Y me hizo despertar. Ese ruido era realmente molesto. Llevaba una media hora dando vueltas en la cama y tapandome los oidos para intentar olvidar el horrible sonido de ese juguete desastroso. Entonces me levante, ya no lo soportaba más, en cuanto estuviera en mis manos haria de ese juguete añicos. Me puse las primeras zapatillas que encontre bajo mi cama, eran unas Nike azules con líneas verdes flourescentes. Ahora recuerdo que me las puse ayer cuando fui a casa de Dy. Camine torpemente hacia su habitacion (casi corriendo diría yo) pero cuando me detuve en la puerta no encontre a nadie en su interior, asi que solo podria estar en un lugar.
-La sala de juegos- dije para mi misma.
En ese instante bajé las escaleras a trompicones mientras experimentaba diferentes sentimientos dentro de mi; furia, por tener que haber aguantado ese ruido dede las 7 de la mañana; alivio, por saber que ya no tendría que soportarlo más; felicidad, porque mañana por fin iría a la universidad y; tristeza, porque sabia que aunque odiaba ese ruido estaba segura que en un tiempo lo extrañaria. Al igual que el sonido del pan tostandose, el grito de mi madre diciendo "¡A desayunar!" y él, corriendo alegre por la casa. Pero mi caída en el ultimo escalon hizo que todos mis pensamientos se esfumaran.
-¡Mierda!- grité asegurándome de decirlo de forma baja para que mama no lo escuchara ya que a ella no le agradaba que sus hijos (y mucho menos yo) dijeran palabras "groseras". Me levanté del suelo y sentí un dolor en el labio pero casi ni lo noté debido a que el ruido se hizo mas insoportable. Asi que fui direta a la sala de juegos, más enfadada que antes.
Y ahí lo encontré.
Estaba tumbado en el suelo, al parecer dibujando algo en una gran cartulina. La maldita caja de sonidos a lado suyo. ¡Eso era realmente absurdo! Para que teníala caja encendida si ni la estaba utilizando.
-¡Thomas!¡Haz que se calle esa caja o la haré callar yo de una patada!-Grité
Y fue entonces cuando noté que algo andaba mal, Thomas me miraba asustado pero normalmente me miraría con cara de enfado por haberle regañado. Mi mano se dirigió hacia el lugar que sentía dolor, mi labio. Cuando me fije de nuevo en mi mano pude ver la sangre que recogí de la parte inferior de mi boca y me dirigí al baño sin decir una palabra más. En mi interior rezaba para que fuera una herida pequeña ya que queria lucir bien mi primer dia de universidad. Iba a ir la universidad de Coldwater, en el estado de Ohio, estaba lejos de casa ya que yo vivía en Detroit (Michigan) pero fue mi eleccion porque queria ir a estudiar a un sitio donde no irían mis compañeros de curso debido a las acusaciones que habian contra mí.
Y frente al espejo vi como todo lo que tenia planeado se hiba al infierno. Tení el labio reventado se notaba por la sangre que salia de este, un pequeño hematoma en la parte superior de mi frente. Esto bastaría para un año entero de burlas hacia mí, todo el que me miraría seguro se iba a reír. Ya me imaginaba los comentarios como "Mira a la nueva llena de moratones" o "Sus padres la deben pegar" o "Seguro pertenecea una pandilla". Tierra tragame pensaba en mi interior. Entonces escuché el grito de mamá.
-¡A desayunar!- M e dirigí al comedor hecha furia. Hoy, justo hoy tenia que sucederme esto.Vaya asco de commienzo de día.
-......solo falta lo tuyo y ya estará terminado- decía Thomas. Mamá ponia la ultima taza que faltaba en la mesa justo cuando aparecí en la entrada de el comedor.
-Ven cariño ya estamos por.....- Y me vio, vio lo horrible que estaba mi cara y note que ella y mi hermano traban de esconder la diversion que les causaba mi estado. Sin embargo reprimienron la sonrisa porque yo traia cara de enfado.
-No digas nada - Le dije mirándola -Y tú, como sueltes una sola sonrisa juro que te voy a pegar - Dije en direccion a Thomas. Me senté y evalué el desayuno: una taza de café con leche para mí, leche con chocolate para mi hermano, y cafe solo para mamá; un plato con unos 7 panes tostados; otro plato con huevos y beicon; y a lado la mantequilla, la mermelada, el dulce de leche y nutella. Me di cuenta de que mi madre se habia esmerado en hacer un desayuno perfecto porque era mi ultimo día en casa, eso hizo el el mal humor desapareciera un poco. Cogí un trozo de pan y al instante Thomas cogio un beicon con un huevo, mama notó que mi enfado ya no era fuerte y empezamos a desayunar.
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Dilema de Amor
Teen FictionJessica es una chica que tiene una vida al igual que las demas personas. Tiene 18 años e ingresará a una universidad lejos de casa para "empezar de nuevo" debido a su pasado y el monton de cosas que le ocurrieron en su anterior colegio. Alli conocer...