La Química del Amor

1. El Alumno estrella.

Tharn estaba agotado tanto física como emocionalmente, llevaba casi toda la semana dando llamados de atención a su estudiante mas problemático, que en ese momento estaba jugando con el balón de fútbol dentro del aula, cuando entró por la puerta, pateó el balón y este rebotó muy cerca del rostro del maestro, fue tanto la sorpresa que todos quedaron en silencio, observaron atentamente la reacción del profesor Tharn esperando una reprimenda por tal acto.

-Type deja ese balón o tendré que decomisarlo y no lo vas a recuperar hasta finalizar el año. - Sus palabras habrían tenido efecto si el alumno en mención no fuera un idiota listo que parecía nada importarle, claro el no podía decir eso en voz alta.

Type no dijo nada, solo corrió donde había caído el balón, lo recogió y caminó hacia su maestro con paso firme, depositó el balón en manos de éste y al hacer eso sus dedos rosaron los de su maestro, no por accidente, muy despacio retiró sus manos y le dijo en un susurro:

-Puede quedárselo solo si me deja pasar por su oficina mas tarde, puedo hacer cualquier cosa para recuperarlo. - Como lo dijo no parecía sonar nada provocativo considerando el carácter de Type, pero si alguien escuchaba esa frase podía malinterpretarla.

Tharn solo tomó el balón y comenzó a dar su clase como cada mañana, un niño apuesto de tez bronceada y ojos expresivos lo observaba atento a la clase, con su barbilla apoyada en la mano, Tharn no se explicaba como un chico tan inteligente como Type podía desaprobechar las oportunidades que este tenía, sus padres lo adoraban y estaban comprometidos con su educación, pero él no era el mejor promedio de su escuela, la única clase en la que destacaba era en deportes. En química, que era la clase que tharn impartía en último año de secundaria, por lo general sus trabajos no estaba por debajo del promedio, pero no eran excelente, ahora en sus exámenes nunca perdía un punto, lo cual siempre lograba aprobar.

Mas tarde ese mismo día, mientras revisaba trabajos asignados en su oficina, se distrajo al observar el balón que había cerca de un archivero, recordando sus días de juventud cuando era un niño que solo le interesaba la música, pero su padre quería que estudiara algo que pudiera darle de comer, así que se decidió ser maestro, ya que le gustaba enseñar a tocar instrumentos, y le gustaba la química decidió ser maestro de química, pero sin dejar la música de lado. Esa era su pasión y jamás iba a dejarla.

Estaba tan sumido en sus pensamientos que no notó cuando se abría la puerta de su oficina y un adolescente metía la cabeza por esta.

- ¿Puedo pasar? - preguntó el estudiante con aspecto inocente.

- Ya estás adentro. - respondió Tharn. Type entró y se puso cómodo en una de las sillas frente a su escritorio.

- Maestro ¿Puedo tener lo que es mío? - ¿Por qué esa pregunta sonó extraña? ¿Por qué dijo "tener" y no "recuperar"?

- Type, te advertí que iba a decomisarte ese balón y tu fuiste el que lo puso en mi mano, después de que dije que no te lo iba a devolver hasta fin de año. - dijo el maestro lo más serio que pudo.

- Ummm lo se, entonces que se quede aquí, sería bueno que algo mio esté aquí, pero no hablaba del balón. - Por un momento Tharn quedó tan sorprendido por esa declaración que no supo que decir.

- Escucha niño, solo faltan tres meses para que termine el ciclo escolar, deberías a estas alturas preocuparte por tu futuro, dime; ¿cuales son tus planes? - dijo Tharn después de recuperarse de la impresión, y cambiando de tema.

- ¿mis planes? Eso es interesante ahora que lo menciona, me gustaría decir que no tengo planes, pero estaría mintiendo, hay solo una cosa que me gustaría más que el fútbol. - las palabras de Type quedaron remarcadas cuando su mirada se dirigió al techo como si fuera lo más importante que dijo en su vida.