Enfréntate al pasado

Interesante...

Martes, lo que equivale a: Escuela. Qué horror. Anoche, después de mi pequeño enfrentamiento, cene en casa de mis primos, luego había visto una película con Jase y nos quedamos dormidos a la mitad. Tía Helen no quería despertarme, por lo que llamo a mi mama para decirle que pasaría la noche con ellos. Por la mañana tome una ducha aun en casa de los Bennet, mi madre había venido para darme ropa limpia, maquillaje y las cosas para la escuela. Luego de asearme y vestirme, mi tía me pregunto si quería que me ayude con el cabello, como eran las 7:30 y la escuela empieza a las 10, le dije que sí. La tía Helen siempre solía pasar mucho tiempo peinando mi cabello, y eso me encantaba, lo peinaba con tocados de trenzas lindos y delicados, algunas veces decoraba mis simples coletas de pelo con cintas, amo que mi tía peine mi cabello.

-siéntate frente al espejo cariño- dijo señalando el hermoso tocador blanco.

Me senté en un sillón, ella tomo el cepillo y comenzó a peinar mi húmedo cabello, luego lo seco, y como toque final realizo una muy hermosa trenza cocida en la cual se distinguían algunos hilos de cabello color cobre ente mi pelo castaño.

Una vez que termino, me puse un poco de rimmel, delineador y brillo labial y baje para ayudarla con el desayuno. Hicimos huevos revueltos y hot cakes. Luego disfrute mi comida junto a Jase y a Johnny, los cuales me hicieron reír mucho. A las 9:40 Salí de la casa con Jason para ir al instituto. Al menos pase una linda mañana.

Como todos los días tenia historia en la primera hora, lo que significa estar sentada junto a Nathan durante todo ese periodo de tiempo. Diablos eso hace que odie la materia aún más de lo que ya la odio.

Al entrar vi al niño bonito sentado en nuestro pupitre, esperándome con una sonrisa de pirata.

-Henderson- dije en tono indiferente sentándome a su lado.

-Parnell- dijo en tono seductor –te ves sexy con esa blusa- o este chico tenía un tic en el ojo, o acaba de hacerme un guiño. Se fuerte Magg, que no te importe

-gracias- eso chica, mantente indiferente –que tal tu noche?- porque lo dije? Idiota, Parnell eres idiota.

-Interesante- porque me mira como Christian Grey? -, aún tengo el sabor de tu boca en la mía- eso lo explica! Porque salió con lo del beso?

No pude evitar sonrojarme cuando lo dijo. Había susurrado que no era un buen chico y luego… había rozado sus labios con los míos, solo un tacto en forma de beso, con el cual me estremecí. Por un corto lapso de tiempo sentí su cálida, suave y sensual boca en contacto con la mía, pero fui lo suficientemente fuerte como para desprenderme. No esperen, él fue quien corto el beso, yo solo no hice nada. Si él no nos hubiera separado que hubiera ocurrido?

-con que estas recordando lo de ayer no?-pregunto Nathan devolviéndome al mundo. Ya había entrado el profesor y estaba dando la clase, tanto tiempo paso? –es más, hasta parece que te gusto.

-que te hace pensar eso?- bufe

-no es que a las chicas no les gusten mis besos, sino que todas tienen reacciones muy distintas a la tuya luego de besarme

-y cuál es mi supuesta reacción- dije fingiendo cero interés

-bueno es que cuando lo mencione te pusiste roja y te mordiste el labio, las chicas suelen hacer eso luego de acostarse con migo, pero luego de un beso solo siguen con sus vidas- se quedó mirándome unos minutos antes de seguir- supongo que ese minúsculo tacto te produjo algo.

-A Amber le producían algo tus besos?- se quedó mudo, con expresión seria, su sonrisa había desaparecido, solo me atravesaba con la mirada. La única forma de evadirlo era prestar atención a la clase.