12. Amar a alguien mas

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El movimiento que hiciera Félix sobre la boca de Fede fue lento y pensado, en carne temblorosa y afectada, sin corresponder al beso porque sabía que no podría hacerlo, así que sólo esperó hasta que el de ojos dorados decidiera alejarse.

—No creo que nunca te enamores de mí. —Fueron las primeras palabras del más bajo, no era un reproche o una burla, simplemente un hecho.

—¿Por qué no? Eres el más lindo florista que existe en la vida y cuando éramos niños quería casarme contigo...

—Pero tú quiere a Deuz y si no se tratara de él, siento que tampoco sería yo. —No se necesitaban muchas más explicaciones, no serían dadas ni pedidas por ninguna de las dos partes.

La amargura que otorgó esa verdad, casi hace vomitar a Félix pero simplemente desvió el rostro con vergüenza porque en realidad deseaba utilizar a un hombre inocente y, en especial, porque era tan evidente como para que el otro hiciera el intento de consolarle pero tuvo que tragarse la acumulación de sensaciones para hablar con su amigo.

—Por favor, finjamos que esto no ocurrió.

—No hay problema... —El de Tréboles le dedicó una sonrisa comprometida y le apretó la mano en un gesto amistoso—. Verás que todo saldrá bien cuando regreses a casa.

El de ojos dorados no lo creía pero respondió con una mueca neutra y salieron a reunirse con el resto, de momento era incómodo estar solos.

★★★

Al llegar el otoño, la tercer reunión se daría en el reino de Diamantes, algo que Golden había esperado con ansías, para mostrarle al As lo mágico que se veía su reino en esta época del año y suspiró al pensar en lo que ahora sucedía entre ellos.

Parece que las cosas no habían cambiado mucho pero en realidad se siente mejor, es cálido, es agradable y dulce, el simple saber que existe un sentimiento tan grande y que es correspondido, es una fantasía para ambas partes que aún tiene el sabor de un sueño.

El rubio mira el anillo en su mano, que era una pesada cadena que buscaba arrastrarlo hacia el infierno, en especial cada vez que intentaba volar lejos de la tentación que significaba el pelirrojo. Sin embargo, existía algo que opacaba esos momentos de dicha y era que la Jack de Tréboles estaría presente... ¿Qué tipo de reacción tendría Foxy al verla?

Chica, como buena anfitriona, movilizaba todo para tener en perfectas condiciones para cuando llegaran sus invitados y chilló de emoción a los de Tréboles, que fueron los primeros en ser recibidos con la felicidad que emitía la rubia de ojos magenta.

—Dejé a los chicos poniéndose presentables pero en un momento vendrán a recibirlos.

—No imagino a Fox intentando verse presentable —Fueron las palabras de Meg que recibieron eco en el resto, no sin aprecio.

Estuvieron hablando un rato con total calma, intercambiando algunos chismes de sus reinos para hacer tiempo mientras llegaban el resto y pronto hicieron acto de presencia el rey de Diamantes —al cuál se llevó de inmediato su reina para contarle algo interesante de lo que se enteró— y los As también saludaron a los recién llegados y el pelirrojo comenzó a hablar de buena gana con sus amigos.

No tardaron mucho en llegar los del reino de Picas pero el ambiente no era, ni de lejos, tan ameno como con los otros.

La tensión podía sentirse alrededor de los recién llegados pero Golden no pensaba que fuese por algo demasiado grave, aunque Chica le dijo que corrían los rumores de que los reyes de Picas se separaron por un tiempo e incluso que Félix tenía un amante en Tréboles pero no le daba mucho crédito a esos chismes, considerando lo enamorado que estaba Félix de Deuz.

Lo que más angustiaba al otro era ver el brazo del pelirrojo alrededor de la Jack de Tréboles mientras todos se reían de algún comentario al azar, por lo que trató de entretenerse con el resto de los reyes, incluidos los de Corazones que recién hacían su aparición.

