El padrino

cap 9

A las 10 AM en punto Casablancas se encontraba junto con sus guardaespaldas entrando en la mansión de uno de sus socios principales y primo albert.

- Hey hombre !! -  dijo su primo alegre al verlo llegar.

Albert vestia unos pantalones de traje de baño verde con unas palmeras estampadas y una camisa manga corta morada. Seguido de unos lentes y sus exageradas joyas.

- Estas de descanso hoy pequeño bastardo?- dijo j mientras sonreía al verlo vestido así.

- Si primo. Luego de esa Bomba de fiesta que diste tenia que descansar un poco - dijo riendo.

- ah si?- dijo j sonriendo con orgullo - sabes que mis fiestas siempre se hacen notar-

- Quieres un vino o una cerveza? , ven pasa vamos a mi piscina..-

Los guardaespaldas estaba a un lado de casablancas armados y quietos como paredes, mientras los de su querido primo estaban por todo su hogar vigilando cualquier inconveniente.

Para j y a esa protección no era algo de otro mundo pues desde el día de su nacimiento la habían tenido.

Podían hablar tranquilamente por horas mientras fumaban o bebian sin siquiera prestar atención a que otros oídos escuchaban lo que ellos decían...

- si hombre te lo digo!!, fue una gran fiesta!!- dijo albert a j mientras bebian sentados en una de las mesas a un lado de la piscina.

- La verdad no recuerdo nada de esa maldita fiesta - dijo  mientras veía a los 2 pequeños hijos de albert jugar en la piscina.

- Todos se fueron felices, hablarán de esa mierda por semanas amigo -sonrió - por cierto la novia.. buenísima !!Bravo!! -comenzó a aplaudir mientras sentía.

- Eso es cierto, no me equivoque al elegir a la mujer - sonrió con orgullo.

- eso dijo el gordo luigui anoche -

- Ah si?- tomo un sorbo de su bebida - que dijo ese gordo maldito - sonrió.

- Qué tu mujer estaba muy bien y que cuando la soltaras se la mandaras. .ya sabes para darle unas cojidas - río un poco.

- Hahahaha ese gordo desgraciado !!! - dijo entre risas. - cuando me canse se la mando jahaha-

- Hablas enserio hombre? , tanta boda para solo unas cojdas?- dijo sorprendo.

- Ya sabes como soy- sonrió con orgullo. - depende de que tan buena sea en el sexo-

- no te la tiraste ya?!!- grito sorprendido

- Me dolia mucho la cabeza, ya en un rato cuando llegue a casa la pruebo. . Esta nuevesita solo para mi - dijo tranquilamente.

- Cómo estás tan seguro? , la conociste en un club como a una perra más -

- Estoy seguro de ello albert - dijo pensativo.

-Eso sería tener suerte-

- Ya lo se, cuando llegue a casa le voy  a enseñar el gran honor de que yo me la coja jajaja- dijo entre risas.

Albert tenia 2 hijos varones y estaba casado desde hace 4 años.  Su mujer estaba en el tennis mientras las Nanas de los niños los cuidaban día y noche ya que ella siempre estaba disfrutando de los lujos que le daba el dinero.

Albert era muy ocupado. El manejaba parte de los negocios en la familia y además era la mano derecha de Julián desde siempre. Se podía decir que era el único en el que confiaba y el único que lo veía reír de verdad.