Lo Imposible - °|Spartor|°

#14

Anteriormente...

– Tranquilo Víctor, tranquilo... – Sparta temió por la vida de Raptor e intentó calmar a su hermano.

– Spartita, tengo miedo...

– ESTAS MUERTO

– AYUDAAAAAAAA

– REPTIL OTAKU HASTA AQUÍ LLEGASTE. – le gritó Timba que también había visto la escena.

– ¡No lo maten! – Sparta abrazó a Raptor.

– Que tierno... – dijo Raptor sintiendo los brazos de su novio en su cintura.

– Separate de el ahora mismo. – advirtió Timba.

– No

– ¡Pero se quería aprovechar! – le gritó Víctor.

– No se quería aprovechar de nadie, yo le dejé hacerlo.

– ¿¡Dejaste que te tocara así?!

– Si, hasta permiso me pidió.

– Hum... No dejes que te toque tanto.

– Pero si es mi novio.

– Pero nada.

– Soy inocente. – les dijo Raptor.

– Imagínate a mi hermano con poca ropa acostado en una cama con las muñecas atadas a la cabecera de esta.

Raptor se tomó unos segundos, un chorro de sangre salió de su nariz y corrió al baño.

– ES DECLARADO CULPABLE

Cerró la puerta y le puso pestillo.

– ABRE LA PUERTA COBARDE

– NO

Timba y Raptor susurraron algo que Sparta no alcanzó a oír.

– Oye Raptor, vino un tipo bien musculoso y con una sonrisa encantadora, dijo que iba a llevar a Sparta a pasear, también dijo que volvería en unas horas. – mintió Víctor.

– ¿QUÉ?

Sparta le iba a decir que no salga, pero su padre le tapó la boca.
Raptor le quitó el pestillo y abrió la puerta.

– ¿QUÉ TIPO? – vió a Sparta siendo callado por Timba. – Oh no... Me han timado...

–C4GASTE

Víctor tomó a Raptor por el cuello y lo empezó a ahorcar al estilo Homero Simpson.

2 horas más tarde

– Ya te dije que no se aprovechó.

– Pero te tocó demasiado.

– Meh... Amor.

– ¿Qué? – contestó mientras se ponía un hielo en la cabeza.

– Tengo sueño.

– Ok, nosotros nos vamos a dormir.

Se despidieron y cuando Sparta cruzó el marco de la puerta Raptor miró atrás y vió a Víctor con el cuchillo de cortar pan haciéndole una seña que claramente significaba que lo mataría si lo tocaba demasiado.

Tragó saliva y cerró la puerta. Entraron a la otra habitación y abrieron las camas.

– ¿Tenemos que dormir separados?

– A tu hermano y a tu papá les va a dar un ataque si me ven durmiendo contigo.

– Tienes razón. – Sparta se acercó y lo besó, el beso duró un buen rato, sin embargo se separaron. – buenas noches.