Distintas casas (Año 1-4)

70

El baile de Navidad.

Narra Tn:

-Recordatorio: No aceptar nada comestible a los gemelos Weasley -Dije al entrar a la habitación, el regalo de navidad de los gemelos fueron sus ahora famosas galletas canario.

-¿Qué? -Preguntó Rose riendo mientras Blair se acercó tomando una pluma.

-¿Ya las probaste? -Se burló Jane.

-Ricas, pero peligrosas -Reí quitando una pluma.

-Gracias por no darme una -Apuntó Blair, quien jugaba junto a Rose con su ajedrez mágico nuevo.

-Bien, quítate esas plumas ya, si no comienzan a arreglarse llegaremos tarde -Dijo Rose caminando hacia la puerta del baño lentamente y entró, cerrando la puerta tras de sí.

-¡Qué emoción!

-Me ayudarán con el cabello, ¿Verdad?

-Por supuesto que sí, Blair -Jane y yo le sonreímos, y comenzamos a preparar nuestras cosas para cuando Rose salga del baño.

-¿Creen que a Neville le guste mi regalo de navidad? -Preguntó Jane con un ligero rubor en sus mejillas y una amplia sonrisa.

-Si -Respondimos Blair y yo.

-Lo interrogaste en herbología para saber que regalarle, Jane -Dijo Blair haciéndome reír.

-Seguro lo pusiste nervioso -Afirmé y ella asintió.

-Es muy lindo, ¿No? -Su sonrisa se desvaneció- Lástima que cuando pregunté si tenía pareja para el baile me dijo que sí.

-¿Con quién irá?

-Ginny Weasley.

-Bien, Jane -La rodeé con el brazo- Según sé, ellos son amigos, e irán al baile como eso, amigos -Sonreí- Tal vez tengas un baile con él.

-O más de uno -Blair le guiñó un ojo y Jane sonrió nuevamente.

-¡Rose, debes apurarte! ¡Mi baile espera! -Dijo Jane riendo mientras tocaba la puerta del baño.

Narra Fred:

-Pero ¿te hacen falta tres horas? -Escuché la voz de Ron, mirándo a Hermione irse. George rápidamente le lanzó una bola de nieve por distraerse, y ambos comenzamos a reír cuando dió en su cabeza- ¿Con quién vas? -le gritó a Hermione cuando ya se iba; pero ella se limitó a hacer un gesto con la mano y entró en el castillo.

-¿Aún no les ha dicho? -Pregunté lanzando una bola de nieve a George, ambos negaron, y pocos minutos antes de las siete, se fueron- George, ¿Te habías dado cuenta antes de que Angelina te gustaba?

-Si, ¿No lo recuerdas? -Recibí una bola de nieve en las piernas, pero no lancé otra, miré a George con detenimiento, era cierto, ya me lo había dicho antes- Creo... creo que me gusta Potter.

-¿Harry? -Preguntó aguantando la risa- ¿Y nuestra apuesta de Ginny?

-¡Harry no! Tn.

-Puede ser tarde si no le dices lo que sientes -Dijo acercándose a mí.

-¿Tú crees eso? -Él asintió- Bien, deséame suerte -Palmeó mi espalda al mismo teimpo que yo la suya- Ahora a correr, si no, me matarán antes de poder decirle lo que siento.

[...]

Al salir de la sala común con George, vestidos de gala, con nervios pero aparentando confianza.

-Ya deja de pensar en eso, estás tan pálido como cuando Harry cayó de su escoba.

-Cállate, George.