Apaga El Teléfono [Shin Ryujin] EDITANDO

🍙Capítulo 5🍙

-¿qué?- habló estudiante de gafas y alta estatura mirando a su compañero.- ¿La profesora de inglés ya no está en éste instituto?

Yo tan sólo seguí caminando, escuchando una y otra vez el mismo rumor.

-Oye Joanne, ¿lo sabes?- habló repentinamente una voz conocida a mi lado, era Yuna. Era una de mis compañeras de party.

-¿Qué ocurre con la señorita Seungyeon?- ladeé mi cabeza sin comprender.

-Ya no está en la universidad, en cambio ha venido una nueva profesora.

Reí negando. La señorita seungyeon era la clase de profesora que todo el mundo odiaba. Ella tenía un muy buen cuerpo, pero era lo único que destacaba de ella. En sus clases, podíamos estar lanzando sillas por los aires pero ella ni enterada.

-Debe de ser una broma. ¿Ahora tendremos una profesora aburrida?- hice puchero.

-Parece ser que sí. Aunque, ya sabemos a quién podemos molestar.

Sin más la alarma para comenzar las clases se hizo presente y nos dirigimos a clase para encontrar a una mujer con gafas y tapabocas, con abrigo, bufanda y capucha.

-¿Esa es nuestra nueva profesora?- le susurré a yuna entre risas.

Miré a yuna y me miró confundida.

-Ella se parece a mi tía con su forma de vestir. Literalmente, tiene el outfit completo.

Reí negando y sin más me senté en mi lugar y ella en el suyo. La clase se llenó en menos de un minuto y la profesora se empezó a desabrochar la chaqueta mientras se levantaba.

-Welcome to my class, you can call me Shin. Nice to meet you, guys.

La re puta madre, no he entendido absolutamente nada. Definitivamente voy a suspender.

-¿Any question?

Levanté mi brazo sin dudarlo, ella me observó y hablé.

-¿Puedes decirlo en castellano? No hablo taka taka, señora.

Toda la clase empezó a reír burlándose de la profesora y yo sonreí ampliamente.

-Oh, joven señorita. ¿No será usted quién no sabe pensar? - ella empezó a avanzar lanzando la chaqueta a la silla, dejando ver su corto pelo el cuál removió con su mano.- La vida no te dará las cosas en bandeja, joven Hwang.- se quitó la mascarilla dejando ver sus rojos labios- no obstante, usted cree que por ser una linda jovencita con ganas de divertirse, llegará muy lejos en esta vida.- se puso frente a mi pupitre, recargando sus brazos en él, mirándome fijamente para quitar sus gafas y acercarse a mi rostro.- Joven Joanne, usted está equivocada. Y si sigue con esta actitud tan egocéntrica, me temo que tendré que castigarla.

Shin Ryujin.

SHIN RYUJIN.

S H I N    R Y U J I N.

Tragué saliva, viendo nuestros rostros tan cerca. Su tan profunda mirada, su forma de relamerse los labios. Oh, dios... Castígueme por éste pecado que voy a cometer.

-¿Castigarme?- susurré sobre sus labios ignorando las miradas de los demás sobre nosotras.- Oh, ¿no sabes que cuando un profesor me desafía, juego de la forma más limpia posible? - reí de lado, mirando sus manos sobre mi mesa y volví a mirarla a los ojos.- Pero tú... Oh, por Satanás. Me harás jugar sucio, señora Shin.- miré directamente a su pecho y ella rápidamente se separó para alejarse.

Empecé a reír a carcajadas, ignorando los comentarios homófobos de algunos alumnos.

-Señorita Joanne, usted se quedará en clase conmigo. Avise a sus padres, usted no volverá hasta la noche. ¿Está lista para el peor castigo de su vida?

-¿Me esposará en su cama, profe? -hablé sonriendo, vi su rostro realmente serio y sin más señaló la puerta de la clase.

-Vete con la directora. Hablaré seriamente con tus padres.

-¿Cuáles padres? Yo no tengo.- le hice burla riendo y salí por la puerta de clase.

¿Ryujin castigando a TN? Omg, yo quiero ver eso.