Tóxico (s) 3 •MewGulf

•4•

Después de dejar a Dreamy en la escuela, fui a casa de Tonliu para compartir con mi mejor amiga un rato.

—Estaba cansado~.— Yo digo con mi cabeza recostada en su hombro. Tonliu acaricia mi cabello.

—Aww, ya lo imagino, lindo.— Tonliu dice acurrucando su cabeza sobre la mía. Se siente tan bien ser abrazado por un amigo que no te ha dejado desde años.

Mi teléfono suena y yo lo saco de mi bolsillo para verlo. Abro su pantalla y alzo mis cejas.

—¡Wow!

—¡¿Qué es?!— Tonliu asoma su cabeza.

—Asunto confidencial~.— Yo le digo dándole la espalda para que ella no vea.

—Ay~.— Tonliu gruñe.

Mew me envío diecisiete mensajes por lo que yo entro al chat a ver qué sucede. Al entrar ve diecisiete fotos de penes negros a.k.a afroamericanos. Su último mensaje aparece a lo último de esas fotos.

Daddy Mew: Dime cuál te gusta.

—Mm... ¡Tonliu, ayuda!

Yo le grito a mi mejor amiga ahora volteando hacia ella.

—¡¿Eh?! ¿Qué, qué pasa?— Ella pregunta toda preocupada mirando todo de mí pero yo le detengo su cabecita para que mire la pantalla de mi teléfono.

—Wow.— Ella también dice, limpiándose el sangrado nasal que le sale por la excitación.

—Tonliu, ¿no te me estás muriendo o sí?— Yo le pregunto todo preocupado mientras que ella se limpia el sangrado.

—N--No, Gulf. Estoy bien~. Fue sólo la excitación.

—Oh. Eso es...

—¡Genial!

Ambos gritamos en unísono chocando nuestras manos. Ella con la sangre seca fuera de su nariz.

—Bueno, veamos.— Ella mira las diecisiete imágenes. —¿Qué tal esta?

Ella elige una con un pene gigante de piel morena. No tan oscura pero tampoco tan clara.

—Mm. Se ve bien.

Gulf dice.

—¿Por qué Mew está preguntando eso? Hace mucho que no hacían tríos, ¿no?

—Sí. Han pasado años desde que hacíamos esas cosas pero creo que Mew quiere satisfacerme. Como: pagarme por los años en que aguante los juguetes sexuales cuando no me gustaban.

—Oh.— Tonliu asiente repetidas veces antes de volver a mirar a su mejor amigo tocándole la punta de la nariz. Él la mira con una sonrisa.

—Me alegra que Mew te cuide tan bien.— Tonliu le dice, acariciándole el cabello.

—Cuando me acaricias así se me hace imposible no imaginar una vida en dónde tú fueses mi madre.

Tonliu ríe dándole un golpecito juguetón en el hombro. —¡¿Tu madre?!— Ella ríe conmigo mientras que yo desvío la mirada pero puedo sentir que ella deja de reír sin borrar su sonrisa mientras me mira.

—Entonces sabes lo mucho que en esa otra vida yo he de amarte, ¿verdad?— Tonliu me toma de los cachetes con una sonrisa como si yo fuera un niño pequeño y ella verdaderamente fuese mi madre. Yo la mire con una sonrisa.