ONE SHOTS - HARRY POTTER

O2:; Blaise Zabini*

Aviso: contenido sexual explícito, no leas si no te gusta.

Paseo por los pasillos intentando no encontrarme con cierto Slytherin que me vuelve loca, además de ser mi estúpido novio. No puedo ver a los ojos a Zabini, no después de haberlo visto tonteando con esa estúpida chica. Vale que nuestra relación no sea pública, pero eso no quiere decir que acepte el tonteo de cada chica que se le acerca, porque cuando lo hago yo, se enfada conmigo días enteros.

—¡Wood! —Exclama uno de los gemelos Weasley a mis espaldas, me paro y espero a que llegue a mi lado. —Necesito tu ayuda.

—No te voy a ayudar en una broma hacia mi hermano, Weasley. —Repongo un tanto molesta, ahora no me apetece hacer nada, solo llegar a la sala común y gritarle al espejo todo lo que me gustaría decirle a Zabini.

—No es eso. —Rueda los ojos el pelirrojo y sonríe de lado. —Ya le hemos enviado una lechuza haciéndonos pasar por una fan loca. Quería que me acompañases a Hogsmeade, ya sabes, como en una cita.

—¿Una cita? —Pregunto con sorpresa, pero me vendría bien alejarme un poco de cierto Slytherin. Además, si él puede tontear, yo también puedo. —Claro que sí. Pero antes...

—Soy George. —Dice Weasley con una sonrisa divertida. —El sábado en la Sala Común a las diez.

Me da un beso en la mejilla y se aleja por los pasillos con una sonrisa enorme en el rostro. Sin darse cuenta, George me ha alegrado el día, pero, como no, me veo arrastrada a un armario de escobas cuando iba hacia la sala común. Blaise me observa con un enojo visible antes de besarme con fiereza. Me agarra las muñecas y las levanta por encima de mi cabeza, inmovilizando mis brazos.

—¿Qué demonios haces? —Pregunto cuando deja descansar mis labios, pero muerde el inferior y me levanta la falda con su mano libre. —Blaise...

Pero Zabini me ignora y sigue repartiendo besos un tanto toscos por mi cuello y labios.

Cuando tengo la falda levantada, arranca mi ropa interior, destrozándome las bragas de nuevo. Acaricia brevemente mis partes íntimas antes de meter la mano debajo de mi camiseta, acariciando levemente mi estómago.

Antes de darme cuenta, Blaise me agarra con su mano libre por la cintura y me eleva para caer sobre su miembro, el cual no sé cuándo ha sido sacado de sus pantalones. Me suelta las muñecas para cargarme con ambos brazos y me enviste con fuerza, gruñendo en mi cuello. Gimo con fuerza por lo delicioso del momento, por la posibilidad de ser descubiertos.

—Mía, eres mía. —Gruñe Blaise cuando las últimas estocadas me llevan al límite con él. —No te quiero ver cerca de Weasley.

Me coloca la ropa de nuevo y con un movimiento de varita me arregla la ropa interior previamente destrozada.

—Blaise... —Digo sin saber que acaba de pasar.

—No digas nada, preciosa. —Susurra antes de tocar mi cuello, sonriendo orgullosamente, y sé que me ha vuelto a dejar marcas demasiado visibles para poder esconderlas a simple vista. —Hablo enserio con lo de Weasley.

Asiento con la cabeza, y cuando pienso que él se va a ir primero para que nadie sospeche nada, agarra mi mano, y salimos juntos del cuarto de las escobas, sorprendiendo a la gente que nos ve juntos. No es normal ver a un Slytherin y a una Gryffindor juntos.

—Recuerda una cosa. —Dice Blaise en la puerta de mi Sala Común. Me agarra de la cintura y me junta a él. Cuando pienso que va a volver a soltar lo de "mía", me sorprende. —Te quiero mucho, pequeña leona. —Dice antes de besarme y caminar por el pasillo, dejando con la boca abierta a cada persona que nos acaba de ver.