Te amo monstruo 2: la esposa con los ojos vendados y su esposo enmascarado

221: Más cerca que nunca

Davi, que se sentía mareada, se dirigió a la cocina para buscar la medicina y se detuvo en su lugar en el momento en que vio lo que se estaba desarrollando ante sus ojos. Bueno, por razones que ella no sabe, Sei estaba mirando fijamente cierta taza en su mano. Las doncellas y el mayordomo estaban de pie como alhelí en la esquina, mientras que el Sr. Chen era como un estricto maestro de cocina.

Mirándolos en ese momento, Davi solo pudo decir que Sei estaba tratando de cocinar. Por lo tanto, silenciosamente se apoyó en el marco de la puerta para mirar a su adorable Sei sin que él lo supiera.

"Oye, ¿cuánto tiempo planeas mirar el arroz de grano corto? Te dije que los lavases y no los mires". Dijo el Sr. Chen y Sei inmediatamente lo miró con mirada disgustada. Bueno, el hombre obviamente parecía que estaba disfrutando de la rara oportunidad de ordenarle a Sei así.

"Deja de holgazanear, tu esposa está esperando". El Sr. Chen continuó y al escucharlo, Sei se movió instantáneamente.

Siguió obedientemente todas las instrucciones que dijo el Sr. Chen sin decir una palabra. Simplemente hacía la tarea con un enfoque y cuidado intensos hasta el punto de que parecía estar haciendo una tarea muy importante en la que cualquier error era imperdonable.

En ese momento, Davi, que sentía que su cuerpo se volvía más pesado, no pudo evitar sonreír mientras lo miraba. Solo quería verlo ser adorablemente lindo de nuevo un poco más a pesar de que ella comenzaba a sentir frío.

Hasta que pasó el tiempo y Sei finalmente puso el arroz y el agua en una olla de barro. El Sr. Chen simplemente le dijo que lo dejara reposar durante 30 minutos cuando Davi estornudó de nuevo, rompiendo el silencio dentro de la habitación.

Todos ellos miraron hacia ella y Sei inmediatamente se acercó a ella.

"¿Qué estás haciendo aquí? ¿No deberías estar descansando arriba?" Preguntó preocupado cuando Davi solo sonrió.

"Quiero ver al chef Sei cocinar". Ella respondió y Sei se quedó sin habla.

"¿Qué estás cocinando?" Preguntó y Sei permaneció en silencio un rato antes de que pudiera responderle.

"Estoy cocinando un okayu para ti." Él respondió y Davi volvió a sonreír ampliamente. Sintió que su corazón se calentaba a pesar de que se sentía un poco fría. Pero estaba a punto de dar las gracias cuando volvió a estornudar.

"Te llevaré de regreso arriba." Sei luego dijo en el momento en que notó sus ojos pesados. Sin embargo, en el momento en que la tocó, inmediatamente se preocupó. La atrajo hacia él y en el momento en que posó la palma de su mano en su frente, una preocupación extrema cruzó por su rostro.

"Estás tan caliente." Dijo y Davi pellizcó suavemente su mejilla.

"No te preocupes, si como tu papilla y tomo un medicamento, mejoraré en poco tiempo". Ella respondió cuando el mayordomo detrás de ellos habló.

"Joven maestro, puede dejarnos el resto aquí. También prepararemos la medicina. Lo llamaremos una vez que todo esté listo". dijo el mayordomo e inmediatamente asintió.

Luego, Sei la cargó como una princesa en su brazo hacia su habitación hasta que ella la dejó en la cama.

"¿Estás bien?" preguntó mientras se sentaba a su lado.

"Mm. Solo siento un poco de frío." Ella respondió cuando de repente, Sei simplemente se acostó a su lado. Davi estaba a punto de hablar cuando la rodeó con el brazo y la acercó lo suficiente a él sin decir nada.

En ese momento, Davi quedó atónita y se tragó las palabras que estaba a punto de decir.

"¿Te sientes más caliente ahora?" pronunció y Davi espetó.

"S-sei, cogerás mi resfriado si nos quedamos así." Ella respondió, pero Sei la acercó aún más a él hasta que sus cuerpos ya se estaban tocando, más cerca que nunca.

"Ya te lo dije, no me importa. No quiero verte así". Dijo y el corazón de Davi comenzó a acelerarse salvajemente.