Desenfreno || Chaelisa G!P

*06*

Pov Rosé

—Cómo es posible... —

Quedé atónita observado de lejos la figura de Lisa, era ella estaba más que segura, lo que no terminaba de entender era el porqué estaba ahí, ¿qué rayos hacía aquí?

Las demás tropezaron conmigo en cuanto me paralicé sacándome de mi ensoñación.

—¿Porqué te detienes así de repente?— preguntó Jisoo.

Al no formular una respuesta coherente sólo señale con la cabeza lo que estaba observado.

—¡Qué carajos!—exclamó Jisoo atrayendo la atención de algunos estudiantes que pasaban por aquí incluyendo a Seulgi.

—Oh, veo que ya vieron quien será nuestra nueva directora—comentó como si nada la castaña.

—¿LA QUÉ?— cuestionamos al mismo tiempo.

Seulgi extrañada de nuestra reacción reafirmó lo que había dicho.

—Lalisa Manoban, la sucesora al puesto de directora, parte de la asamblea era para presentarse oficialmente, ella dirigirá el internado este año— informó.

Jisoo y yo nos miramos notablemente fuera de nosotras mismas.

(...)

Una semana después y seguía preguntándome cómo era posible esto, no sabía que estaba pagando, ¿porqué simplemente no pudo ser otra persona?¿Por qué precisamente ella?

En mi mente taladraba la última vez que la vi, ¿Qué pensará cuando me vea y se enteré que no soy nada más que una simple estudiante?, es que esto no lo planee, ni en mis más locos sueños lo vi, como jodidos iba a poder concentrarme sí tenía que estar pendiente de que ni de chiste nos crucemos.

—¡Maldición!— exclamé.

—¡Buenos días a ti también!—saludó irónicamente Jisoo mientras entraba como Pedro en su casa a mi habitación.—Vamos Rosé, no puedes vivir encerrada en esta habitación todo lo que queda de curso, en algún momento se verán las caras.

Quería evitar a toda costa ese momento, sí por mi fuera nunca en ésta vida me la cruzaría, pero era Jisoo la que insistía en que debía salir a socializar y dejar este ambiente, sin importarle que Lisa me reconociera en algún momento.

—¡Todo esto es tu culpa!— le recordé, sí ella no hubiera mentido, yo no estaría en esta situación, o bueno, quizá si, pero no me sentiría culpable por haberle mentido.

—Vamos, fue una mentira piadosa, todos lo hacen en algún momento, además, no te vi quejándote cuando quedaste encerrada con cierta señorita.— dijo provocando que mi cara se calentara y por lo mismo enrojeciera.

—Me abandonaste en ese lugar.— la acuse.

Jisoo apartó el rostro culpable que llevaba y bufo chasqueando la lengua.

—Lo siento.—susurro apenas.—pero lo hecho, hecho está Rosé, ahora, mueve el trasero que llegaremos tarde a la primera clase.

Esta vez bufé yo mientras salía de la cama bajo la atenta mirada de la mayor, busqué mi cepillo de dientes y mi uniforme, entre al baño para asearme correctamente y vestirme como correspondía.

Al volver a la habitación encontré a Seulgi acomodando algunas cosas en su bolso, me miró de reojo y advirtió mi presencia.

—Buenos días dormilona—Saludó cortésmente.

—¿Porqué no me levantaste cuando despertaste? —pregunté antes de devolverle el saludo.

—Oh, pues madrugué, no sabía sí levantarte o no a las 5 de la mañana sería buena idea, así que decidí dejarte dormir un poco más.— respondió siguiendo con lo suyo.