Prólogo: Profecías Rotas

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En un castillo de Alderaan, a mitad de la noche oscura y fría, la mujer de cabellos largos y piel blanca gritaba desesperada en sus aposentos. Las sirvientas limpiaban el sudor de su frente y la partera le animaba a seguir en su labor.

- Ya casi Leia, ya salió su cabeza - la partera seguia animando a la joven princesa.

Pronto la habitación de inundó de los llantos del recién nacido. Él bebe de cabellos oscuros y ojos claros era recibido por las sirvientas, lo limpiaron y lo envolvieron en una manta.

- Es un varón - acercaron al pequeño a la joven Leia, está le sonrió cuándo miro los preciosos ojos ambar de su niño.

Unas contracciones la hicieron apartar la mirada de su retoño, aún quedaba uno. La partera hacía movimientos con sus manos sobre su vientre para ayudarla a pujar, sin embargó se estaba debilitando, se sentía desfallecer.

El pequeño bebé no había detenido su llanto, pero se hizo más potente a la par que Leia lograba sacar a su otro bebe.

Por fin se sentía bien, después de haber cargado durante nueve meses a sus gemelos, respiraba. Una sonrisa pequeña se poso en su rostro al sentirse liberada.

Sonrisa que se borro al no escuchar a su segundo bebé llorar. Aún con dolor y sangre entre sus piernas se levanto lo suficiente para ver la cara de decepción de la partera y entre sus brazos su bebé.

- No lo ha logrado - murmuro la partera entregándole a su bebé ya envuelta - Era una niña.

Leia recibía a una niña pálida, débil y menos pesada que su varón. Sus ojos se nublaron de tristeza al verla, jamás podría amamantarla, vestiría, guiarla, verla casada, no podría hacer una vida con ella. La vida se la dio y quito en un solo instante.

- El bebé tiene hambre - una sirvienta le entregaba a su pequeño hombrecillo, tan solo llevaba un pañal y una frazada encima, en cuanto sintió el pecho de su madre se dejó ir directo a su seno para alimentarse.

- Kylo... - murmuro triste Leia tomando a su hijo - Príncipe Kylo Ren.

- ¿Como llamaremos a la pequeña? - la sirvienta de tes asiática hacia preguntas incómodas.

- Kylie, su nombre es Kylie - abrazo a su pequeña y la pego junto a su pecho.

Sin previo avisó y sin respetar la intimidad de la mujer, la puerta se abrió con violencia dejando entrar al hermano de la recién parida. Se acerco a los neonatos, observó al pequeño que se quedo dormido después de amamantar.

Pero su mirada se transformo en furia y miedo cuándo observó a su pequeña sobrina sin respiración.

- Esta muerta - aseveró.

- Leia ha tardado mucho en sacarla, posiblemente se ahogo - la asiática seguía respondiendo de manera imprudente.

- Mary Tico y compañía, retírense, debo hablar con mi hermana.

La partera y sus ayudantes no contestaron, dejaron todo tal cuál y salieron de la habitacion dejando a los hermanos Skywalker solos.

- La profecía es real Leia - Luke se acerco a su hermana.

- No puedes dejar que lo que digan unas brujas afecte tu toma de decisiones hermano - Leia abrazo a sus dos bebés.

- No es solo unas simples brujas Leia, ellas predijeron lo del impacto en las tierras de La Estrella de la Muerte, acertaron en tu matrimonio con Han Solo y supieron de la enfermedad terminal de nuestro padre, no puedes pretender que ignore lo que han dicho sobre mis sobrinos.

- Ni si quiera me has dicho que es lo que tanto te dijeron de ellos, y lo que sea, Kylie esta muerta.

- Su predicción es acertada: Si el gemelo nace muerto, tragedias vendrán para Alderaan, sus lazos se romperán con los reinos vecinos.

Lazos Prohibidos [ REYLO] - Star Wars AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora