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Pov Harry Potter.

— Yo creo que deberían pensar más financieramente ¿Saben? Tienen grandes ideas que ponen en práctica pero sus productos los usan los más cercanos ¿Por qué no expandirse más allá? Si tienen un talento ¡Explotenlo! —le sonreí a los gemelos, Fred y George me devolvieron el gesto al unísono, Severus estaba dando clases y yo, pues por lo de Black no podía estar solo así que estaba en el comedor junto con otros alumnos y los maravillosos hermanos de Ron se habían fugado de clases así que me invitaron a sentarme con ellos.

— Nos alegra oírte hablar de eso —dijo el que intuí era Fred.

— Ya que sí Snape se porta mal tenemos pensada varias ideas para los infieles —concluyo el que según yo era George, me tape la boca con el dorso de mi mano para no soltar un estruendosa risa— por cierto, deberías ir en algún momento a la dulcería Honey Duck, comentan las malas lenguas que Snape es un tirano.

— Así que queremos darte esto —casi ruedo los ojos al escuchar el comentario de Sev pero mi compañero no era la persona más dulce con los alumnos tampoco así que lo mejor era callar, por debajo de la mesa me entregaron un pergamino viejo, puso una varita sobre el y dijo bajito— juro solemnemente que mis intenciones no son buenas.

Varias líneas comenzaron a dibujarse al rededor para después dar a demostrar un mapa, estaba sorprendido, el nombre de todos estaba allí, las pisadas, sus recorridos.

— Hay un pasaje secreto, no te lo daríamos si corrieras peligro, es sólo que —dijo George.

— Un embarazado tiene sus antojos —concluyo Fred, asentí y lo tomé— después de finalizar debes decir, travesura realizada y tú secreto estará a salvo.

Más tarde, cuando ya estaba a punto de oscurecer revise el mapa mientras comía golosinas acostado en la cama, Sev estaba buscando la comida y ya los alumnos seguramente estaban a punto de entrar al comedor, me gustaba tener un pequeño secreto conmigo, la verdad lo veía inofensivo porque no lo usaría para nada malo, quizás en algún momento para espiar a mi compañero pero aún no me daba razones para hacerlo. Mire divertido a dos pares de pies en un cubículo de baño, doble para ver la siguiente página, el pedazo de chocolate que se dirigía a mi boca quedo a centímetros de la misma al ver un nombre, "Peter Pettigrew", pero él... Estaba muerto, me levanté de un salto de la cama y poniendo mi túnica sobre mis hombros salí de la habitación en camino al lugar en donde indicaba el nombre, con cuidando de esconder el pergamino, para mi suerte las mazmorras estaban vacías, al llegar al pasillo indicado las pisadas se detuvieron en un momento a un par de metros cerca de mi, luego comenzaron a acercarse con velocidad a mi dirección, me tense esperando algo pero sólo me pasaron por un lado, mire hacia atrás para encontrar el rastro de algo pero ni siquiera había un estudiante, confundido volví a mirar el mapa pero este me fue arrebatado de mis manos.

— Harry ¿Qué haces con esto? —el profesor Lupin tenía el ceño fruncido por confusión, trague grueso no sabiendo que contestar— debiste entregar esto inmediatamente a un profesor.

— Pero... —negó y me interrumpió.

— Esto pudo haber acabado en las manos equivocadas ¿Y si Sirius Black lo hubiera encontrado? —él definitivamente estaba enojado y tenía toda la razón para estarlo, quería esconderme de lo avergonzado que me encontraba, tenía que dejar de ser tan ingenuo, puse en peligro la vida de los estudiantes y maestros.

— Lo siento, es sólo que apreció algo —me pase las manos por el cabello frustrado, mis mejillas seguramente sonrojadas—, no creo que funcione del todo bien profesor, el nombre de un muerto apareció, Peter Pettigrew, sin quitarle su tiempo debo volver a la habitación antes de que mi compañero regrese.

Mezcla el verde con el negro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora