Capítulo 8- Otra vez

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-Luis me puedes dejar de sobar ya, no quiero que piensen nada raro

-Lo van a pensar igual-le dice apartándose de ella-

Aitana abre la puerta de casa y casi se le sale el corazón por la boca al encontrarse de frente a su hija y su amiga.

-Joder

-Hombre, nos tenías preocupadas

-Si, voy yo y me lo creo, sal de en medio anda

Pasa al salón mientras las chicas miran de arriba a abajo a Cepeda y lo que menos se esperaba era ver a sus padres en el salón.

-Ups, se me ha olvidado decírtelo-le dice su hija bajito-

-¿Que hacéis aquí? Si estuvimos hace dos días

-Pero nos dejaste preocupados, no queremos que estéis solas

-No si sola no ha dormido-dice Ester al oido de Lucía-

Aitana les lanza una mirada asesina y Cepeda no sabe donde meterse, pero finalmente se acerca a saludarlos. Un poco tenso todo.

-No es solo eso, sabemos que has castigado a la niña, déjala venir con nosotros al pueblo, aunque sea unos días, antes de empezar las clases y todo eso

-Me lo pensaré, ¿os tenéis que ir hoy?

-Si, pero solo si nos prometes que no estarás sola

-No te preocupes, si Ester esta deseando venrise unos días de vacaciones conmigo

-Pues piénsalo hija

-Voy a mirar que hay para hacer de comer

-Yo mejor me voy

-No papá, quédate 

Miran a Aitana y asiente. Se va a la cocina y al momento le aparecen las dos por detrás.

-Mamá tienes un chupetón enorme tia

-No me jodas, ¿donde?

Las dos estallan a carcajadas y Aitana niega haciéndose la enfadada.

-Así que si

-Que si que

-Aitana no soy nueva

-Ay Ester, esta la niña delante

-Mamá que ya me hago mayor

-Vale que si, si, ¿contentas?

-No no, detalles

-Eso ya no me interesa

-Si anda vete que has abandonado a tu padre a su suerte

Se quedan solas y Ester la mira expectante.

-Brutal tia, brutal, creo que aun me tiemblan las piernas, y no veas como se nota que está en forma con esos musculitos

-Ay como me alegro tia, ¿cuantos?

-Ester, mira vale, hemos dormido como mucho tres horas

-Madre mía Aitana, ¿vais a intentarlo?

-No, que va, ha sido un polvo

-Bueno varios

-Tia, que no, quiero estar sola, además ahora esta también Lucia, estamos bien así

-Acabareis pasando noches juntos y no tendréis otro remedio, ¿que quieres que pase lo mismo que la otra vez? No le des falsas esperanzas

-Ester acaba de volver

El día en el que la lluvia dejó de arderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora