La chaqueta

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-Alicia relájate si, no pasa nada- trato de calmarla la rubia, aunque fue en vano porque a la pelirroja estaba por darle un ataque de pánico.
-SI QUE PASA CASSANDRA, PERDÍ ESA CHAQUETA- Gritó Alicia entre sollozos y rabia.
-Pero amor que tiene de especial?- dijo Cassy desconcertada, ¿acaso su chica no podía comprarse una nueva chaqueta?
-ES LA ÚNICA COSA QUE TENGO DE MI MADRE, LA CHAQUETA ERA DE ELLA- Alicia miro su bolso y sacó una billetera, en ella, tenía una foto de una mini Alicia, que se veía feliz.

-Pero amor que tiene de especial?- dijo Cassy desconcertada, ¿acaso su chica no podía comprarse una nueva chaqueta?-ES LA ÚNICA COSA QUE TENGO DE MI MADRE, LA CHAQUETA ERA DE ELLA- Alicia miro su bolso y sacó una billetera, en ella, tenía una foto...

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-Esa chaqueta me la quedé cuando mi madre entró en rehabilitación, cuando mi padre nos dejó. Realmente puede parecerte una tontería, pero como mis tías tiraron todas sus cosas, solo pude quedarme con esto, y así me siento protegida.- dijo la pelirroja dejando caer sus lagrimas sobre la linda y antigua fotografía.
-Ali, lo siento mucho, te voy a ayudar- le dijo la rubia dándole un cálido abrazo.
-¿¡COMO SE SUPONE QUE VOY A RECUPERAR ESA CHAQUETA?!-grito alterada.
-Oye, eres mi pelirroja de París, estamos destinadas, algo se me ocurrirá, pero ahora estoy cansada y quiero que dormir.- dijo la rubia entrecerrando sus ojos.
Se quitó esa ropa que llevaba puesta, quedando en ropa interior, y se soltó el pelo para estar más cómoda. Tomo un pijama que llevaba en su maleta y se lo puso, pudo darse cuenta por el espejo que Alicia la estaba mirando con deseos de darle (y no consejos).
-¿Que coño haces tia?- le dijo Cassandra en chiste.
-Nada, me fijaba que desde aquí hay buenas vistas- dijo con una sonrisa.
-Pero estas mirando mi culo nena- dijo Cassandra ya con ganas de dormir o podía llegar a matar a alguien producto del sueño que tenía.
-Ese es el punto- respondio Alicia relamiendo sus labios.
-Bien, Alicia deja de ser tan pervertida y vete a dormir- Dijo la rubia hartandose de los deseos lesbicos de su novia.
Alicia no se interpuso ante la decisión de Cassandra, en lugar de eso, salió del cuarto dejando a la rubia completamente sola.
Cassandra se acostó boca abajo abrazando un poco su almohada, y cerrando los ojos para prácticamente quedarse dormida en ese mismo instante.
Estaba cansada de todo, de lidiar con Lucas y el amorío que tenia con Alicia, de no ser como era en realidad, de tener que aparentar que no tenía ningún tipo de atracción hacía la pelirroja, y que en general, no la dejaran ser.

Horas despues..

Cassandra se despertó en el cuarto completamente sola, parecía que ya era tarde, y le extrañó que Alicia no se haya acostado a su lado, pero luego escuchó atentamente el rechinar de una cama, que evidentemente era la de Lucas y comprendió todo.
-JODER ALICIA TU Y TU LADO HETERO- se dijo a ella misma maldiciendo el día en el que Lucas había nacido.
En un segundo, recordó que tenía que encontrar la chaqueta de Alicia, y no lo dudo dos veces, pero antes de hacer la locura que tenía planeada, miró la hora de su celular.
-bien, son las 2 de la mañana, tengo tiempo.- debía admitir que aunque no lo demostrara, estaba nerviosa, más que nada por los riesgos que corría, y por traerle problemas a los padres de Lucas, eso era lo último que necesitaba.
-Todo sea por Alicia- dijo en voz baja y salió corriendo hacía la ventana de la habitación para tomar impulso y saltar de esta.
Cabe destacar, que su habitación estaba en un segundo piso, el cual era bastante alto, y la rubia podría haberse matado.
Cassandra cayó directo en el piso, lo cual le dolió un poco, pero más doloroso era el echo de que su pierna derecha había quedado atrapada en un rosal lleno de espinas.
-MIERDA- gritó mientras pegaba un tirón de su pierna para quitarla de ese lugar.
Para su buena suerte podía correr, con dolor, pero podía hacerlo.
Sin dudar un instante, la rubia comenzo a correr lo más rápido que podía para ir a aquel lugar en el que se había realizado el evento. Las calles de Madrid estaban desiertas, no había ni un alma, pero era de esperarse, porque eran las 2 de la mañana, y la gente normal no iba a recuperar chaquetas a alfombras rojas, sino, que estaba durmiendo.
Llego a su destino mucho más rápido de lo que pensaba, pero se vio interrumpida por 2 muchachos que parecían tener 2 años más que ella.
-¿A donde crees que vas niñita?- le preguntó el chico de pelo rizado y marrón.
-Solo vengo a buscar algo que olvide en el evento- dijo Cassy intentando pasar a ese lugar en el que estaban con Alicia esperando a Lucas, pero el chaval la empujó.
-JOPETAS TÍO, ME DEJAS PASAR O SI NO TE DOY VUELTA ESA BONITA CARA QUE TIENES- le dijo Cassandra mirándolo fijamente.
-Si me besas te dejo pasar- dijo el chaval  con una sonrisa.
A Cassandra no le disgustaba, pero en el contexto de la situación, lo último que haría sería besarlo.
-NO PUEDO- Gritó asqueada.
-¿Y por que no?¿que te lo impide guapa?- dijo el chico tomando a Cassandra por los hombros y acercandola de a poco hacia el.
-PORQUE SOY LESBIANA- en ese momento el miedo se apoderó de Cassandra por la reacción que los dos muchachos podrían tener.
Sin moverse de ese lugar, vio como el mismo chico al que intentaron forzarla a besar, estaba a punto de abrir el cierre de su jean que llevaba puesto.
La rubia no lo dudo ni un segundo y corrió como si no hubiera un mañana hacía el lugar donde estaba la chaqueta de Alicia, y efectivamente ahí había quedado. Se la ató en la cintura y continuó corriendo, sabiendo las intenciones que tenían los otros 2 chavales que iban detrás de ella.

