Estamos solos y eso se aprende a la mala.
Nadie con quien compartir tus sueños y pesadillas, nadie para salir o permanecer en un lugar estable.
Nadie es estable.
Todos tenemos esa oscuridad dentro de nosotros, que nos hace temer.
Otros... Aprendimos a vivir con ella, a estar solos y saber que la compañía es efímera la mayoría de las veces, siendo un cúmulo de personas que dejas enterradas en el pasado.
Un recuerdo del cual en unos años olvidarás. A no ser... Que se vuelvan parte de esa misma forma, sintonizados por cosas en común donde la mayoría no pasa de aficiones comunes, otras incluso íntimas en un ámbito tétrico, conflictos que prueban una frase tan simple.
"Pará todo y por todo"
Manos manchadas, recuerdos enterrados ahora en un jardín, donde solo son gritos de una ilusión, tan nítidas que a veces provoca volver al mismo lugar, una y otra vez, haciéndote cuestionar si realmente sucedió.
Quisiera ser una persona pura en todo su esplendor ¿pero existen personas así? Estoy segura que sí, pero no saque esos genes.
Es increíble como la vida te hace dar cuenta sobre ese defecto tan grande, donde la poca empatía inunda tu ser. Quizás la misma es quien te transforma en lo que necesitas ser.
¿Esa es la manera en que mis noches deben pasar?Recostada en la helada cama me he resignado a alguien a quien llamar para ser salvada de mi misma. Dónde las heridas siguen ahí, no es un maldito hematoma para sentir, está más dentro de lo que creo. ¿Es el precio al tener las emociones tan expuestas? Solo quiero sentirme de nuevo yo, no ser añorada por momentos del pasado, siento que deje ser aquella mujer que solía tener una independencia intacta, ahora únicamente soy pedazos de esta cosa. No puedo si quiera reconocer todo tipo de acciones que he tomado de las cuales me han llevado a estar aquí.
Si, tengo emociones, no soy buena expresando, mucho menos cuando tengo por penitencia el sobre analizar las cosas, quisiera ser aquella mujer del pasado, aquella que no esperaba nada del amanecer quiero dejar a la niña que ahora soy, enterrando todo tipo de sentimientos de impotencia. Cuando solía ser ella, aquella que nos ha mantenido con vida a cualquier precio, sin importar las consecuencias de las mismas.
Ahora solo puedo lamentarme por todos aquellos que están atrás, dónde fueron ocultados por simple tierra, y luz de la luna. Por el momento solo puedo sucumbir a la oscuridad de mi habitación aquella penumbra que siempre ha Sido testigo del fraude que llegó a ser, mi mañana no se quedará únicamente en una noche más, sino como aquella dónde me rindo ante los malditos sentimientos absurdos que unicamente me llevan a mi destrucción.
Siempre fui yo el problema. "Pará todo y por todo" fui yo quien falló. Si hay alguna manera de purificar mis errores haría lo que fuese...