Lo que nunca se dió

9 0 0
                                    

22/04/19 5:17 am.

Carta de despedida

Para aquella persona que encuentre esto:

Desde que desapareció mi vida se derrumbó, nuevamente se convirtió en aquello que había logrado dejar atrás tiempo después de que entrara en mi vida. Le amaba, no había otra explicación lógica para que su partida doliera tanto; era tan injusto el hecho de que no ha ya podido demostrarle todo aquello que sentía por él.

Fue horrible la manera en la que lo arrebataron de mi lado, sin aviso, de un momento a otro ya no estaba conmigo ¿Cómo era posible que una persona tan buena y bondadosa como él fuera asesinada? Fue mi culpa, lo sé y eso me perseguirá hasta el fin de mi insignificante y asquerosa vida. No pude salvarle y eso es lo que más lamento, porque se vio involucrado por intentar rescatar a una persona tan hundida y lamentable como yo a pesar de que le advertí que no se acercara a mí porque nada bueno saldría de ello, aunque le herí de una y mil formas para que se alejara y así poder mantenerle a salvo de mi mundo; ya que no pertenecía ahí y sabía que si él fusionaba nuestros mundos el suyo sería el más perjudicado, me negaba a que esa chispa de vida y alegría que irradiaba su sonrisa despareciera, no quería que su brillante sonrisa fuese opacada y apagada por la sombra de mi vida.

No deseaba lastimarte, porque a pesar de que te amaba sin saberlo, anhelaba que fueras feliz con alguien más y tuvieras una vida lejos del peligro y de mí, aun cuando la sola idea me aniquilaba por dentro.

Sin siquiera saberlo lo fuimos todo y al mismo tiempo nada.

Te extraño porque a tu lado me permití ver un futuro mucho mejor del que está escrito para mí, me permití por primera vez en mucho tiempo tener sueños bonitos y albergar esperanza de que podría salir por completo de aquel mundo oscuro y pertenecer a uno mejor; pero todo eso sólo fueron estúpidas fantasías que se hicieron añicos al ver como la vida escapaba de tus ojos sin poder hacer nada más que observar y rogarle a cualquier dios que quisiera escucharme que te quedaras conmigo y no me dejaras solo de nuevo. Aunque me costara admitirlo te necesitaba, mi vida dio un giro de 180° para bien gracias a ti, tomaste mi grisáceo mundo y lo pintaste con los colores más hermosos que jamás pudiera haber imaginado, lo cambiaste para bien y te quedaste a mi lado sin pedir nada a cambio a pesar de mis inútiles esfuerzos por apartarte; ahora no puedo hacer nada más que arrepentirme profundamente de haberte permitido la entrada a mi corazón, pese a que fuiste lo mejor que me pasó en la vida si no hubieras entrado en ella nada de esto habría pasado y seguirías viviendo felizmente, no obstante, todo lo que planeaste para tu futuro ya no pasará y nuestra historia jamás se contará ni se conocerá como deseabas porque ya no estás aquí.

Escribo esto con el único propósito de al menos intentar dejar una pequeña huella documentando todo lo que siento, porque me di cuenta de que en la vida o en la muerte, en esta vida o en otra, siempre te amaré sin importar qué; y le imploro a quién pueda escucharme que, si existe la reencarnación, pueda encontrarte y al fin gritarte a los cuatro vientos cuánto te amo sin considerar las consecuencias.

Te agradezco por todo, fuiste la forma más trágicamente hermosa que tuvo el universo de decirme que no se puede tener todo.

Nos veremos muy pronto Nathan Hilton, te extraña y te ama.

Kale Jack Stone.

Relatos cortosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora