¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Si a Youngjo le hubiesen dicho hace algunos años que su aburrida vida cambiaría de una manera impactante por la simple presencia de Hwanwoong en ella, no lo hubiera creído.
Pero ahí estaba, caminando de la mano con su lindo novio rubio hacia la piscina de la escuela donde aún seguían estudiando.
Cuando lo pensaba, se sorprendía de sobremanera al darse cuenta de la cantidad de tiempo que había estado junto a él, pues entre más lo veía, más se enamoraba de Hwanwoong.
Sin duda, el golpe de la pubertad había hecho maravillas en Hwanwoong, dejando a un lado sus regordetas mejillas como cuando eran más pequeños, para reemplazarlas por una afilada y delicada línea bien definida en su mandíbula.
Pero también, Hwanwoong quedaba aún más maravillado cuando miraba lo bien que le había sentado la etapa del cambio a Youngjo. El mayor era algo así como el chico popular en el instituto.
Los hombros de Youngjo eran bastante anchos, producto de que estuviera en el equipo de natación, que Hwanwoong podía esconderse perfectamente detrás de él cuando llegaban más tarde de lo que la señora Yeo les había dejado.
Por supuesto que para Hwanwoong era un deleite ir a ver a su novio a las competiciones. Sin embargo, no podía evitar fruncir su ceño cuando chicas y chicos de la escuela gritaban alocadamente cuando lo veían con el traje de baño puesto.
Eso sí le molestaba.
ㅡ ¿De nuevo? ㅡ Preguntó Youngjo riendo mientras se quitaba las gafas y la gorra de natación.
ㅡ Te he dicho que no sonrías de esa manera cuando acabas de salir de la piscina.
Apenas Youngjo había salido de la piscina una vez que el silbato sonó indicando el descanso, Hwanwoong había corrido hasta él con la toalla negra extendida con sus brazos.
Lo abrazó por detrás cubriéndolo de todas las miradas que se quedaban pegadas a su novio y lo miró con un puchero.
ㅡ Ya, bebé. ㅡ Youngjo lo abrazó contra él.
ㅡ Estás mojado, Jjo. ㅡ Hwanwoong se quejaba más por qué no lo dejarán de mirar.
ㅡ Yo solo te quiero a ti. ㅡ Youngjo lo miró a través de sus mechas pelinegras que escurrían agua sobre sus ojos.
ㅡ Lo sé. ㅡ Hwanwoong sonrió abrazándose a su cintura y metiendo su cabeza en el cuello de Youngjo.
A pesar de que ambos habían crecido mucho, Youngjo seguía superando en la altura a Hwanwoong.
Pero eso no le molestaba ni un poco al rubio, pues podía disfrutar de ese tipo de momentos con él.
También cuando viajaban a las excursiones escolares, que Hwanwoong podía recargar perfectamente su cabeza en el hombro de Youngjo en el autobús.
