::Luna de sangre :☆: KookV::

::Doce::

—Woow tienes una espada— dijo JiMin fascinado agarrándola —Es la primera vez que tocó una, tiene un diseño muy bonito, el herrero debió de...

—¡Podrías callarte!— Bramó JungKook molesto y JiMin lo hiciera de inmediato presionando sus labios entre sí —No puedo concentrarme porque tú no paras de hablar— dijo volviendo a concentrarse en las letras que TaeHyung trataba de enseñarle.

—Perdón —Rio nervioso y TaeHyung negara dándole un golpe a JungKook en el brazo.

—Oye —Se quejó el vampiro viéndole con reproche.

—No le grites. Discúlpate.

—No.

—JungKook — dijo frunciendo el ceño y verle con seriedad —Hazlo —Desde hace una semana JiMin siempre venia con él a la casa, pero siempre era muy gruñón con el pobre chico que solo quería mantener una conversación con alguien ya que con JungKook casi no lo hacía.

—No puedes obligarme.

—Oigan, no creo que sea necesario tanto, es cierto, yo debería de callarme un rato —Ambos le ignoraron.

—Ya no te enseñaré a leer y mucho menos te dejaré besarme ni verme si no te disculpas. Te has estado comportando muy grosero últimamente —El vampiro le mantuvo la mirada con recelo y luego vio a JiMin, quien se tensó nervioso.

—Perdón por gritarte —Dijo las palabras con su orgullo herido y un mal sabor de boca, las palabras habían salido casi arrancadas de su garganta. Esa palabra no había salido de él desde hace ya mucho tiempo como para recordarlo. Aún así, el deseo de estar junto a TaeHyung lo hizo doblegarse un poco.

—Descuida —Sonrió JiMin viendo a JungKook quien miraba el manuscrito con enfado, sintiéndose humillado de alguna forma. Estaba acostumbrado a esa sensación pero no dejaba de desagradarle.

—Ves que sí se pudo —Dijo TaeHyung acunando las mejillas de JungKook con sus manos y apretarlas suavemente, el vampiro solo le miró a los ojos fijamente —No tienes que ser agresivo todo el tiempo, relájate, nadie te está atacando colmillitos, trataremos de guardar silencio pero no hagas rabietas —Le sonrió y JungKook frunciera el ceño, lo trataba como a un niño, aún molesto le beso, sorprendiendo al Omega y a JiMin quien solo apartó la mirada con las mejillas avergonzado.

—No voy a disculparme por eso —Hizo una mueca volviendo a lo que hacía y el rostro de TaeHyung se ruborizara. Tal vez aquello había sido únicamente una manera de castigar al peligris por hacerlo sentir de esa manera otra vez, pero TaeHyung lo disfruto. Tocó sus mejillas calientes, reprimiendo una sonrisa mientras su cola se movía feliz de lado a lado, delatando su emoción.

Le encantaban los besos del pelinegro. Y la verdad, JungKook llevaba todo el rato aguantándose por besarlo, uno no bastaba, quería más.

—¿Q-qué decías sobre la espada? JiMin— pregunta TaeHyung tratando de actuar como si nada sintiendo acalorada la cara. Con la voz baja para no molestar al pelinegro.

—Que es muy bonita, es la primera vez que tocó una... mi amo tiene muchas armas en el castillo pero no me deja acercarme a ninguna —Rio volviendo a dejarla en su lugar.

—En realidad, era de mi madre —Sonrió —Únicamente es decoración ahora —Volvió su mirada a JungKook —¿Cómo es eso de que tienes muchas armas? —Le pregunta al vampiro y esté le viera de reojo —Creí que los vampiros no usaban eso, ya tienen mucha fuerza, no creo que cueste mucho matar un humano.

—Me gustan las armas así que las colecciono. Además, hay cosas que no puedes matar únicamente usando las manos...—  dijo y TaeHyung frunciera el ceño. JungKook únicamente seguía tratando de transcribir lo que TaeHyung había hecho, quería hacerlo igual que él. Le costaba ya que nunca había escrito.