El tiempo en Terra pasaba muy rápido, pues siempre encontraba con que entretenerme, además de las clases de lucha con Cesi, cada dia que pasaba sentía crecer algo dentro de mí y aunque no entendía muy bien que era, sentía como si siempre hubiera estado ahí.
-¿Que lees ahora?- pregunto Cesi sentándose enfrente mío junto a Stephen.
-Nada muy interesante.
-Pues te tengo una noticia que te va a interesar –exclamo Stephen, por lo cual yo asentí
-Mi madre y yo creemos que ya estas lista para ir a Scart- dijo una muy emocionada Cesi
-¿De verdad? ¿Tan pronto?- pregunte, Cesi me había dicho que necesitaría aprender muchas cosas antes de ir a Scart y aunque cada cosa que me decía lo aprendía no me sentía lo suficientemente lista.
-Aunque solo hayan pasado cinco días desde que Carmesi te empezó a enseñar, has aprendido todo muy rápido y excelentemente bien.
- Ya estas lista Zafi – dijo Cesi sonriendo
-Esta noche salen, apronten sus cosas – exclamo Stephen para poder retirarse
-Acompáñame hasta la sala de entrenamiento, necesitamos nuestra ropa de lucha.
-La idea es pasar desapercibidas ¿Por qué llevaríamos nuestros trajes de lucha?- pregunte confundida
-Porque así se visten todos en Scart - dijo riéndose Cesi, me sonroje un poco por la vergüenza del momento pero seguí caminando como si no hubiera pasado nada
Al llegar a la sala de entrenamiento cada quien se puso su ropa, Cesi me tuvo que tapar con una capa para que nadie se diera cuenta de que llevaba el uniforme de lucha real y así dedujeran que era la princesa del Planeta Tierra.
-Hay que elegir nuestras armas.
Vi a Cesi tomar una espada además distintas cuchillas, yo también tome cuchillas pero a diferencia de ella agarre un arco y un bolso con flechas.
-Si ven que sos una Lunar descubrirán quien eres - dijo y se acercó a mí para agarrar mi amuleto y meterlo dentro de mi ropa, yo asentí.
-Ya estamos listas- pronuncie para mirar mi muñeca, donde se hallaba mi tatuaje
-Es hora de ir a buscar a esas tres personas que nos faltan.
Cuando la luna estaba en lo más alto y las estrellas parecían salpicaduras en un cielo tan oscuro como el corazón del rey de Scart, fue hora de partir, Stephen y algunos guardias nos acompañaron a nada más y nada menos que el acantilado de los monstruos, aunque acá en Terra no se debería llamar así.
-El acantilado del diablo- dijo Stephen mirando el fondo de este, me saque la capa y deje que mi amuleto se viera por unos segundos, dejando que tomara un poco de luz de luna.
-Madre tenemos visita – dijo Cesi mirando a una chica que se encontraba en el borde del bosque
-Ella es...- dijo la chica señalándome, Stephen lentamente se acercó a ella y la miro directamente a los ojos, comenzando a susurrar unas palabras en latín
-Vámonos- dijo Cesi agarrando mi mano y corriendo hacia el acantilado
Mientras caíamos me di cuenta de que Stephen en verdad no era una humana, era una bruja y por eso mi abuela le había confiado el reino de Terra.
Los metros del acantilado se volvieron centímetros y rápidamente mi cuerpo sintió el frio suelo, al subir mi mirada pude notar que solo estábamos Cesi y yo, la habitación era igual a la de Terra a diferencia de que no había guardias y de los colores oscuros de la sala.
-Hay que salir del castillo sin que nadie nos vea.
Lo que había dicho Cesi tenía mucho sentido, sabíamos que los reyes de Scart no perdonaban fácilmente y meterse al castillo si su consentimiento podría poner en juego nuestras vidas.
Cesi abrió lentamente la puerta, miro a sus costados asegurándose de que no haya nadie y salió lentamente, la seguí por los pasillos del terrorífico castillo.
- ¿Chi sei, cosa ci fai qui?- dijo un guardia, uniformado con una armadura roja y negra, que apareció a nuestras espaldas.
-¿Que dijo?- pregunto Cesi en un tenue susurro
-Habla en italiano, por surte en mi estadía en Terra pude estudiar algo – dije mirando a Cesi
- Siamo spiacenti, stiamo fuggendo dalla Terra – mencione pero esta vez mire al guardia.
-Unisciti a me – dijo mientras asentía, yo sonreí tenuemente y agarre la mano de Cesi para que lo siguiéramos como nos había ordenado.
Recorrimos gran parte del castillo hasta llegar a una habitación que conocía bien, la sala del trono, al entrar notamos como los reyes no estaban, si no en su lugar había una chica que parecía de mi edad, tenía el pelo marrón y ojos casi negros como la noche, a su lado habia un chico que parecía un año o dos menor, con pelo negro y ojos miel.
-Queste signore stavano camminando lungo i corridoi, dicono di essere scappate dalla Terra – dijo el guardia
-grazie ora puoi andare in pensione- exclamo una chica bastante alta, de peo rubio y ojos marrones, que se encontraba parada al lado de los tronos.
El guardia desapareció tras la puerta, note como Cesi miraba con mucha curiosidad una fuente con agua roja que parecía sangre, mi mirada cambio a la chica rubia quien me miraba fijamente.
-Perdón la molestia, Ella es Carmesi y yo soy Amiat – dije lentamente, no podía decir mi primer nombre si no sabrían quién soy.
-Princesa de Terra, ¿que se te ofrece? – dijo la chica rubia
- Solo ayude a esta chica a escapar de Terra, pedimos unos días de descanso – dijo Cesi
-¿De dónde vienes Amiat?- exclamo nuevamente la chica rubia mirándome fijamente
-Del Planeta tierra, me caí en un acantilado y luego lo que he vivido es una locura, solo era una simple chica que estudiaba en el instituto – dije mirándola
-Eso explica tus poderes de loba, perdonen por no presentarnos, ellos son los príncipes de Scart, Zaina y Zion Tyler y yo soy su guardaespaldas Helena- dijo la chica rubia
-Sos más que nuestra guarda espalda sos nuestra mejor amiga- le aclaro Zion a lo cual ella sonrió
-Nosotros no podemos decidir si se pueden quedar, pero les daremos una habitación hasta que nuestros padres lleguen – exclamo Zaina, note como su tono de vos era superior y arrogante, era una chica dura.
-le guardie li portano in una stanza – dijo haciendo que los guardias que estaban fuera nos llevaran a una habitación.
La habitación era una de las típicas del castillo, a diferencia de sus tonos oscuros y de la falta de libros, podría decir que estaba en casa, aunque extrañaba ver los libreros, los que ahora eran remplazaos por armas.
-Cesi, tu madre me dijo que ellos no conocían a Terra y a el Planeta tierra, pero nunca los vi confundidos por lo que decíamos – dije mirándola
-Helena es una bruja, los tiene hechizados por orden de los reyes – dijo mirando por la ventana, el terror y el horror se plantó en mí, ellos conocían el resto de mundos solo que no los sabían, una lagrima de tristeza se me escapo, rápidamente la seque, fue en ese momento que mi tatuaje cambio.
-Cesi, el tatuaje ya cambio
-Ósea que ya encontraste a los elementos faltantes
-Sí, los tres elementos que buscábamos, son Zaina, Zion y Helena
- El sol, la estrella y el fuego.
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Huellas Nocturnas (Sin Editar) •Saga Lunares •
FantasyEl legado más poderoso de todos queda en manos de la nueva generación, el planeta es más seguro que nunca o eso creían, pues una batalla se está estableciendo en las sombras de la galaxia, una batalla que no ganarán a menos que emprendan una aventur...