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Las clases sumadas a los miles de pensamientos que atacaban a EunJi la estaban volviendo loca. HoSung no se le había vuelto a acercar, pero YoonHo tampoco y eso la hacía sentir culpable. Pudo haber evitado ir con el otro y dejarlo solo, sin embargo no fue así. Sentía que debía disculparse por ello.

El timbre liberó finalmente a todos los estudiantes de sus aburridas clases. La morocha terminó de ordenar sus cosas y se reunió en la puerta de su salón con HaNa. Comenzaron una pequeña discusión sobre el último tema que estaban revisando de inglés, materia en la cual EunJi no sobresalía en lo absoluto. Su amiga trataba de ayudarla en las tareas, pero la mayor parte de las veces Kang terminaba rindiendose. En el pasillo las chicas vieron que a una buena distancia estaban pasando Ayno y Baron. Al mismo tiempo, Ziu estaba por allí, yendo para otro lado. EunJi no pudo evitar pensar en la charla que había tenido con HoSung. Tal vez si lograba hablarle, podría hacer que dejara de ser ese tipo de persona. La muchacha le dijo a HaNa que se adelantara y fuera con sus amigos para luego comenzar a caminar hacia HeeJun. Ayno, quien estaba parado en su casillero hablando con ChungHyeop, había notado aquello y dejó escapar un suspiro de frustración mientras cerraba la puertilla de su locker algo bruscamente.

EunJi temía que lo que estaba por hacer la metiera en problemas. Teniendo en cuenta lo que le había hecho la última vez, un pensamiento lógico habría sido alejarse de él cuánto más pudiera, pero después de saber todo lo que había ocurrido, sentía tristeza por el chico. Trató de llamarlo por su nombre unas veces, pero el otro simplemente la ignoró. Finalmente se detuvo detrás de él al llegar a la puerta del salón donde el contrario tendría su siguiente clase. A pesar de que el pasillo ya se había vaciado por haber terminado el receso, este se giró y la miró con algo de desagrado.

—Pero miren esto... ¿Qué quieres, señorita becada? —preguntó alzando las cejas con algo de sorpresa.

—Quiero hablar —respondió con firmeza, igualmente estando algo nerviosa. Notó como el otro se cruzaba de brazos y apoyaba su cuerpo contra la pared—. Yo... se lo que pasó con SunWoo... Debió haber sido horrible para tí... —dijó apenada mientras mantenía su mirada en el piso. Ziu abrió los ojos y sintió como el corazón se le paraba por unos instantes.

—¿Tú qué mierda sabes sobre SunWoo? —habló frunciendo el ceño y alzando un poco la voz—. No tienes ni idea...

—Solo sé que perder a alguien tan cercano puede causar mucho dolor. Lo entiendo, HeeJun, por favor déjame ayudar... —respondó levantando sus ojos.

—Ah, ¿sí? ¿Y cómo planeas “ayudarme”? —preguntó para luego reír amargamente. Se acercó a la chica y la fulminó con una mirada de odio—. Tú no eres nadie aquí para hablar sobre SunWoo o intentar “ayudarme” —dijo en voz baja. Comenzó a caminar hacia ella, quien automáticamente empezó a retroceder para mantener la distancia—. Pensaba que esa marca que te dejé en el brazo había sido demasiado, pero parece que tú piensas lo contrario... Venir hasta mí sola, vaya elección, Kang EunJi...

Antes de que EunJi pudiera detenerlo, este ya la estaba forzando a entrar en la habitación oscura de limpieza que estaba frente al salón de clases. La encerró y sin decir una palabra más, se fue a matemática. La chica trato de golpear y gritar para poder salir, pero todos fueron intentos inútiles. Todos estaban en clase y la puerta estaba trabada desde afuera. 

Mordió su labio inferior y se maldijo a ella misma. HeeJun tenía razón. Había estado fuera de lugar, habia sido impulsiva y lo sabía muy bien, sin embargo había ignorado aquello. Recostó su espalda contra la puerta y se agachó para acto seguido ocultar su rostro en sus rodillas. ¿Cómo había sido tan estúpida? Esta vez sentía que se merecía el enojo del chico.

¿Qué hacía ahora? Sacó su teléfono e intentó escribirle a sus amigos, pero no tenía internet. Se pasó las manos por la cara y dejó escapar un suspiro, no le quedaba más opción que esperar a que alguien al encuentre.

𝑵𝑶𝑻 𝑬𝑨𝑺𝒀 𝑻𝑶 𝑪𝑶𝑵𝑻𝑹𝑶𝑳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora