Más que amigos ||C.V. Y TÚ||Terminada||

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—Me gusta la idea —respondio, la luz de la luna entraba por la ventana de la habitación haciendo que pueda ver a _____________ mejor que hace unos instantes

—¿Sabías que no es bueno estar muy caliente? —pregunte, ella me sonrió

—Deja de hacerme esperar —se quejo

Baje mi cabeza para morderle la mandíbula y dejar un beso. Bese su cuello para luego chuparlo y morderlo, eso pareció darle cosquillas.

—Ya no aguanto —se quejó

Sonreí instintivamente, me acerque a sus senos y le mordí un pezón, ella soltó un gemido, chupe sus senos, los mordí, los lamí y los acaricié, ella lo disfrutaba.

—Dios... —murmuro en un gemido

Baje mis labios a sus caderas y las mordí, la marca de mis dientes era notable en su cuerpo. Su piel canela tenia marcas blancas que se iban volviendo rojas poco a poco.

—Mi mamá me va a matar —susurro mirándome

—Primero me matara a mi —dije divertido

Acaricie la tira de sus bragas y las saque de un tirón causando que se rompieran, ella chilló.

—¿Estas bien? —pregunte acariciándola justo ahí, justo en donde le palpitaba

—Si... —apenas pudo decir, metí dos de mis dedos en su interior y ella arqueo la espalda dejando salir un gemido

—¿Te gusta, mi amor? —pregunte ella asintió con la cabeza, moví mis dedos de un lado a otro haciendo que sus gemidos se intensifiquen. —¿Te gusta que te muerda, que te acaricié y que juegue contigo? —pregunte mirándola a los ojos

—¡Si, Dios! —grito mientras mis dedos hábiles se movían dentro de ella

Pase mi lengua por su zona causando que el cuerpo se le erizará. Mordí uno de sus labios vaginales y ella soltó un gemido.

—Ah... Chris —dijo con dificultad, acaricié su humedad con la lengua y la chupe jugando con su zona

Ella estaba mojada y mi miembro estaba erecto, mordí el interior de su muslo izquierdo dejando la marca de mis dientes en este. Levanté mi rostro y me acerque al de ella para besarla, mientras mis dedos estaban en su interior.

—Te nesecito —me dijo con dificultad

Saque mis dedos y de una sola estocada entre en ella como me lo pidió, su humedad cubría todo mi miembro. Se sentía bien estar así con ella.

El ritmo de mis caderas era cada vez más rápido, sus labios reclamaban los mios, baje mi boca hasta su cuello y lo mordí.

—¿Más fuerte? —pregunte con una sonrisa traviesa

—Si, más fuerte —me dijo

Aumente el ritmo de mis embestidas hundiéndome por completo en ella, sus labios sobre los míos se sentían muy bien. «Es mía»

Recordé al chico rubio de las escaleras, en como le sonreía, en como la abrazo, en como la miraba y eso me enojo haciendo que el ritmo de mis embestidas sean cada vez más aceleradas. Ella comenzó a gritar «literalmente», de sus labios escapaba mi nombre de vez en cuando.

—¡Chris! —gritó

Sus manos estaban enterradas en mi espalda, estaba siendo brusco «muy brusco». Sentí como ella comenzaba a temblar y un grito abandono sus labios haciéndome saber que había llegado a un orgasmo. Minutos después yo también me corrí en su interior.

Saque mi miembro de su interior y me acosté a su lado con la respiración agitada. Acomode mi brazo abajo de su cabeza haciendo que nuestras piernas queden entrelazadas y ella quedé a centímetros de mi rostro.

—Eres hermosa —dije acariciando su rostro

—¿Por qué? —pregunto, me quedé observándola por unos segundos sin entender a qué se referia. —¿Por qué de un día para otro te parezco hermosa?