Os amo💖🗝
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Apaga El Teléfono [Shin Ryujin] EDITANDO
FanficElla vivía en su teléfono. Yo la observaba desde la ventana de la Universidad. ¿Por qué siempre está sola? Ella no parece ser nada del otro mundo, sin embargo nunca habla con nadie. ¿Quién eres? ¿Puedes escucharme un momento y apagar tú teléfono? ¡D...