Arion x Victor / TenmaxTsurugi( Kyoten)fanfic Y One Shots7u7

El amo (parte 2)

Tenma se despertó gracias a su reloj interno, pues la casa seguía en la oscuridad. No había dormido casi nada y se había olvidado de Tsurugi hasta que le vio observándole a su lado. Se ruborizó y se puso muy nervioso.
-¿C-cuánto tiempo llevas mirándome?
Tsurugi rió.
-Probablemente toda la noche.
-¡¿Qué?! - se puso más rojo aún.
Tsurugi rió de nuevo y añadió:
-Es broma. Pero, ¿has dormido bien?
Tras pensarlo unos segundos Tenma asintió despacio, preguntándose qué le depararía el futuro allí.

Tsurugi se levantó y mientras se dirigía al baño dijo:
-Bien, me alegro porque vamos a tener invitados hoy y quiero que estés fresco.
-¿Invitados?
-Sí. Unos viejos amigos míos. No creerás que no iba a presentar a mi joya del año, ¿verdad? - sonrió y guiñó un ojo antes de cerrar la puerta. Tenma se quedó perplejo. ¿Qué le pasaba a ese chico?

Se quedó un rato pensando en qué estaba pasando y decidió finalmente levantarse y estirarse. Mientras se preguntaba cómo lo haría para desayunar escuchó la puerta del baño abrirse y tras ésta salió Tsurugi completamente desnudo secándose el pelo con una toalla.
-¿Q-qué haces? - se sobresaltó Tenma, rojo y muerto de vergüenza mientras se tapaba la cara para no mirarle.
-Aún no lo pillas, ¿verdad? Tómatelo como si... estuviéramos casados. - dijo completamente serio y sin sorprenderse.
Tenma se sentó en la cama y permaneció dándole la espalda mientras se vestía, intentando tranquilizarse y olvidar lo que acababa de ver, sin querer admitir que ese cuerpo le parecía esculpido por los dioses...

-¿Tienes hambre? - Tenma asintió aún sin mirarle. - Voy a mandar que te traigan el desayuno. Si quieres puedes cambiarte o ducharte. Puedes usar mi ropa. - sonrió y se marchó.
Tenma suspiró aliviado en cuanto le vio salir de la habitación y abrió el armario. Desprendía el aroma de Tsurugi. Cogió lo primero que vio y se cambió de ropa.

Más tarde apareció una criada que le trajo una bandeja llena de comida. Desayunó tranquilamente.
"Este chico... Tiene algo extraño... Pero bueno, por lo menos me trata bien. Podría ser peor." pensó.
Al acabar se acercó a la ventana y corrió un poco la cortina para mirar el patio lleno de flores y arbustos de todos los tipos.
"¿Sus amigos serán como él?"
-¿Qué haces? - le sobresaltó una voz en su espalda. Al darse la vuelta vio a Tsurugi en un traje negro muy elegante y con una expresión seria. Inmediatamente cerró las cortinas y se disculpó.
-No habras las cortinas, por favor. Es lo único que te pido.
Tenma asintió aunque completamente confuso, pero no quería preguntar ni molestarle.
Tsurugi se acercó a él cambiando su expresión a una más amable.
-Pero bueno, ¿qué te has puesto? - rió. - ¿No había nada más elegante? - se paró a pensar y de repente se iluminó su cara. - Tengo algo perfecto para ti. - le cogió del hombro e hizo que le siguiera hasta otra habitación. Cogió algo del armario y se lo dio.
-Toma, ponte ésto mejor.
Tenma lo cogió timidamente y lo miró. Era una prenda muy rara pero no llevaba a saber cuál. Pese a que se sentía muy incómodo tuvo que cambiarse ante la atenta y penetrante mirada de Tsurugi. Cuando se dio cuenta de lo que se estaba poniendo se maldijo a sí mismo y acabó de abrochárselo.
-¿En serio? - dijo totalmente indignado mientras se miraba los brazos.
-Pero, ¡si te queda genial!
-Esto es ridículo...
Tsurugi fue a mirarle de cerca, lo que le incomodó aún más. Le había hecho ponerse un traje de maid japonés.

Tsurugi le observó de arriba a abajo e incluso levantó su falda, tenía una cara de satisfacción; a lo que Tenma respondió apartándole molesto. Tsurugi le cogió del brazo y se acercó mucho a él.
-Recuerda tu posición. - susurró.
Tenma miró hacia otro lado y le soltó.
-Bien. Pues ahora toca esperar. Ya están preparando todo para cuando lleguen.

Tenma se limitó a sentarse en un sofá y mirar al suelo. Tenía miedo de que algo ocurriera, pero sobre todo mucha vergüenza de cómo iba vestido. Pero no podía hacer nada...

Al rato Tsurugi le llamó por su nombre y por unos segundos se quedó mirándole sin reaccionar. A parte del traje que ya llevaba de antes se había arreglado más y llevaba el pelo peinado hacia atrás, lo que le quedaba muy bien y favorecía mucho. Muerto de vergüenza por su reacción se sonrojó un poco y fue hacia Tsurugi para ver qué ocurría.
-Ya han llegado. Acompáñame a invitarles. - sonrió e hizo que le siguiera por el oscuro pasillo. Iba mirando al suelo queriendo que la tierra le tragase.

Cuando llegaron a la puerta se encontraron con tres chicos: uno rubio de pelo largo y una expresión de autosuficiencia, uno de pelo negro y flequillo hacia un lado y un último pelirrojo con unos intensos ojos azules. Todos iban muy elegantes, lo que hizo que Tenma se avergonzara más y su cara se tiñera de rojo.
-Éste es Tenma, como os conté.
Tenma le miró confuso. "¿Cómo que como os conté? ¿El qué contaste?" pensó.
Todos le saludaron como si nada. A ninguno le parecía extraño la forma en la que vestía, pero aún así a Tenma le daba mala espina algo.

Se sentaron todos en la mesa llena de comida y charlaron con Tsurugi ignorando por completo al castaño, que comía en silencio y tratando de no tener contacto visual con nadie.
Por fin el rubio fue el primero a dignarse a mirarle y trató de entablar una conversación con él.
-¿Y lo habéis hecho ya? - preguntó con una sonrisa. Tenma se puso muy rojo.
-¿Qué? ¡¿El qué?! - los chicos se miraron entre ellos y rieron, incluido Tsurugi.
-Aún no. - dijo entre risas el peliazul.
Tenma se giró hacia él y dijo muy alterado:
-¿Cómo que aún no? ¿De qué estáis hablando?
Rieron de nuevo ante su reacción y cuchichearon varias cosas.
-No me digas que eres de esa clase de chicos. - dijo con una sonrisa el rubio, causando aún más confusión e incomodidad a Tenma, que sólo quería salir de ahí.
-Entonces eres...
Rápidamente y viendo la incomodidad de Tenma Tsurugi le cortó:
-Bueno, dejadle en paz por favor. - su tono era ya serio.
Al momento todas sus caras se volvieron serias, como si le temieran. Tenma negó con la cabeza, flipando con todo lo que estaba ocurriendo.

-Voy al baño un momento. - dijo Tenma para ir a lavarse la cara y despejarse un poco.
-Me pido ir después. - dijo el rubio con su sonrisa que no le aportaba ningún tipo de buena vibración.
Tenma se levantó desconfiado y fue a buscar el baño entre la oscuridad del pasillo pobremente iluminado por las velas. Cuando por fin lo encontró se quedó perplejo al abrir la puerta de lo grande que era, además de como todo en la casa lujoso. Era un baño con un montón de lavabos, una gran bañera y un retrete dorado. Cerró la puerta tras de sí y se miró al espejo que ocupaba toda esa gran pared. Negó con la cabeza para sí mismo y se echo agua en la cara frenéticamente. Se miró de nuevo y cuando cogió la toalla para secarse se abrió la puerta, metiéndole un susto enorme.
-Oh, pensé que habías acabado ya. - dijo entrando el rubio con una sonrisa seductora. - Sólo venía a refrescarme un poco, hace calor aquí.
Se acercó a Tenma y abrió el grifo de al lado de su lavabo, mirándole mientras se lavaba las manos y se las secaba. Tenma fue a irse pero le detuvo cogiéndole del brazo.
-Pero no te vayas ya, que no hemos hablado. Cuéntame, ¿qué tal con Tsurugi? Es majo, ¿verdad?
Tenma le miró con desconfianza y apartó su mano, asintiendo ligeramente con la cabeza. Volvió a intentar abrir la puerta pero rápidamente se interpuso de nuevo en su camino, poniéndose delante suya con una gran sonrisa.
-¿Te ha mordido ya? - preguntó.
-¿Cómo? - respondió confuso.
El chico cogió su cara y la giró para cuidadosamente mirarle el cuello.
-Vaya, pues si que está tardando. Ya me gustaría ser a mí el primero en probarte.
Tenma se puso pálido.
-¿Q-qué? - dijo tratando de que salieran sus palabras.
El rubio se lamió los labios y se acercó a su cuello, agarrando a Tenma por la cintura.
-Hacía miles de años que no podía disfrutar de un poco de sangre de verdad.
Tenma trató de apartarle pero era mucho más fuerte que él y no pudo siquiera moverse. El chico lamió su cuello provocándole un escalofrío de puro terror.
-¡BASTA! - gritó Tenma sin poder contenerse más, lo que provocó la risa del chico y se separó de su cuello. - ¿De qué va todo esto?- añadió.
Su respuesta fue una mirada confusa.
-¿No te lo ha contado Tsurugi? Me sorprende. Qué mal por su parte.
Tenma le miró sin entender nada y bastante furioso por lo que acababa de pasar.
-¿No te había dicho que es un vampiro?

***
Os he dejado dos regalitos como habréis visto jaja. Me alegro de que os gustara el primer capítulo de este Au. La verdad esque disfruto mucho escribiéndolo asique genial! No sé cuánto durará esta mini historia, depende de mis ideas y de si os va gustando o queréis más.
Un saludo 😔❤️