Esta historia no es la más apegada a la serie, tiene ligeros retoques míos | Anne es una huérfana imaginativa, que tuvo que hacer un largo viaje para conocer a su nueva familia adoptiva, también, tendrá que ir a una nueva escuela, donde conocerá a s...
— ahhhhhh —le tiré una almohada, pero luego abrí los ojos— ¡JERRY!
Nos abrazamos, hace mucho que no veía a jerry (desde la navidad) bajamos las escaleras (ambos en pijama) y empezamos a hablar de cómo le había ido en el colegio, él seguía insistiendo que era una universidad.
— Vamos, jerry, eres un año mayor que yo, acepta que es un colegio.
— Jamás, chikistrikis.
Hicimos una mini pelea de almohadas, casi rompemos una lámpara.
— Anne! feliz cumpleaños!
Matthew y marilla entraron en la sala con un pastel de cumpleaños
— Cumpleaaaños, feliiiz, te deseaaamos a tiii, cumpeaaaaños aannneeee, que los cumplaas feeliz —cantaron todos a coro.
— Wow, gracias —dije super emocionada
Soplé las velitas y Matthew me dio una pulsera hermosa, me dijo que iba a ir teniendo mas dijes con el tiempo pero el que tenía —un sombrero— era el de la Anne original.
Al cabo de un rato, me fui a vestir, me extrañó no haber recibido ningún mensaje de sarah, pero no dejé que eso me bajara el ánimo.
— ¡Anne! —diana entró a mi pieza muy agitada
— ¿Qué pasa?
— Minnie may volvió a enfermar, y solo tu puedes curarla.
Fuimos corriendo a toda pastilla a la casa de diana, entre a trompicones y me encontré con todas reunidas alrededor de una mesa.
y Sarah.
— AAAAAAA SARAAAAAAH
— AAANNEEEEEEEEE!
Nos abrazamos, era lindo reencontrarse con una amigas que no veíamos hace mucho (no hay nada mejor que reencontrarse con amigas, sobretodo ahora en pandemia jiji)
Estuvimos hablando entre todas, sarah se había incorporado al grupo de lo mejor.
— Bueno —contó josie—, tienen chisme?
— ¿Dónde te alojas, Sarah? —pregunto tillie.
— En un hotel de charlottetown, cerca de la tienda de dulces de la esquina.
Seguimos comiendo por un rato
— ¡DIOS NOO! —jane saltó de la silla— ¡VAMOS TARDE A CLASES!
Me despedí de Sarah, quedamos en juntarnos mañana, antes de que se fuera.
Llegué al colegio, todos me dijeron feliz cumpleaños, es más, charlie me regaló un paquete le plumas (para escribir), mary (le mando el regalo con gilbert) un pastel y gilbert un cuaderno.
luego de una exhaustiva hora de triángulos, fuimos todos afuera, pusieron un poco de música, y nos sentamos todos en un círculo (quiero un curso así jaja)
— Oigan chicos, escuche que abrieron un boliche —dijo diana (no c como c dice jajajaja asi que wa a decir boliche jajajajajajajajajj)
— eso me huele a indirecta dayanita —dijo jane
— Si cariño —dijo con sarcasmo—, ¿quien apaña?
Todos quisieron ir, así que no me dejaron más opción.
Después de que terminara el colegio, me fui a mi casa, no tenía que hacer tareas, nos habían mandado una investigación de nuestros antepasados, una ironía grande para mi, que soy huérfana.
— Rapunzeeel —me dijo una voz que me parecía conocida— deja caer tu cabello!
mire por la ventana, era Sarah
— Bajo altiro, tontona jaja
Nos fuimos a charlottetown y compramos ropa, sarah también estaba invitada a la fiesta, pero no quiso ir porque tenía una prueba importante al día siguiente y tenía que estudiar.
Se hizo de noche, todas nos fuimos a casa de diana, a arreglarnos (y hacer todo lo que se hace para una fiesta, nunca he ido a una jaja y no estoy interesada, gracias)
Llegamos al lugar era _______________ (usen su imaginación, ya saben, nunca he ido a una fiesta, no tengo ni puta idea de como es)
Empezamos a bailar, luego el resto se unió a nosotros.
Ya pasadas una 3 horas, la mitad de las personas en el lugar estaban borrachas, alguien me empujó y estampé mi linda nariz con la pared.
gilbert se dio cuenta, y me sacó a rastras del local.
— ¿Anne, estás bien?
— S-solo me pegue en la nariz, nada más.
— Estas sangrando
Fuimos a uno de los bancos cercanos, la música se seguía escuchando, gilbert me paso su polerón (omg AAAAAAA)
Me puse el poleron, era peludo, se me estaba pasando el frío
— Dalo por perdido —le dije al cabo de un rato—, este poleron es de mi pertenencia, peridot.
— ok jaja.
Pasó el tiempo, ambos mirábamos las estrellas, yo me sentía extrañamente cómoda al lado de él.
— ¡VIVAN LOS NOVIOS! —gritó alguien de los departamentos, caí en la cuenta que venía de cierto hotel, el de sarah.
