Será Antes De La Primavera.

9.4K 1.2K 1K
                                    

—¡Quiero morir! —Grito al entrar a su casa tirando su mochila contra la pared, subir las escalares encerrandose en su habitación para caer boca abajo sobre la cama—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Quiero morir! —Grito al entrar a su casa tirando su mochila contra la pared, subir las escalares encerrandose en su habitación para caer boca abajo sobre la cama—. Mantenme, matenme, matenme.

¿Podia estar más jodido?

Pensó que las cosas serían más fáciles después de escuchar la verdad y los verdaderos sentimientos de Katsuki. Y no hablemos de ese abrazo.

¡Ja! Pero que equivocado estaba.

Katsuki había dejado de gustar de él. Sí. Pero era porque ahora lo amaba. Y estaba dispuesto a hacer lo que fuera para ganarse su confianza y corazón.

Él mismo se lo había dicho. Y fue muy impactante viniendo de él.

¿Qué cosa ha estado leyendo? ¿Shakespeare?

—Esto no puede estar pasando.

Claro que le encantaría. Katsuki seguía gustandole. Mucho.

Tomó una almhoada y ahogo un fuerte grito en ella.

—¿Qué hago? —Lloriqueo.

Quería darle la oportunidad. Claro que sí. Después de escuchar todo lo que pasó solo, quería darle esa oportunidad para arreglar las cosas. Aunque las cicatrices nunca desaparecerian.

Pero ¿y si cometía un error?

Gimió al caerse de la cama por todo el ajetreo y por estar sumergido en sus revueltos pensamientos.

Habían tocado la puerta.

—¿Izuku? ¿Estás bien, cariño?

Era su mamá.

Había olvidado que hoy llegaría temprano del trabajo.

Izuku miró el piso. Pensativo.

Tal vez debería preguntarle a su madre. No había pesando en ella porque temia como reaccionaria al enterarse de todo lo que había pasado.

Pero de alguna manera quería un consejo amoroso y meter a Yō en problemas. Muchísimos problemas.

—¿Está todo bien? ¿Necesitas algo?

—¡Espera un momento, mamá!

Se levantó del piso, masajeando su trasero por el golpe.

Abrió la puerta y se encontró con la mirada angustiada de su madre.

Suspiro.

Era su última carta.

Denki y él eran buenos dando consejos medio raros, pero para seguirlos eran imbéciles que caminaban con una venda en los ojos.

Y el amor no estaba en sus reservas.

—Mamá —Trago saliva—… ¿puedes ayudarme?

Al final no fue tan malo.

Me vuelves loco [KatsuDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora