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Estaban almorzando de lo más normal, Kakyoin termino perdiendo ante Jolyne y ella consiguió tener más de dos pancakes para almorzar, ahora platicaban como si fueran amigos de toda la vida, ella le contaba sobre lo que hacía y él igual, ambos se reían de cuanta ocurrencia se contaban.

-Ok, entonces...- La joven tomo un poco de aire para bajar un poco la risa que tenía y así hablar mejor- ¿Me estás diciendo que ese perro le arranco un mechón de cabello?- 

-¡Si!- Limpió una lágrima que le había salido de tanto reír -Lo hubieras visto, el perro estaba de lo más normal con el mechón que le había arrancado mientras él lloraba como nunca.

Jolyne con solo su imaginación se daba por bien servida, incluso había dejado de comer por temor a ahogarse mientras comía. Realmente ambos no entendieron como llegaron a este punto. Por un lado, ella ya se imaginaba en su casa siendo regañada por su padre o viendo como golpea a Kakyoin, mientras que él, no sabía si estaba bien lo que estaba haciendo, si lo pensaba es como si la estuviera secuestrando además que mintió por ella y era probable que si sus padres se enteraban, una demanda era lo que iba a tener ahora su mente lo abrumaba y se imaginaba como terminaría en la cárcel.

-¿Kakyoin?- La menor llamó su atención, lo miraba extrañada -¿Estás bien?

-Tú padre va a matarme, ¿No?- No pudo evitar preguntar, ver la expresión de Jolyne en duda, le parecía un 'Si' directo.

-No lo hará sino se entera- Se encogió de hombros, contestando como si fuera lo más obvio -O sea, al menos yo no le diré por algo te llame, el director se vio bastante convencido y no creo que la secretaria vaya a decir algo, ¿Tú dirás algo?

Kakyoin le dio la razón, sería estúpido que después de todo vaya a decir todo, solo hizo un puchero consiguiendo que Jolyne se riera otra vez, pero lo disimulo comiendo un poco más de su pancake.

-Además, ¿Porqué te preocupas ahora? Incluso firmaste.

-Imite la firma de tu padre nada más.

-Exacto- Jolyne alzó su vaso de jugo -Si se te ocurre decir algo, te ira peor porque incluso falsificaste la firma de mi papá- Dio un trago de su jugo y volvió a dejar su vaso en la mesa -Mira, solo se el adulto más relajado que estabas siendo hace un momento y no te martirices.

-A ti te da gracia todo esto, ¿no?- Kakyoin preguntó e igualmente tomo un  poco de su jugo.

-Por supuesto, realmente no esperaba llegar tan lejos, incluso ya almorcé- Se comió rápido el último bocado que quedaba en su plato -Además, no tienes la capacidad física o mental como para ser un pedófilo o algo así, así que, otro punto a mi favor.

Ahora Kakyoin entendía porque tantos reportes, resultó ser más ingeniosa de lo que se mostraba, aunque no se sentía mejor, al menos sabía que no terminaría en la cárcel, él ya no pudo comer más haciendo que Jolyne aprovechará y le robará un poco de lo que dejo en el plato, en eso sonó el celular el pelirrojo, vio en la pantalla y resultó ser su buen amigo francés así que contesto.

-Por favor dime que no quemaste nada- Habló al teléfono, el cual termino alejando un poco por los gritos de quién lo llamaba, prefirió poner el altavoz -¿Qué estás haciendo, Jean Pierre?- No pudo evitar sonar molesto, sabía que su amigo no era de total confianza pero trabajaban en lo mismo mínimo no crearía una guerra campal, aunque solía ser grosero de manera involuntaria.

-¿Disculpa? ¿Ya viste la hora? ¡Estás retrasado!- Kakyoin le preguntó a Jolyne la hora, que resulto ser las 11:30, 'Vaya, apenas y fue una hora que salimos de la escuela' pensó Kakyoin -Juro que si no vienes haré que todos estos mocosos me respeten.

Cómplices.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora