VI

291 45 10
                                    

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 6

sᴜᴇɴ̃ᴏ ᴄᴏɴ ʟᴀ ᴍᴜᴇʀᴛᴇ ᴅᴇ ᴍɪ ᴘᴀᴅʀᴇ (ᴛᴇʀᴍɪɴᴀ ᴍᴀʟ)

Esa noche luego de haber escrito a Thomas y haber pensado en él durante una larga hora por fin dormí… Dormí y soñé.

Hacia tiempo que no tenía un sueño tan vivido. Ahí estaba yo, de pie en un campo de batalla siendo ignorado por los otros soldados. No era más que un espectador, podía moverme libremente, hacer cualquier cosa y ninguno de esos hombres se daría cuenta. De entre todos ellos pude distinguir una cabellera castaña atada en una coleta.

Me acerqué tranquilamente encontrándome frente a aquel hombre a quien reconocí de inmediato como John Laurens. Se veía exactamente igual a la última ocasión en la que lo vi, era como si el tiempo no hubiera pasado sobre él. De pronto de entre todo el caos un ruido llama tanto la atención de Laurens y la mía, ambos volteamos al mismo tiempo dirigiendo nuestra mirada hasta un hombre que ahora se encontraba de rodillas con una mano sobre su pecho en donde había una enorme mancha de sangre.

Mire de nueva cuenta a Laurens notando la desesperación que se alojaba en su rostro, esa mirada fría y que daba la impresión de saberlo todo ahora se encontraba inundada de pánico.

—¡Hamilton! —Gritaba el Laurens de mis sueños mientras corría hasta dónde se encontraba el hombre de melena negra, a quien pude distinguir mejor al estar en brazos del castaño.

Era mi padre. El mismo hombre de los retratos que había en casa, ese mismo a quien yo estaba buscando, ¿Por qué estaba soñando con él? ¿Era acaso mi mente sugestionada?

El escenario cambia, ahora me encuentro en un bosque. Laurens se encuentra con mi padre en el suelo quien a duras penas logra seguir respirando, el hombre estira su mano acariciando la mejilla del ojiverde, dice algo que no puedo entender segundos antes de que su mano caiga al césped. Mi respiración comienza a agitarse. ¿Por que estaba soñando con la muerte de mi padre? ¿Fue el resultado de mi obsesión? Ni siquiera sabía nada sobre ese día.

Unos sollozos me sacan de mi reflexión, dirijo mi vista hacia el mejor amigo de mi padre, este se encontraba llorando y pidiendo a mi padre que despertara, podía sentir su desesperación como si fuera mía, quería acercarme y ayudarlo, quería gritarle que despertara, que aún tenía que volver a casa, que tenía que verme crecer. Antes de poder darme cuenta también me encontraba de rodillas llorando, mirando a mi padre recostado sobre el césped, su cabello negro alborotado y sus ojos cerrados daban la impresión de que él solo estaba dormido. Y eso habría creído si no fuera por su uniforme azul que ahora se encontraba sucio por una horrible mancha color carmesí.

Me cubro el rostro con mis manos sin dejar de llorar, era extraño cuando soñaba con mi padre y hoy que lo hacía era un  sueño sobre el que posiblemente había sido el día de su muerte. Bajo mis manos al percibir una luz. Ahora no estaba en aquel bosque, era una especie de habitación blanca había ventanas por las cuales entraba una brillante luz, Laurens y mi padre habían desaparecido de mi vista, no se encontraban más ahí.

—Philip —Llama detrás de mí una voz algo familiar aunque algo me obligaba a creer que era la primera vez que la escuchaba.

Doy la vuelta para encontrarme con ese hombre que tan solo unos minutos antes había visto morir; mi padre se encontraba de pie sonriendo tranquilamente, su cabello estaba perfectamente acomodado y me sonreía de la misma forma en la que siempre imagine que lo haría, con amor y orgullo. Usaba un traje similar al que estaba usando minutos antes, solo que este era blanco.

—Philip, ven aquí hijo —Me pide extendiendo sus brazos, me levanto de donde estaba de rodillas para correr hasta él abrazándolo con fuerza.

—Papá —Digo dejando escapar unas cuentas lágrimas de felicidad, se sentía tan bien decir esa palabra, se sentía tan bien poder estar entre sus brazos.

En ese momento volví a sentirme un niño, volví a sentirme aquel pequeño indefenso que anhelaba el amor de su padre, era la gloria para mi poder estar abrazando a aquel hombre. Aunque fuera solo en mis sueños.

—Mi Philip, mírate has crecido mucho —Me reí un poco antes de apartarme mirando atentamente al hombre frente a mi buscando grabar su rostro en mi memoria.

—Te he extrañado mucho papá.

—Lo sé —Dice el bajando la mirada hacia el suelo, su mirada me daba la impresión de que decía la verdad y sabía cuanto lo había extraño— Pero sabes que siempre he estado contigo. Sin importar que pase, tu madre y tu me llevan siempre en su corazón.

Puedo notar como en su rostro de pronto aparece una expresión de tristeza y arrepentimiento.

—¿Por qué te fuiste? —Cuestiono antes de morder mi labio inferior buscando contener las lágrimas que amenazaban con salir de mis ojos.

—Nadie es eterno Philip, estaba en una guerra, tarde o temprano yo…

—¡Pero no es justo! ¡Tenias que volver conmigo! —Las lágrimas comienzan a salir ignorando mi orden de detenerse.

—Lo sé, pero tampoco es justo para mi que insistas en buscarme aún cuando sabes que…

Aquella imagen que mi mente había creado de mi padre deja de hablar de repente dando unos pasos en mi dirección envolviéndome en sus brazos buscando consolarme, aunque fuera solo un sueño se sentía tan bien estar en sus brazos, quería seguir ahí, siendo protegido por mi padre.

—Deja de buscarme —Insiste el limpiando unas cuantas lágrimas, lo cual es inútil pues yo continuo llorando.

Lloraba por todo lo que la vida me había quitado injustamente, me había arrebatado sin motivo alguno la oportunidad de haber crecido con el amor de mi padre. Me había quitado la oportunidad de compartir miles de recuerdos con el.

Despierto segundos más tarde luego de que el hombre nuevamente me pidiera dejar de buscarlo. El sol se colaba por la ventana dándome en la cara, miré al techo durante algunos minutos antes de limpiar los restos de lágrimas que habían en mis mejillas, hacia tantos años que no había llorado en un sueño.

—Papá —Susurro sentándome en la cama haciendo una mueca al recordar cada detalle de mi sueño.

¿Y si en realidad solo estaba haciendo una tontería? ¿Y si eso que había visto no era más que la verdad? Decidiéndome por dejar en tema de lado me levanto de la cama para caminar hasta el baño mirándome al espejo y preguntándome; ¿Por qué?

¿Por qué había tenido que vivir tanto tiempo sin mi padre? ¿Cuál había sido el delito que cometí cómo para que se me privara de la oportunidad de conocer al hombre que se supone me protegería?

Entro en la ducha decidiendo no dar más vueltas al asunto o terminaría regresando a casa con las manos vacías, todo por un estúpido sueño, quizá ese sueño había sido el resultado de las tantas veces que me habían dicho que mi padre no estaba más en este mundo, pero a mi no me convencía nada de eso.

Al salir de la ducha me visto tan rápido como puedo para luego pararme frente al espejo con intención de atar mi cabello. Al estar frente a este me doy cuenta de algo, se supone que era un clon de Laurens así que si lograba hacerme una coleta similar a la suya quizá, solo quizá podría engañar a sus empleados para así poder entrar en su hogar y lo único que quedaría sería esperar a que el volviera, sabia que en cualquier momento lo haría.

Se que quizá esto parecerá extremista y hasta cierto punto extraño, me haría pasar por otra persona solo para saber si mi padre estaba vivo o muerto, pero a estas alturas me importaba poco, para situaciones desesperadas había que tomar decisiones extremas y esta definitivamente era una situación desesperada para mi.


°•○●°•○●°•○●°•○●°•○●°•○●°•○●°•○●°

Holu
Capítulo nuevo, muchas gracias por leer, espero que les haya gustado :'3

➺ideas comentarios insultos

-ѕαγοκο✿

EternityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora