Desenfreno || Chaelisa G!P

*05*

Rosé Pov

(...)

—Espera, entonces ¿solo tres personas de esa lista son extremadamente peligrosas?— Preguntaba Jisoo algo insegura después de la información que le había revelado previamente, yo asentí en respuesta.

—Pero ahora, yo que tu me andaría con cuidado con Nayeon, puede que no todo esté bien aquí dentro.— Señalé mi cabeza dando a entender que podría estar loca.

—Ni me lo digas—dijo quitándole importancia—en fin, deberíamos ir a la asamblea— mencionó Jisoo levantándose de su lugar para ir al espejo y arreglar su atuendo algo desaliñado después del ataque hacia la chica de dientes de conejo.

No demoramos mucho en salir y encaminarnos hacia el auditorio B, hablábamos de nuestro horario escolar y lo afortunadas que éramos al compartir casi todas las materias, Jisoo era un soporte del que no quería prescindir.

Nos encontrábamos a pocos metros de la puerta del auditorio cuando escuchamos unos sollozos que venían de un callejón antes de doblar hasta donde estábamos.

—¿También escuchaste eso?— preguntó Jisoo preocupada, asentí en respuesta — viene de allá señaló dicho lugar.

No quería verme involucrada en cualquier conflicto que estuviera pasando, así que tomé a Jisoo del brazo y traté de arrastrarla hasta la puerta del auditorio, pero detuve mis esfuerzos cuando escuché una voz masculina hablar.

"Jodida Kang te dije mil veces que no podías ver a mi novia directamente a los ojos".

Me tensé completamente al escuchar el apellido de Seulgi.

—¿Qué así no se apellida tu compañera de habitación?—preguntó Jisoo y yo no tuve más opción que asentir.

No sé en que momento seguí a Jisoo hasta aquel callejón, sin embargo, nos detuvimos al ver lo que sucedía.

La imagen que se mostraba no era nada favorable para Seulgi, un estudiante que reconocí rápidamente como Park Chanyeol, integrante del Golden Club, estaba sujetando por el cuello de la camisa a la más baja.

—Cariño, ¿no crees que estas siendo un poco rudo con ésta estúpida? — dijo una pelinegra bajita de bonitas facciones.

—No lo creo dulzura.— dijo entre dientes.

—Suéltame por favor.— suplicaba Seulgi.

—Claro, ¿por qué no lo pensé antes?— Chanyeol tiró de Seulgi y la estrelló contra el suelo, un ruido seco se escuchó en toda el pasillo.

Jisoo y yo no pudimos evitar correr hasta ella, y asegurarnos de que estuviera, dentro de lo que cabe, bien.

Por instinto llevé mi mano a su nuca para asegurarme de que no se había golpeado tan gravemente.

Mi vista pasó del más alto a la pelinegra que me veía con el ceño fruncido, la reconocí como Bae Joon-hyun.

—Veo que hiciste amigas— dijo apretando la mandíbula.

—Apenas las conocí hace un par de horas— Seulgi trató de explicar vagamente cómo si le debiera explicación alguna a la pelinegra.

—Carne fresca entonces.—mostró una sonrisa malévola.

—Carne fresca mi trasero, me ponen un dedo encima a mi o a alguna de estas dos y no la cuentan.— amenazó Jisoo.

Ambos se miraron sorprendidos ante su irreverencia, pero rieron después de unos segundos.

—Espera y verás.— guiñó un ojo y tomó del brazo al más alto dejándonos con una Seulgi preocupada.

—En qué se metieron...— susurró Seulgi adolorida.