The Arsonist ~SpainRp

𝟘𝟘𝟙

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Me encuentro en el aeropuerto esperando a un taxi con mi maleta en la mano. Hoy me mudaría a Los Santos para estar con mis mejores amigos Gustabo y Horacio. Llevamos unos cuantos años separados y les echo de menos ya que llevamos juntos toda la vida, y por cuestiones de trabajo tuve que irme a Rusia dejándolos solos en una nueva ciudad.

En cuanto el taxi llego subí la maleta al maletero y me monte en los asientos traseros.

-¿A donde la llevo señorita?-el taxista me miro esperando mi respuesta.

-A la comisaría por favor-le conteste con mi leve acento ruso.

El me miro curioso pero no puso pegas, en cuanto se aseguro de que me había abrochado el cinturón arrancó rumbo a donde le había indicado. El viaje se me hizo eterno principalmente por lo nervios que sentía de volver a ver a mis mejores amigos y de mudarme a una nueva ciudad, lo que implica conocer gente nueva ,buscar un trabajo, buscar un apartamento. Son muchas cosas y suelo ser muy caótica cuando se trata de responsabilidades ,supongo que eso lo saqué de Horacio.

-Señorita hemos llegado- el taxista me sacó de mi ensoñación, no me había percatado de que estábamos frente a un edificio moderno con unas banderas a la entrada.

Le pagué al taxista por su servicio y baje del vehículo sacando mi maleta del maletero. Me acerqué a paso seguro al edificio que tenía un letrero que me indicaba que se trataba de comisaría. Al llegar a la puerta puede ver a unas personas tocando la guitarra y bailando, se me hizo curioso y no pude evitar reírme ante lo mal que cantaban. Cuando entré por la puerta pude apreciar el caos que había, se me hizo muy extraño ya que al ser la comisaría me esperaba que la gente tuviera mas respeto y que todo estuviera mas controlado. En lo que inspeccionaba el lugar con la mirada salió por una puerta un hombre alto y trajeado con gafas de sol ,acompañado de otro hombre alto de pelo blanco y con una camisa granate.

-¡Ya me estáis despejando la comisaría CAPULLOS!-su grito me asusto ligeramente pero permanecí quieta en mi lugar.

La gente empezó a gritar y a reclamar que sus denuncias fueran atendidas. No pude evitar poner mala cara debido al dolor de cabeza que me estaban levantando sus gritos.

-¡El que no salga ahora mismo por esa puerta será enviado a la federal a comer perpetua!-el hombre de pelo blanco grisáceo que acompañaba al otro hombre trajeado se impuso.

-Vorkó yo te dejo que me envíe' a donde tu quiera' si me hace' er niconi- una mujer mayor de aspecto desagradable se dirigió al peli-gris.

-Que asco por favor- la respuesta del peli-gris me saco una leve risa.

De repente el hombre de traje sacó la porra de su cinturón y empezó a amenazar a las personas que se encontraban mas cerca suyo , lo que provocó que la gente empezara a correr en manada hacia la salida llevándome por el camino. Me caí de culo al suelo y me quedé algo aturdida de modo que no me di cuenta de que los dos hombres se habían acercado a mi.

-Vamos a ver muñeca, ¿tienes algún problema de oído? , He dicho que quería a todo el mundo fuera de comisaría- el hombre de traje fue el primero en dirigirse a mi.

-Lo siento pero como verá, no he tenido la oportunidad de hacerlo porque me han tirado al suelo, e igualmente no pensaba irme, estoy esperando a mis amigos , me dijeron que viniese aquí- decidí no hacer caso a su "amable" propuesta de que me fuera de aquí, para ese momento yo ya estaba de pie enfrente del hombre con corbata y de brazos cruzados.

-Vaya vaya parece que la perrita tiene malas pulgas- decidí ignorar su comentario y sentarme en una de las sillas de la recepción- Te he dicho que te vayas no que te sientes, pero ya que estás ¿quieres que te saque unas pastas o algo súper nena?