𝐅𝐚𝐤𝐞 𝐋𝐨𝐯𝐞 🍥 kooktae

13

Tanto Taehyung como Jungkook durmieron en el suelo, junto a la cama donde Jimin y Yoongi habían pasado la noche. Taehyung se encontraba sentado en el piso, con medio cuerpo recostado sobre la cama y con uno de sus brazos sobre el torso de Jimin como si lo estuviese abrazando. Del otro lado estaba Jungkook, dormido en la misma posición que Taehyung, solamente que Jungkook tenía ambos brazos cruzados sobre el colchón y la cabeza oculta en el espacio que éstos dejaban. Ninguno de los dos quería abandonar a su amigo.

Extrañamente, el primero en despertar fue Yoongi. A pesar de su tan preocupante estado de salud, se levantó como si nada y despertó a Jungkook, y éste despertó a Taehyung.

Ninguno quiso hacer mención de lo sucedido, tratando a Yoongi con normalidad. Por lo que, como si fuesen dos niños, Yoongi y Jungkook comenzaron a juguetear como siempre.

Pasados unos diez minutos, dos suaves toques sonaron en la puerta.

—¿Podemos pasar? —fue la voz de Hyunjin quien preguntó aquello y tras el permiso de los de adentro, la puerta se abrió.

Por la imagen que pudieron apreciar, tanto Hyunjin como Jeongin entraron con sonrisas aliviadas en sus rostros.

—El desayuno está servido —anunció Jeongin—, yo bajaré, no sé si alguno de ustedes quiera desayunar también.

—Despertaré a Jimin y bajaremos contigo —dice Taehyung, poniéndose en pie.

—No lo despiertes —interrumpe Yoongi, poniendo un brazo entre Taehyung y Jimin—, déjalo dormir por favor, Jungkook y yo bajaremos a hacerle compañía a Innie.

—Sí —confirma Jeon.

Taehyung sonríe enternecido y acepta. Los tres salieron de la habitación, cerrando la puerta tras ellos, dejando solamente a Taehyung con Hyunjin parado a su lado y Jimin dormido en la habitación.

La expresión que el pelinegro colocó en su rostro, hizo que la sonrisa de Taehyung desapareciera. Sabía lo que esa cara significaba.

—Hay algo de lo que debo hablarte, hyung.

Taehyung eleva su índice derecho y lo posiciona frente a sus labios. Poniendo su otra mano en uno de los brazos del chiquillo e indicándole que se alejaran de donde estaba Jimin para poder hablar, aún con Jimin dormido debían ser cuidadosos con lo que dijeran.

—¿Qué sucede?

—Es sobre Yoongi hyung, verás....

Hyunjin le contó algunos saberes que tenía sobre los suyos, le dio datos y le contó varios pensamientos que había creado por la noche que quizá podían ser de ayuda para ellos. Hyunjin era un chico muy listo, era astuto y también muy amable, por lo que sin dudar buscó la manera de ayudar a sus nuevos amigos a como diera lugar.

Todo lo que Hyunjin le dijo era sumamente útil, sin embargo, Taehyung sabía que debía quedarse con toda esa información para él mismo.
Jimin era una persona complicada. Prefería manejar todo el asunto por sí mismo. Él sabría qué hacer... Todo se solucionaría al final, pero primero, debían pasar por lo más difícil.

—Si es como yo pienso, puede que... —Hyunjin se calla, mirando más allá de Taehyung, dándose cuenta que Jimin por fin ha despertado.

Taehyung se da la vuelta y sonríe para Jimin, quien aún trata de enfocar su mirada y reconocer el lugar en donde está. Inmediatamente se sienta en la cama junto a su amigo, éste pregunta por Yoongi tan pronto se levanta. Tae le responde y le cuenta que Yoongi se encuentra de maravilla, como si nada. A lo que Jimin asiente, sintiendo un poco de tranquilidad.

Entonces, empieza la charla difícil.

—Dijeron que sólo le quedan dos meses de vida —silencio—. Quiero verlo... Quiero saber que está bien...

—Está en el comedor, pueden salir al jardín si quieren privacidad —le dice Hyunjin, mostrándose serio pero amable.

Jimin agradece el permiso y se levanta de la cama, yendo escaleras abajo para encontrarse con su chico. Detrás de él van los otros dos, por supuesto. Reuniéndose todos en el comedor, dejando que la parejita saliera para charlar.

Taehyung toma el asiento de Yoongi para poder estar junto a Jungkook, recargando su cabeza en el hombro de su pelinegro, quien inmediatamente le acaricia los cabellos y deposita un tierno beso en su frente. El corazón de Kim revolotea y una profunda calma se asienta en su pecho.

Jeongin observa aquello e inmediatamente aparta la mirada con vergüenza, mirando de reojo a Hyunjin quien no parece inmutarse por la demostración de afecto romántico. Y a pesar de que sus miradas conectan, no ocurre nada, sólo una bonita sonrisa inocente adorna los labios de Hwang para Yang.

El menor de todos aparta la mirada, volviendo a su desayuno.

Después de todo Hyunjin no está diseñado para sentir ese tipo de amor...

Finalmente estamos de vuelta, piensa Taehyung con un atisbo de tristeza. Ambas parejas se despiden antes de entrar a sus respectivos departamentos. Jungkook lleva las pequeñas maletas a la habitación y promete desempacar él solito después, a lo cual Taehyung le agradece.

Kim estaba decaído, Jungkook podía darse cuenta con facilidad aún cuando su novio quería aparentar que todo estaba bien. Sabía que el humor de todos se había ensombrecido por los sucesos que habían ocurrido en Busan y que habían arruinado sus vacaciones, sin embargo, Jeon sentía que había algo más. Taehyung escondía algo y eso ponía intranquilo a Jungkook.

—¿Quieres que te prepare algo? —preguntó el azabache, queriendo distraer a su novio, sin embargo, éste simplemente sacudió la cabeza en negativa y se fue directo a la habitación.

Un puchero se formó en los rosados labios del robot. No importaba lo que dijera o intentara hacer, Taehyung simplemente le evadia o ignoraba. El ánimo de Kim ponía de los nervios a Jeon, pues no sabía qué hacer para hacerlo sentir mejor. Y tras pasar toda la tarde siendo ignorado por Taehyung, Jungkook realmente comenzó a pensar más de lo debido. Tenía miedo que algo sumamente malo estuviese pasando dentro de la mente del castaño y que lo estuviese cargando él solo. Queria ayudarlo pero Taehyung no lo permitía e incluso, le pidió que lo dejara solo en la habitación.

Ellos dos jamás se habían distanciado así antes, por nada. Y Jeon sabía que quizá estaba exagerando pero ese comportamiento de Taehyung lo ponía mal, lo hacía sentir como si el candente amor que se tenían estaría siendo reemplazado por un amargo sentir del que Taehyung no parecía querer ser liberado. Jungkook estaba preocupado por su novio porque Taehyung jamás le había pedido espacio, jamás se había comportado distante, jamás le había mirado con esos ojos tristes y esa aura tan pesada.

Jungkook tenía miedo, quería ayudar, pero no sabía cómo.