Por momentos era fácil olvidar que esas reuniones no se hacían por simple placer de compartir, hasta que las Jokers hicieran su aparición majestuosa junto a sus aprendices que no podían permanecer alejados entre ellos, en especial los de magia negra, siendo observados por Freddy; parloteando con cada vez más calma, ya que la profecía que los condenara a tanto estrés, parecía ahora un (mal) chiste lejano.

La junta ocurrió rápido, al igual que un obligatorio trámite molesto, antes de disfrutar la reunión entre los representantes de cada reino sin novedades.

En medio de esta fresca tarde, Foxy se acercó al rey del lugar en el que estaban, el cual estaba escondido detrás de una columna, tratando de soportar sus propias e incomprensibles emociones, hasta que fue sorprendido por una mano en su hombro, hasta encontrarse con unos ojos dorados que de inmediato lo aliviaron.

—Foxy...

—Eres un idiota. Deberías saber que no pienso más en Joy, no de esa manera. —Este comentario incomodó al más bajo, el cuál hizo una mueca de disgusto y se mostró esquivo ante lo que le decía.

—No sé porqué dices eso.

El más alto observó a su alrededor para asegurarse que no había nadie cerca y tomó la mano del rubio para llevárselo de ahí sin ojos indiscretos de testigos. El monarca de ojos grises cooperó sin trabas hasta que estuvieron en un salón privado pero el As se aseguró de que estaban seguros antes de hablar con Golden.

—Para mí está claro... —Murmuró Foxy sintiendo las mejillas un poco acaloradas— Ahora sólo te quiero a ti, aunque vea a Joy, Chica o cualquier otra... No te dejaré de lado. —Al decir esto, acarició inconscientemente el anillo que antes el otro le había regalado, algo que le hacía ver adorable.

El pelirrojo se avergonzaba de decir algo así en voz alta, aunque el único que lo escuchara fuera el rubio pero realmente él tenía que entender que estaba completamente involucrado en esta extraña relación que sostenían.

—Lo sé... Y yo también te quiero sólo a ti. Te quiero como nunca imaginé querer a nadie.

Las palabras fueron claras y resonantes en la habitación. Ambos estaban un tanto abochornados pero era mayor la felicidad ante las palabras directas. Aún guardarían el secreto pero ahora tenían la certeza de que era algo que valía la pena guardar y proteger.

El más alto caminó de modo reverencial hasta el rey, para inclinarse y tomar uno de esos suaves besos que sólo le pertenecían a él, tan sentido y entregado que fácilmente les dejaba sin aire ni noción del tiempo. Tuvieron que separarse mientras aún tuvieran un poco de sentido común, especialmente el de ojos plateados ya que, con mejillas arreboladas y una sonrisa bobalicona, se dispuso a irse.

—Deberíamos volver... Pronto se darán cuenta que no estamos, pensarán que estamos peleando y vendrán a buscarnos.

Quien los hubiera visto juntos estos últimos meses no creería realmente que estarían peleando —al menos no de forma tan grave que alguien tuviese que intervenir— pero era cierto que tampoco podrían pasar tanto tiempo solos, los rumores corrían demasiado rápido y muchas veces eran más maliciosos que la verdad. Aún así, desoyendo las protestas, el As se llevó de la mano al otro hasta que se escucharon los ruidos cercanos de la gente conviviendo.

Cuando todo se normalizara, Foxy tendría una larga conversación con el otro, no podían separarse ahora y sabía que Golden estaría feliz con su resolución. Spring y Meg se entristecerán un poco pero al final lo apoyarían con su decisión de abandonar el reino de Tréboles, sabiendo la razón por la que lo haría.

★★★

Más de uno notó las ausencias pero nadie comentó nada.

Ahhh. El amor joven... Era una lástima que les duraría tan poco... Sólo un amor podría persistir al final y él se aseguraría que sería el suyo...

Para evitar la guerra (FNAFHS AU CARDS KINGDOM) GOLXY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora