Los días siguieron su cauce con aparente tranquilidad aunque todos estaban excitados porque ya se inauguraba el verano y con él, la primera reunión que tendrían los gobernantes, sus Jacks, As y los Jokers, en el reino de Corazones.
Para los reyes fue dichoso poder recibir a todos los demás en su castillo, de hecho Chica estaba extasiada con los preparativos para el viaje, corriendo de un lado para otro, asegurándose de no dejarse nada. Esto se debía a que, en circunstancias normales, no se reunían todos los monarcas excepto para El día de Cuidado de la Tierra en primavera, en el reino de Tréboles o cuando ocurría algo muy importante como un cumpleaños Real o cuando ocurrieron las bodas; a pesar de que fuese por algo malo, la rubia estaba feliz de poder reunirse de nuevo, ya ansiaba que fuera otoño para tener tanto gente en su hogar.
Fueron los primeros en llegar en poco tiempo a Corazones, después fueron Tréboles, les siguieron Picas y al final sólo se aparecieron los cuatro Jokers.
Antes de ponerse en materia, fue una mezcla de abrazos y lloriqueos para con los ausentes porque, aunque no había sido por tanto tiempo y muchos estuvieron en contacto a través de cartas, la costumbre de verse diario hizo que la distancia fuera difícil. Después de algunos minutos utilizados para saludarse entre todos, las gemelas los pusieron en orden para hablar de lo más importante.
Como era de esperarse, Onnie, siendo el más desconfiado de todos, fue el primero en hablar pero sin ningún resultado. De esta manera, cada uno de los que formaron parte del intercambio en frente de todos, con sus respectivas observaciones y reservas según sus propias conveniencias. Ninguno pudo presentar algún reporte realmente acusatorio, no habían pruebas para ello más que simples especulaciones y esas les sobraban a todos pero no eran útiles para castigar a alguien sin temor a equivocarse.
Puppet miró con atención cada reacción pero todos podrían ser tan culpables como inocentes, la Joker de magia blanca preguntó si alguno de los guardias quería cambiar de sitio, quizá rotarlos de reino y cada uno miró de reojo a alguien del reino en el que eran "invitados".
Onnie observó a Bonbon, la cual le guiñó el ojo con complicidad. Eak a Lily aunque ella lo evitase, centrándose en la ligera turbación del As de su reino. En el caso de Loon fue a Meg que estaba junto a él y ella le apretó la mano, acariciándole el dorso con el pulgar, ocasionando su sonrojo. Y Foxy, obviamente, se centró en Golden, con el cual empezaba a volverse más unido.
En un mudo acuerdo, todos decidieron continuar donde estaban, no era enemigos lo que buscaban sino aliados, tal vez.
—Sentimos la misma energía alrededor de ustedes, existen cosas que han cambiado pero, en esencia, sigue igual. —Aseguró Mai mientras de forma imperceptible se acercaba a su hermana, buscando un consuelo que sólo ella podría ofrecerle porque, aunque pareciera algo externo a los Jokers, en realidad comprendían que el destino de todos estaba unido.
—Están siguiendo el camino... Sus acciones no han podido modificar la profecía. —Finalizó la de cabello corto, esperando la respuesta de los otros.
—Podemos continuar así... Tal vez cambiar la estrategia a estás alturas sería contraproducente. —El primero en defender su postura fue Golden, aunque dentro de sí admitía que lo hacía por motivos egoístas.
Al igual que alguna vez mencionara Towntrap, no creía que hubiera dicho traidor pero su relación con Foxy estaba cambiando lentamente, surgía cierta conexión que estaba surgiendo a través del trato diario, aún peleaban mucho pero de igual manera podían bromear e incluso le estaba enseñando a pelear. Quería saber cuánto más cambiaría si estaba con él porque, aunque todos le importaban, el pelirrojo lo hacía mas que cualquier otro.
—Estoy de acuerdo con mi amigo, aunque no pase nada, creo que no afecta en nada que algunos guardias estén en otro reino. —Secundó Deuz, dando un amistoso golpe en la espalda de su As, el cual gruñó de forma indescifrable.
El rey de cabello cenizo miró a su reina con la pregunta impresa en el rostro antes de darles la razón a los otros, siendo los reyes de Corazones los únicos que susurraban entre ellos antes de tomar una decisión. Todos sabían que eran los más sobreprotectores con los suyos, por lo que no era tan increíble que les costara trabajo tener a su As lejos otra vez.
—De acuerdo, pero quiero seguir teniendo noticias frecuentes. —Cerró Bonnie con algo de molestia pero que fue tranquilizado por su esposo.
Decidieron que todos se quedarían un par de días en el reino de Corazones, con la abierta invitación de los reyes, para convivir y no regresar tan pronto a sus respectivos hogares para que el viaje valiera la pena, además de que las parejas y los amigos se extrañaban y volverían a separarse.
★★★
Por la tarde, Spring paseaba de la mano con Meg y Joy siguiéndoles de cerca para, finalmente dejar que las chicas hablaran y pasearan solas al sentir una mirada sobre sí, encontrándose con que se trataba de "la reina" de Picas, el cual parecía estar hablando de algo importante con Eak.
Sus miradas se cruzaron, después le siguió una sonrisa amable que fue suficiente invitación para que el más alto se acercase a los otros.
—Hola chicos, ¿Puedo ser parte de la conspiración? —A pesar de la mala cara que le dedicó el de cabello grisáceo, el Rey no perdió la sonrisa y mucho menos porque el pelirrosa parecía divertido por su comentario.
—¿Eres bueno conspirando? No creo que sea algo que le convenga a la reina Meg.
—Aunque lo fuera, ella lo descubriría de todas maneras pero vine a descubrir un secreto. —El tono de misterio cubrió la voz de Spring sin perder ni un instante la sonrisa, por lo que los otros se acercaron con curiosidad— ¿Por qué nos mirabas?
A esas palabras, le siguieron las risas de Félix y la ligera irritación del As, que ya se había aburrido con este intercambio que no era ni mínimamente peligroso para su Rey y prefería gastar su tiempo en algo más provechoso.
—Ya me aburrieron, mejor voy a ver a mi güey. —Luego de informarlo, lo cumplió. Los ojos dorados siguieron un momento al que, más que su sirviente, era su amigo y luego regresó su completa atención a su acompañante.
—No quería incomodarte es que es envidiable... —Félix exhaló un suspiro anhelante antes de continuar con su explicación— Verlos es casi utópico. A veces me gusta imaginar cómo es gobernar junto a alguien que te quiere tanto, con ustedes y los conejitos no parece un simple sueño.
—Tal vez Deuz te quiere... Pero es tímido —Para ser sinceros, el rubio que había visto de cerca la interacciones entre los reyes de Picas y en especial la animadversion que ocasionaban las atenciones del chico frente a él ante el castaño, dudaba de la veracidad de sus propias palabras y ya que, algo parecido a la amargura adornó la sonrisa del pelirrosa al escuchar aquello como si de un chiste cruel se tratase, le decía que él también lo hacía.
—Es lo mismo que yo creo pero a veces... No puedo seguir mintiendome a mí mismo cuando me doy cuenta que él nunca se enamorara de mí y me siento solo...
—No puedo hacer que se enamore de ti pero si quieres dejar de verle la cara al enano puedes venir al reino de Tréboles, no creo que Meg se enoje, no será difícil tener buenos amigos ahí, me incluyo. —Esa invitación fue aceptada con calidez porque realmente muy pocas personas confiarían en él de aquella manera.
A lo lejos, Deuz miraba el intercambio y una molestia lo invadió desde lo más profundo de su ser, aunque se decía que no eran celos, quizá era una indigestión porque nunca admitiría otra cosa.
A partir de ese día, Félix empezaría a enviarse cartas con el rey de Tréboles y estrechar una amistad que podría salvar a todos, sin que fuesen conscientes de ello.
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Para evitar la guerra (FNAFHS AU CARDS KINGDOM) GOLXY
FanficLo más simple para una persona, puede ser la perdición para otra... O para todos los reinos. ¿Una profecía que advirtió o arruinó todo?