Delilah sabia que ninguno de sus amigos iría ese día a clases: Annie estaba de viaje, y Jaeden se encontraba enfermo de gripa. Así que traía sus audífonos puestos y había recorrido todo el pasillo hasta llegar a su casillero con ellos.
Buscaba su libro de Historia hasta que unos brazos rodearon su cintura y besaron su sien; el olor que le llegó delató quien era. Delilah rio y se quitó los audífonos volteando a verlo.
— ¿Por qué tan feliz? —recargó su espalda sobre su casillero mirándolo a los ojos.
— hmm quien sabe —sus manos recorrieron su cintura y la acariciaron suavemente. La respuesta de la chica fue fruncir el ceño y sonreír, pues el chico tenía un humor distinto al que tenía otros días.
— oh claro —estiró sus brazos para acomodarle su cabello, y esta vez el chico no intervino para que no tocara sus rizos — estas bien?
— yo? muy bien.
—no, no lo está —Noah jalo a Finn por el cuello y pasó su brazo por sus hombros— te dije que no vinieras hoy. —el chico lo llevo hasta la salida dejando a Delilah atrás.
Su día transcurrió con completa normalidad, a excepción de que la voz de Annie no estaba ahí, ni los molestos zapes de jaeden en la cabeza. Caminaba tranquilamente por los pasillos mientras Anti-hero de Taylor Swift sonaba en sus audífonos, hasta que alguien tocó su hombro y pudo distinguir su nombre entre el ruido de su alrededor. Se quito uno de sus audífonos y se dio la vuelta, Noah estaba parado ahí.
— ay, holaa! —saludó Delilah con una cálida sonrisa, un poco extrañada pues pensó que este se había ido.
— Tengo que hablar contigo, sobre Finn.
— ¿Finn? ¿Qué tiene Finn? —frunció el ceño.
— Vamos a la biblioteca, ahí nunca hay nadie. — así que tomó camino hacia la biblioteca esperando que la chica lo estuviera siguiendo.
Al llegar a aquel lugar ambos se sentaron en una esquina lejos de la bibliotecaria para que esta no escuchara su conversación. La biblioteca estaba fría gracias al aire acondicionado, y solo había poca gente a la vista, lo más seguro es que algunas parejas estuvieran escondidas entre los estantes dándose besos o haciéndose otra cosa.
— ¿qué pasa con Finn? —murmuró Delilah en un tono de voz bajo.
— eeeh, como lo digo...
— Noah! dilo por favor! —gritó en susurro.
—tal vez lo sabías o no pero...bueno, el se droga, de vez en cuando y por eso en la mañana estaba tan feliz...—se quedó pensando antes de continuar, pero Delilah lo interrumpió.
— ¿con que se droga?
— ¿qué?
—Si, ¿con que se droga?— Noah resoplo y miro hacia arriba intentando recordar.
—eeh...marihuana, cocaína, metanfetamina—hizo una pausa y al ver la reacción de Delilah hablo de nuevo— pero casi nunca se droga con metanfetamina! lo ha hecho como dos veces, es mas, una! la más frecuente es marihuana, ya sabes, cómo todo mundo.
— ¡¿como todo mundo?! —gritó en susurro nuevamente.
— es difícil de explicar...—delilah parecía muy enojada, y noah ya no quería hablar mas con tan solo ver su expresión— pero, vas a seguir con el, verdad?
—¿cada cuánto lo hace?
—una vez cada...dos semanas? eh si, creo que si.
no tenía ni idea de cómo reaccionar a aquella información. No estaba enojada, ni triste, yo creo que la mejor manera de describirlo era decepcionada, pues realmente quería una buena relación con el. Le agradeció a Noah y por primera vez, se fue antes de la salida de la escuela y condució hasta la playa; donde podía estar sola con sus pensamientos.
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𝐇𝐞 𝐰𝐚𝐬 𝐚𝐧 𝐢𝐝𝐢𝐨𝐭 - 𝐅𝐢𝐧𝐧 𝐖𝐨𝐥𝐟𝐡𝐚𝐫𝐝
RomanceDelilah Harper siempre había tenido un conflictivo Crush en Finn Wolfhard, pero verdaderamente, nunca había considerado la posibilidad en que este llegara a verla como una opción, hasta que un día las cosas dan un inesperado giro.