Capítulo 9 - Paradoja del Presente Múltiple

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Los erráticos espasmos provocados por las convulsiones empeoraban minuto a minuto en el hombre de cabello castaño que actualmente era transportado con apuro hasta las salas médicas por exigencia de Emma Frost y Jean Grey.

La sangre fluía de la nariz del inconsciente vigilante, goteando por los costados de la cara y cayendo periódicamente al suelo de la isla, generando un camino de flores azules que aparentaban ser ya la marca registrada del arácnido cada vez que sufría una herida allí. No obstante, por más bellas que resultasen, no dejaban de significar un tema en especial, y era que cierta persona sufría de una manera u otra.

A pesar del desespero que las psíquicas presentes en el Concejo Silente adquirieron, fueron capaces de razonar de inmediato. Optando por alzar el cuerpo del arácnido mediante sus poderes para evitar que las teletransportaciones de Nightcrawler pudiesen afectarle por las sacudidas, empeorando las convulsiones.

-Qué fue lo que ocurrió? – siguiendo al grupo, Shaw inquirió a las dos personas que habían acompañado al tótem.

-Webs se hizo de los poderes que Julia Carpenter tenía- alegó Logan en un gruñido, maldiciéndose por dentro al no poder imaginar que un escenario así se presentaría.

-La heroína cuyo nombre es Spiderwoman? – recordando vagos flashes de la guerra civil que hubo entre los héroes, respondió dudoso Erik con otra interrogante.

-Creí que su alias era Madame Web- expresó el líder mutante de la nación, rememorando lo que las cinco mujeres que cuidaron diligentemente del capullo de seda hace unas semanas le dijeron.

Antes de que Summers alcanzara a pronunciar una corrección en las respuestas de los ancianos mutantes, una delgada mano apresó el frente de sus ropas en un firme puño y presurosamente fue jalado hacia delante donde una Reina Blanca trataba de reinar sobre su nerviosa furia, al mismo tiempo que levitaba el herido cuerpo del tótem.

Y no solo la blonda estaba teniendo un pico de pánico ante el estado del Parker, sino que Jean Grey sufría una emoción similar que controlaba a duras penas por el simple hecho de ser quien estaba encargada de mantener fijo en su lugar al castaño. Dedicándole siempre una triste mirada por la marca que ahora podía divisar a lo largo de sus ojos chocolates, cuestionándose repetidas veces el origen de tal daño.

-Quiero la verdad, Summers. Y la quiero ya- exigió en un mortal tono gélido Emma Frost, deseosa de cristalizar su fisionomía para golpear a su ex amante ya que no le hacía falta sondearle la mente para saber que algo ocultaba.

-Está bien...pero suéltame y sigamos el camino- zafándose del venenoso agarre de la dama, Cyclops aceptó los términos al mismo tiempo que imponía los suyos.

Factor que la rubia de blancas vestimentas concordó y se apresuró junto a Marvel Girl en alcanzar la sala médica, ignorando la llegada de tres mujeres más que fueron llamadas por Xavier al creer que era un tema que les competía.

Por supuesto esto lo notaron rápido aquellos dos X-men que Kurt Wagner había transportado, provocándoles migrañas y el gemir lastimeramente porque de seguro serían hostigados. Siendo Logan el principal afectado ya que desde su llegada Ororo no le había quitado la vista de encima debido a la daga que llevaba en la cintura.

-Rápido, acuéstenlo en la camilla e intenten suministrarle un calmante! – comandó Captain Britain, quien al atestiguar lo que ocurría, decidió despejar un catre cercano con cajas encima mientras Hope y Kwannon buscaban lo requerido.

-Ponlo de costado y trata de no sujetarlo con fuerzas, Emma- indicó la pelirroja telépata, dejando a un lado las gafas que Miguel le dio a Peter, para regresar segundos posteriores con una cánula Guedell e intentar introducirlo en la boca del varón.

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