Es solo coqueteo ¿Verdad? #WangXian #CrossoverMXTX

Capítulo 22: Sin pistas, la paciencia es el camino

El día del incendio Shen Yuan se quedó en la casa a petición de su hermano pues este necesitaba salir y despejarse un rato, cuando Shen Yuan le recordó que debía presentarse a la reunión por la obra de teatro él no era la persona más contenta del universo, menos cuando recordó que iba a estar con Luo Binghe.

—Trátalo adecuadamente — Advirtió Shen Yuan. — A mejorado su relación conmigo como para que en un día me destroces los avances.

— ¿Tan débil es su carácter que por unas simples palabras se va a ofender? — Preguntó burlón Shen Jiu, enojando a su hermano.

— Es sensible y realmente escucha todo lo que le decimos — Trato de defenderlo, acercándosele para entregarle el abanico que compartían. — Si al menos dejaras de mirarlo con envidia y desprecio podrías notar que es una buena persona. Solo que fueron las personas y tu carácter lo que lo volvieron tan... mezquino.

Shen Jiu no respondió de inmediato, escondiendo su rostro con su abanico. — Tal vez, pero está claro que tú lo malcriaste. Aquel carácter ennegrecido se ilumino como una llama debido a tu excesivo cuidado, ahora ya ni siquiera puede darte el espacio que es debido y siempre busca llamar tu atención, alejándote de las otras personas.... Realmente se volvió un perro del cual sentir compasión.

Se mofó Shen Jiu abanicándose un poco, sintiéndose orgulloso por aquel comentario tan acertado.

De alguna forma Shen Jiu siempre lograba enojar a su hermano, tocando sus puntos sensibles. Él sabía que Shen Yuan despreciaba que denigraran a su discípulo de esa manera, aun si sus palabras eran ciertas, solo que consideraba que había formas más adecuadas para decirlo. Por eso no se sorprendió cuando el ceño de su hermano se arrugo, apuntándole con un dedo. — Puedo sentir muchas cosas por Luo Binghe, hermano... Pero ninguna es compasión.

— ¿Oh? Interesante respuesta, deberías decírselo entonces. Quizás con eso logres quitarle la inseguridad que tiene hacia vuestra relación, aunque conociéndolo eso solo lo hará más descarado a la hora de mostrar su afecto ¿No crees?

El ultimo recuerdo de Shen Yuan con su gemelo era de él aventándole una almohada, exigiéndole que se apresurara en irse o llegaría tarde.

Luego de eso Shen Yuan estuvo mucho tiempo en su Tablet leyendo, aprovechando que varias de las escritoras que seguía habían actualizado, dejando su comentario cuando la emoción le desbordaba hasta por los poros, indignándose al ver que algunas dejaban los capítulos en partes tan emotivas y estresantes que era una agonía tener que esperar

¡Maldita novela! Pensó en aquel momento.

Es por eso que en su biblioteca tenía novelas en emisión y novelas terminadas, para así al menos poder quitarse ese sabor amargo de la insatisfacción con una lectura rápida y de buena redacción.... Ahora si pillaba un libro terminado con incoherencias, faltas de ortografía y con una trama pobre... era mejor releer una obra de arte, al menos con eso calma su corazón.

Estaba tan absorto en sus cosas que cuando Shang Qinghua llego como una bestia histérica a su pieza, el invitado no deseado acabo golpeado. Su rostro enrojeciéndose un poco ante tanta brutalidad.

— ¡¿Cuantos años y aun no aprendes a tocar cuando entras a mi cuarto?! — Preguntó indignado, arreglándose la ropa mientras dejaba su Tablet en un mueble. — ¿Y qué es lo que te tiene tan alterado? ¿Acabaste con la paciencia de Mobei-Jun otra vez? ¿Por qué estas tan sucio?

Shang Qinghua negó febrilmente. — La universidad, tu hermano... ah, nuestros hermanos jurados ¡Todos... están en el hospital!

Debido a todo lo que acababa de pasar en la universidad, Shang Qinghua estaba con su corazón a mil, por lo que solo soltó lo primero que vino a su cabeza de una forma abrupta. En su mente reviviendo todo el fuego, los gritos y la gente corriendo, había tratado de llegar lo más pronto posible una vez vio a Luo Binghe subir con "Shen Qingqiu" a una ambulancia que ni siquiera se preocupó por el aspecto que le daba al resto.