"Justo cuando pensaba que el amor ya no era una opción para mí, llegaste tú y me mostraste la felicidad"
Habían pasado algunas semanas desde que Dianna despertó en ese bosque extraño, por más que lo recorrió no encontraba salida, era interminable. Con el paso de los días decidió aceptar su realidad y tratar de adaptarse a su nuevo entorno. Poco a poco empezó a construir un pequeño refugio para ella y para Tom, utilizando ramas y algunos trozos de madera que iba encontrando. Afortunadamente el clima era bueno, no había señales de que el invierno se acercara, por lo que estarían bien durante un tiempo, en lo que conseguían un mejor lugar para quedarse. Ella estaba preocupada porque no tenía idea de cómo hacerse cargo de un bebé, pero Tom crecía rápido, demasiado rápido. En pocos días ya caminaba, pasada una semana ya era un niño capaz de correr y hablar, ahora, contra toda lógica, parecía tener unos catorce años.
—... ¿Eso es todo lo que recuerdas? — le preguntó Tom antes de dormir.
—Sí... estoy segura de que ese día — tragó saliva antes de hablar— Scorpius me apuñaló con una daga. — dijo Dianna con un nudo en la garganta.
—Se me hace difícil creerlo. Por lo que me cuentas, él parecía amarte mucho.
—Yo también pensaba eso, no entiendo qué fue lo que sucedió en realidad — las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas— una noche atrás hablábamos sobre nosotros, sobre nuestro futuro juntos... y de pronto solo me atacó, ni siquiera pude reaccionar, fue demasiado... su mirada estaba cargada de odio y desprecio... mientras me desangraba cerré los ojos y al abrirlos su rostro había cambiado, sólo veía miedo y desesperación.
—¿Y cómo te sientes al respecto?
—Estoy triste... decepcionada, era en quien más confiaba y me traicionó, yo...— comenzó a sollozar— Yo sé que debería odiarlo, pero no puedo ... no puedo dejar de amarlo.
Tom le dio un fuerte abrazo y dejó que se desahogara hasta quedarse dormida.
A la mañana siguiente, Dianna estaba preparando algo de comer, en realidad no estaba segura si podía morir de hambre, ya que se suponía que estaba muerta, pero aun así sentía la necesidad de alimentarse. La ventaja de que Tom hubiese crecido es que ahora él podía ayudarle con algunas cosas, justo en ese momento había ido a buscar unas setas. Lo observó regresar corriendo hacia ella, le sonrió, él le devolvió la sonrisa.
—Aquí tienes, Dianna— dijo el niño entregándole una seta.
—¿Sólo encontraste una? — preguntó un poco decepcionada.
—Había muchas, pero solo una es necesaria.
Dianna lo miró sin entender lo que quería decirle, el joven solo sonrió, colocó la seta en el pasto y puso ambas manos sobre ella, de pronto cientos de setas comenzaron a aparecer a su alrededor.
—¡Puedes hacer magia!
—Podría hacer más si tuviera una varita... pero no creo poder conseguir una aquí.
—Ojalá yo pudiera.
—Yo creo que puedes hacerlo, Dianna, la sangre mágica corre por tus venas.
—Pero yo nunca pude hacer nada — dijo ella, dudosa.
—Necesitas más confianza, mira.
Tom cortó una pequeña rama del arbusto más cercano y se lo entregó a Dianna, la joven la sostuvo y sin saber qué hacer se dedicó a observarla, la rama se veía seca y triste, entonces Dianna la imaginó con vida, llena de hojas y pequeños retoños, y así sucedió, de un momento a otro la rama comenzó a tomar la forma que Dianna había imaginado. Sorprendida, la joven soltó la ramita y ésta cayó al pasto.
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Comprometido a amarte
Fanfiction''El amor es tan fuerte como la muerte y al mismo tiempo tan frágil como el cristal'' Scorpius Malfoy sufrió una gran pérdida en su pasado que lo dejaría marcado para siempre, resignado a nunca volver a amar decide darle utilidad a su existencia for...