En ese momento se detuvo al ver que había un skate, que evidentemente era de uno de aquellos muchachos que la estaban acosando.
Cogio aire y lo tomó para así llegar más rápido a la casa.
Mientras los 2 chicos estaban detrás de ella, la rubia subió al skate y comenzó a tomar carrera tal y como la pelirroja le había explicado aquel día en el parque.
Se sintió libre como la vez que escaparon de la escuela, solo que esta vez, ella estaba sola y escapando de dos posibles violadores.
2 cuadras antes de llegar a la casa, bajó del skate y lo puso bajo su brazo, como toda una profesional.
Cruzó la calle y llamó a Alicia, para su buena suerte, atendió.

-¿¡CASSANDRA DONDE COJONES ESTAS?!-
-Mira, he vuelto a buscar tu puta chaqueta, y mas te vale lo agradezcas porque se me ha liado pardisima- dijo la rubia indignada.
-Dios te amo, pero ahora si, VUELVE A LA PUTA CASA O SOY CAPAZ DE PEGARTE EN TODA LA BOCA- Alicia se habia alterado, y no era ninguna sopresa, cualquier persona normal se alteraría porque su pareja no aparece a las 2 de la madrugada.
-Venga, ya voy- resoplo y siguió con su camino.

Poco tiempo después ya había llegado a la casa, la pelirroja le abrió lentamemte la puerta para no hacer ruido, y para que Lucas no se despertara a ver que pasaba.

-DIOS ME ASUSTASTE- le dijo Alicia mientras la besaba suavemente en sus labios.
-Estoy bien, toma tu chaqueta cariño.- Cassandra puso la chaqueta sobre los hombros de la pelirroja, y ambas se fueron corriendo al cuarto antes de poder ser descubiertas.

-¿Hace mucho que te habías ido rubia? No me había dado cuenta porque estaba... ocupada- se excusó Alicia para no tener que dar ningún tipo de explicación, pero fue en vano porque Cassandra ya tenía muy claro que estaba haciendo Alicia cuando se fue.
-¿Estabas ocupada follandote a Lucas?- la acusó entre risas.
-¿¡COÑO CASSY NOS ESTABAS ESPIANDO?!- La pelirroja no se esperaba esa respuesta ni de coña, y entró en un ataque de celos y ansiedad.
-No pedazo de imbecil, tus putos gemidos y la cama de Lucas me despertaron. ¿Que les costaba irse a un motel y dejarme dormir?- se quejó, pero decidió darse media vuelta y acostarse del lado de la pared para dormir.
-Mañana hablamos de esto Cass, recuerda que por la noche tenemos la fiesta y luego nos volvemos al pueblo- le dijo su novia mientras la tomaba por la cintura pegando su cuerpo contra ella y abrazandola para dormir. -No te pongas celosa amor- le dijo con cara de perrito mojado para ver la reacción de la rubia.
-Venga va, pero dejame dormir- respondió dándole un beso en la mejilla.

De todas maneras, la cabeza de Cassandra funcionaba a mil por hora, su pelirroja era como una moneda, tenía una doble cara, y una doble vida. A Cassy esto no le hacía ninguna gracia, pero al mirar el reloj y darse cuenta de que eran casi las 5 de la mañana, decidió dormir y mañana pensar en que decirle a Alicia.

La chica mala - Fanfic Alicia Sierra ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora