The Girl From The Commission (Cinco y tu) The Umbrella Academy

Los Suecos

¡Aaaargh!-.Aquí me encontraba nuevamente desinfectando la herida de Cinco, esta vez hecha por un Pogo joven.-¿Podrías ser un poco más delicada?-
-Claro, no hay problema-.Apoye con más fuerza el algodón cubierto de alcohol en la herida del viejo.-¿Para la próxima podrías ser más inteligente y no intentar acariciar a un primate el cual no te conoce?-.
-Lo tendría más en cuanta a cambio…-.
-¿A cambio de qué?-.
-De un beso-.Reí por el coqueteo hecho por Cinco y obedecí a su trato, ¿Quién en su sano juicio no le daría un beso a este hombre?. Me separe del niño y tome la gasa junto a la cinta y cubrí la zona herida del cuello.
Envolví mis brazos sobre el cuello del niño, encontrando su boca en un segundo vez el cual poseía más intensidad que el anterior, haciendo temblar las cosas debajo de Cinco. -Ve y averigua  si tu hermano se encuentra bien, la loca no me dejo atentarlo-.
Cinco asintió y partió hacia la sala de Elliot no sin atentes conectar nuestras bocas por terceras vez, para luego irse con una sonrisa triunfante.
Desde aquí se lograba escuchar los gritos de dolor de Numero Dos, para este punto me estaba preocupando, sin duda alguna no confiaba en la nueva siento que la he conocido en otro lado. Una vez más escuche los gritos de Diego, así que guarde todo y tome el café mío y de Cinco para ir hacia la sala.
-No está muerto-.Si los demás supieran que el motor de las acciones de Cinco es su familia, todos quedarían impresionados debido a su forma de hablar que expresa todo lo contrario.
-¿Decepcionado?-.Pregunta Lila, al llegar a la sala procedí a sentarme en uno de los sillones y beber por fin mi rico café.
-¿De verte a ti?-.El pelicastaño se asomó hacia mí y tomo el café que se encontraba en mi mano.-Siempre-.
-Cuanta hostilidad para ser tan pequeño-.La mujer presto atención a la herida que poseía el chico-.¿Te cortaste al afeitarte, podría enseñarte a afeitarte-.
-No, me topé con un viejo amigo de la familia-.Explica el viejo su herida sin embargo…
-Hablando de familia, Lila ¿Te importaría explicarnos de dónde vienes?-.El interrogatorio era uno de mis fuertes junto con la tortura, utilizaría mis años de experiencia en mi tono de voz para intimidar a la muchacha junto a nosotros-.Claro, si no es molestia-.Para mi deleite el rostro de la morena era un poema de nervios e incertidumbre, Cinco fue consciente de esto y tomo asiento en él apoya brazo de mi sofá. No obstante un gemido llamo la atención de todos, era el pobre Elliot el cual seguía atado.
-¿No lo desataste?-.Pregunta Cinco viendo a la morena.
-¿Debía desatarlo?-.



-Oigan, tenemos algo-.Informa Elliott debido a que la alarma de la maquina al parecer no fue lo suficiente obvia-.Se activó una de esas máquinas que pidieron-.
-¿Cuál?-.Pregunta Cinco al llegar al asiento del sujeto.
-El radar atmosférico.-Informa el conspiranoico moviéndose en su silla giratoria de aquí para allá.
-¿En dónde?-.Pregunte mirando la pantalla atmosférica.
-zona rural al norte de Dallas. No entiendo ¿Qué buscan?, ¿Un huracán?, ¿Un frente de tormenta?-.
-Ondas sonoras-.Dijimos junto con el Cinco quien tomo mi mano para tele traspórtanos, no sin antes escuchar.
-¿Ondas sonoras?-.Del pobre Eliott el cual no entienda nada pero aun así ayudaba. El niño nos llevó hacia el estacionamiento en donde Elliott guardaba su coche.
-Súbete niño-.Dije tomando el asiento de copiloto, mientras Cinco tomaba el de copiloto.-Vayamos por el Violín Blanco-.



Luego de encontrar a Vanya fuimos hacia una estación de servicio en donde los hermanos hablarían, sin embargo luego de llamar a través de uno de los teléfonos públicos, a uno de mis contactos de la ciudad, me informaron que hoy Luther tendría una pelea. Quedaban ocho días para el apocalipsis y el clan Hargrevees no estaba completo.
-Malas noticias-.Llame la atención de Cinco y Vanya los cuales pareciera que estaban discutiendo.-Luther tendrá una pelea en tres horas, muévanse-.Ordene a los hermanos, seguido de esto salimos de la estación para dirigirnos al bar del gran Jack Ruby.



A pesar de que los tres poseamos apariencia de niños de secundaria uno de mis contactos no permito pasar, claro que hubo un gran transacción.
-¿De dónde sacaste ese dinero?-.Cuestiona el viejo en cerca de mi oído, esto me dio escalofríos los cuales tuve que disimular.
-Del dinero de papa-.A decir verdad no mentía. El chico volvería a hacer otra pregunta, pero para su mala suerte ya estábamos en el ring, y la participación de Luther en este desvió su atención.
"Vamos" "Levantate" El lugar estaba repleto de hombre con fagos de dinero en sus manos, estos gritaban con la esperanza de poder ganar las apuestas del lugar. Golpes iban y venían dentro del Ring y a pesar de que Luther no es muy bueno con la sinapsis si lo es con los golpes… o eso creía ya que de un momento para otro el simio quedo inmóvil recibiendo golpes.
-Lo está destrozando-.Comenta la castaña a mi lado viendo como su hermano recibía golpes tras golpes sin hacer nada.
-Otras vez-.Pide Numero Uno a su contrincante el cual obedeció a la orden o suplica.
-Dios mío, Luther-.
-¿Por qué no se defiende?-.Cuestiona Cinco al ver como el gran Numero Uno se convertía en una muñeca de trapo.
-Luther hijo de perra, pelea-.Grite subiendo encima de la banca para que el idiota con ADN de mono me escuchara.
-Otra vez-.Nuevamente pide el idiota-.¡Otra vez! ¡Golpéame!-
-Luther, ¿Estás loco? ¡Pégale!-.El grito de Cinco se sumó a la bulla del lugar, la cual iba en aumento ante el show de Luther.
-Golpéame. Quiero sentir dolor, todo el dolor posible.-Por primera vez tenia este sentimiento de impotencia dentro de mí al ver como un ser querido sufre y yo no poder hacer nada.-¡Dame todo lo que tengas!-.Tal y como lo pidió Luther su contrincante le encesto un golpe el cual hizo que volara por los aires, literalmente.
-Mierda-.Exclama el antes mencionado viendo el saco de golpes que en algun momento fue el gran Numero Uno.
-¿Por qué no se defendió?-.
-¡Luther!-Grite intentando saltando la barrera que daba al ring, al llegar con este pude ver aún mejor las heridas que se abrían paso en su rostro llenando este de sangre y como era de esperarse el simio… perdió el conocimiento.
-Mierda Luther-.

Hoy es el cumpleaños de nuestro papi chulo, así es amigas 17 años cumple el verdadero protagonista de esta historia y aunque sabemos que nunca se enterara de este fic le mandamos un gran saludo y muchos besos de nuestra parte.