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Quise seguir con más besos, pero tú te fuiste de nuevo a la fiesta en busca de Mindy. Y yo nuevamente me quedo destrozada, con lágrimas en mis ojos regreso a la fiesta para irme, pero me cruzo con ella.

– ¿Porque lloras baby? – ese mote tierno que me había puesto hizo que llorara con más intensidad por la culpa que sentía.

– Nada es que me está afectando el alcohol – miento descaradamente y me alejo de allí para regresar a mi casa caminando. No podía estar en aquel lago viendo como tu estabas con ella y no conmigo.

Te odio y te amo al mismo tiempo. Eso es patético, yo soy patética.

No soy ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora