#7

810 89 29
                                    


Raptor estaba sentado en la rama más baja del árbol, que seguía teniendo contacto con el agua.

– AMOR, SI ME ESCUCHAS GRITA CON TODAS TUS FUERZAS...

El no conseguía localizar a su novio, veía cuerpos de gente flotando algunos incluso  estaban en muy mal estado, molidos o cortados gravemente.
Un cuerpo flotó más cerca y chocó con la rama del árbol, tenía el mismo traje de baño de Sparta.

– ... Que no sea, que no sea...

Le dió la vuelta al cuerpo y encontró la cara de otra persona.

– SPARTAAAAAA

Guardó silencio para escuchar mejor, pero lo que escuchó fue otra cosa, el sonido de una segunda ola.

– Oh no...

Intentó subir más alto, pero se le hizo imposible y no le quedó otra que aferrarse al tronco del árbol.
La ola llegó, sintió que algo filoso cortó su espalda y ahogó un grito. Raptor no contó con que el árbol se caería, se tuvo que soltar ya que solo se estaba hundiendo y le empezaba a faltar el oxígeno.

Pasaron unos minutos y las cosas se calmaron otra vez, logró llegar a "tierra", entre comillas porque parecía un engrudo de barro, cosas del hotel, autos, árboles etc...
Se levantó con mucha dificultad, lo que le dolía era la espalda y su brazo, que había sido cortado producto de intentar proteger a Sparta.

Su espalda estaba ensangrentada, tenía heridas profundas ahí, también cortes leves en la cara.

– Ayúdame, por favor...

Volteó la mirada y se encontró con uno de los tipos de ayer, los del kayak.
Estaba siendo aplastado por una lancha, por fortuna había quedado en el espacio del volante y el vidrio, este último estaba roto y un pedazo pinchaba su pierna.

Raptor tuvo que romper más el vidrio para impedir que lo cortara, pero de todas formas una pequeña herida se le formó.

– Voy a intentar levantarla un poco, unos centímetros bastarán para que te hagas a un lado.

El tipo asintió.

Levantó como pudo la lancha, su espalda le dolía un infierno, pero valdría la pena.
El tipo se arrastró y salió, automáticamente Raptor la dejó caer.

– Gracias.

– No es nada. ¿Como te llamas?

– Javier... Dime Trollino, ¿Has visto a alguien con polera amarilla y unos shorts jeans? Se llama Miguel.

– No, yo soy Gonzalo, dime Raptor y ya. Busco a mi novio, Andrés, o Sparta, anda en traje de baño celeste.

– No lo he visto, lo siento.

– Debo seguir buscando. – se disponía a irse, pero Trolli lo interrumpió.

– Es mejor permanecer juntos, hay que esperar la ayuda.

– No haré eso, Sparta me necesita.

– Yo también tengo un novio perdido, y lo quiero buscar, pero no se puede, ¡Mira a tu alrededor! Es un caos, no se ve gente con vida por ninguna parte.

– ... Apenas alguien venga y te saque de aquí seguiré buscando.

– Yo igual quiero buscar a mi novio, no te confundas.

Pasaron de 2-4 horas.

– Ya me estoy hartando.

– Paciencia.

– ¿¡Paciencia?! Yo me voy a buscar a Sparta, suerte...

– ¡¡¡Ahí vienen personas!!!

– Al fin.

– Mī khn xyū̀ thī̀ nī̀ mā thī̀ nī̀ ch̀wy c̄hạn bæk phwk k̄heā

– No entendemos. – le intentó decir Raptor.

– Yo hablo tailandés, Reā t̂xngkār khwām ch̀wyh̄elụ̄x nı kār h̄ā fæn k̄hxng reā. – Dijo Trolli

– Mī khn cảnwn māk k̄hụ̂n tām h̄ā khn phā pị rong phyābāl xāc ca xyū̀ thī̀ nạ̀n.

– ¿Que te dice?

– Llevan a las personas que encuentran al hospital, ellos podrían estar ahí.

– Prefiero seguir buscando.

– Ellos abarcaron más espacio, si lo haces solo perderás tiempo, probablemente si están vivos ahí los vamos a encontrar.

– Creo que tienes razón, dile que nos lleve.

– Ok, Phā reā pị rong phyābāl.

Horas más tarde llegaron al hospital.

– Más te vale que Sparta esté aquí.

– Si está vivo lo estará, K̄hxbkhuṇ. (Gracias)

– Yindī t̂xnrạb (de nada)

Entraron al hospital, había mucha gente circulando, como no alcanzaban las camas los que estaban en mejor estado descansaban en el suelo, pero la mayoría de gente estaba de pie, buscando a sus seres queridos entre la multitud.

– ¿SPARTA?

– MIKEL ¿ME OYES?

– AQUÍ ESTOYYYYY

Los dos voltearon, era Mike.
Estaba en una cama, le estaban administrando suero, probablemente con algún otro medicamento en él.

– Hola Trolli.

– ¿¡Hola?! Me asustaste Mikel...

El pelinegro lo abrazó con cuidado.

– ¿Que te pasó?

– Solo unos hematomas feos.

– Que bueno, pudo haber sido peor.

Raptor observó y una pequeña sonrisa se formó en su cara, pero se borró en cuestión de segundos.

– Buscaré en el resto del hospital.

– Ok, buena suerte Raptor.

El mencionado recorrió todo, cada rincón, cada pasillo, no estaba por ninguna parte. Con miedo revisó la lista de fallecidos, era larga, no encontró nada.

– No está...

– ¿Aún no lo encuentras?

– No Trollino...

– Lo lamento.

– Aún puede estar vivo.

– Sabes que las probabilidades de que lo esté son muy...

– ¡Cállate! Está vivo, y lo encontraré, deben haber más hospitales.

– En eso tienes razón, me gustaría acompañarte, pero Mike debe descansar y es mi deber cuidarlo, no me daré el lujo de perderlo de nuevo.

– Te entiendo, yo haría lo mismo, cuida a tu novio, adiós.

– Adiós.

Raptor pidió transporte, había alguien que se estaba ofreciendo a acarrear personas que justamente buscaban a sus familias.

– Lléveme a otro hospital, cualquiera.

– Como quiera, ¿A quien perdió? – preguntó mientras conducía.

– Perdí a mi novio, se llama Andrés, su apodo es Sparta.

– No me suena, yo soy Jon.

– Yo Gonzalo.

– Oiga, su espalda...

– Ya sé.

– Debería mostrársela a un doctor.

– No hay tiempo.

– Le sangra mucho.

– Hay gente que está peor.

– En eso tiene razón, créame, ya he visto de todo.

Raptor no paraba de mirar los alrededores, cualquiera podría ser su novio.

Lo Imposible - °|Spartor|°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora