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𝗟 𝗢 𝗨 𝗜 𝗦 𝗔

-Tienes que mostrarle lo que se pierde.

Con el poco tiempo que llevo de conocer a Georgina, puedo decir que es una mujer imponente, fuerte y segura de si misma.

El problema es que yo no tengo ninguna de las tres cosas, por lo que dudo mucho si probarme el traje de baño que Gina puso en mis manos.

-Pruébatelo, si no te gusta buscamos otro-me anima.

Me animo a entrar al probador con los tres vestuarios diferentes.

El primero es un bikini blanco de tirantes, tiene dos largas tiras de tela, las cuales salen del top, envuelven mi cintura, se cruzan a la altura de mi ombligo y se terminan uniendo con la parte inferior del bikini.

El segundo es más discreto, anaranjado, una sola pieza que envuelve perfectamente mi cuerpo, olanes caen por la parte del escote, termina armando un triángulo debajo de mis pechos, dejando a la vista un poco de mi abdomen.

El tercero y mi favorito por sus colores, de dos piezas, un top de tirantes y la parte inferior que alcanza a cubrir mi ombligo.
Y mi parte favorita es el estampado, rayas de colores que llevan un orden: amarillo, naranja, rojo, verde, azul y negro.
Ese patrón se repite en todo el traje, dándole un toque alegre.

-Los tres se te ven preciosos-me dice Georgina.

-¿Cuál crees que debería llevarme?- le pregunto.

-¿No vas a llevarte los tres?- pregunta.

-No quiero ser abusiva...

-¿Cuanto dinero traes, chica?

-Paulo me dio 300 euros.

-Ahi está, gástatelos.

-¿Crees que esté bien?

-Por algo te dio tanto dinero, anda ya, a pagar- me dice guiñándome un ojo.

Al final me rindo y compro los tres trajes, y un pareo color hueso, según Georgina me puedo arrepentir y no usar el primer bikini, por lo que este puede ayudar a sentirme más segura.

Terminamos las compras del día y vamos a tomar un café, cuando ya es más noche, me trajo de regreso a casa.
Y diciéndome algunas cosas que debía llevar a Nápoles, se despidió.

(...)

-Louisa vámonos ya- me grita Dybala desde el primer piso.

-Ya voy- le respondo.

Bajo con dos maletas cargando, se que solo vamos 4 días, pero Georgina me ayudo a preparar mi maleta y la mujer cuido que cada cosa que llevará combinará, por lo que llevo mínimo 5 cambios, para diferentes ocasiones.

-Siempre tienes que llevar un vestido largo, Louisa.

-¿Porque llevaría un vestido largo a un viaje de 4 días?

-Nunca se sabe, pueden pedirte matrimonio y casarte al otro día.

Enserio que esta mujer hace mis días más fáciles de llevar.

Llegamos al famoso Aeropuerto de Nápoles, Capuccino o algo así...

-Capodichino, Louisa- recuerdo como Georgina me corrigió.

Viajamos en el jet privado del equipo, como era un viaje largo todos venían con sus respectivas parejas. Tuve la oportunidad de platicar con varias de ellas, al igual que Georgina eran muy amables.

En la hora y media de vuelo no deje de cruzar miradas con Matt, el decir que no me llama la atención sería mentir, es muy guapo.

-Llevarán las maletas al hotel- una voz interrumpe mis pensamientos, es Dybala.

Transmigración / Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora