Historia diferente.

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Esta no es una historia como las que he contado, esta narra la historia de un joven. Un joven que odiaba la soledad o más bien. No la odiaba ni la amaba, solo existía en el como en todos los demás.

Esta empieza con él, y con nadie más, solitario y olvidado. Tenia a sus amigos, claro, pero no novia, según él; no le importaba. Pero en el fondo, sabía que quería a alguien a quien mimar, a alguien que recibiera su amor; y también quería ser amado y mimado ¿Preguntan por qué?, el también, la verdad tampoco él lo sabía.

Un buen día conoció a ella, ambos compartían un humor y gusto muy similares por lo que se volvieron amigos, la amistad floreció y siguió creciendo, paso el tiempo, reían y jugaban juntos, como seria de esperarse (quizá...) a él le empezó a gustar ella.

El, como buen introvertido, no supo cómo decírselo siguieron los días, las tardes y las noches y ellos seguían jugando y riendo, él decidió decírselo...

Mientras jugaban como habitualmente lo hacían, el solo se lo dijo, sin previa anticipación, ella como siempre, tranquila solo le dijo: Creía que aun extrañabas a tu ex... Confundes a la gente si haces eso...

Y por decisión de él, siguieron jugando, como si nada...

Lo siguiente importante, fue cuando decidieron despedirse, un adiós, y un piénsalo, fue lo que salió de ella y de él, respectivamente.

Él pensó en que podía hacer para que ella le correspondiera, el decidió escribirle un pequeño relato, solo para al final decirle lo siguiente:

-Gracias por siempre estar conmigo, o quizá no siempre... pero estar conmigo, nos conocemos desde hace relativamente poco, pero, me gustas. Quizá esta no es la mejor forma de decirlo, pero en realidad siento eso, y también hay cosas que no sé cómo ponerlas en palabras y escribí esto aquí, para poder decírtelo. En realidad, no se si me vayas a decir algo, quizá no o quizá sí, eso solo tú lo sabrás. A si que solo y nuevamente, te quiero mucho.

Y hasta aquí termina esta historia. No sé lo que paso después, así que supongo que ustedes tampoco, solo él y ella lo sabrán...

Pequeñas historias de terror y tormentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora