── iremos cariño, pero primero tengo que ir a arreglarme para después venir a buscarlos.
── vale -dijo sonriendo y entró.-
── vendré en seguida, espero encontrarlos arreglados.
── por supuesto.
── dices "por supuesto" pero tardas medio siglo en arreglarte.
Sonrió.
── te prometo que estaré arreglada.
── bien -la tomé de la cintura y la pegué a mí, pasó las manos por mi cuello.-
── fingiremos que nos llevamos mal delante de los otros, ¿verdad? -preguntó sonriendo.-
── exactamente -dije sonriendo.- dile a Liam que no puede decir que nos vió durmiendo juntos.
── tranquilo, le diré.
── vale -mordí su labio y tiré de éste sin hacerle daño. Sonrió y me besó. Bajé las manos hasta el borde de su bata y colé las manos. Sonrió en medio del beso.-
── vete ya -susurró.-
── está bien.
Le dí un beso más y nos separamos.
•••
Cuando me abrió Liam, sonreí.
── tienes que dejar de abrir tú, puede pasar cualquier cosa, ¿vale? -asintió y entró.- ¿y tu madre?
── aquí estoy -la miré.-
── vaya, estás preciosa.
── gracias -dijo sonriendo.- ¿nos vamos?
── sí.
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•••
── ¡tía Alison! -gritó cuando ella abrió la puerta.-
── hola príncipe -sonrió y lo levantó. Lo abrazó fuerte y nos miró, frunció el ceño y bajó a Liam, éste se fué corriendo hacia adentro.- ¿volvieron?
── Alison, que hayamos llegado juntos no quiere decir que hayamos regresado, ¿supéralo sí? no volveré con ella.
── tampoco quiero que regreses conmigo, no voy a rogarle a un idiota cómo tú.
── chicos, por favor, vamos a llevar la fiesta en paz por el bien de Liam, ¿sí?
── habla con tu hermano -dijo Alina.-
── Vince, quiero que todos tengamos una tarde agradable y dejen de estar matándose cómo siempre, ¿podrás estarte calladito?
── claro, siempre y cuando esta bruja me deje en paz.
Suspiró.
── Aurora y Josua están en el salón con Diego -ella caminó delante. Cerré la puerta y sujeté a Alina deteniéndola.-
── esto me está poniendo caliente -le susurré. Se giró a verme.-
── vuelves a llamarme bruja, y te castigo, ¿te queda claro?
── clarísimo jefa -se acercó a mi boca a rozó nuestros labios para luego separarse. La tomé con fuerza de la cintura y la pegué a mí.- no me dejarás así.
Llevé una mano a su nuca y la besé. Sonrió en medio del beso.
── ya -susurró. Cuando nos separamos, limpió mis labios.- iré al baño a arreglar el desastre que me hiciste en la boca.
── vale.
Se giró, le dí una nalgada. Se giró a verme con una sonrisa.
── ¿y Alina? -preguntó Aurora cuando entré al salón.-
── en el baño, ¿y por qué me preguntas por esa?
── perdone señor, no era mi intención hacerlo sentir mal -rodó los ojos. Sonreí y me senté a su lado, cuando besé su pelo, me miró.-
── perdona, es que ya sabes que ni ella ni yo nos aguantamos.
── está bien.
── hola hermano -Josua despegó la vista del móvil, estaba sentado al otro lado de Aurora con Liam en sus piernas mientras le explicaba algo a mi hijo sobre un juego.-
── hola bro -me chocó el puño y volvió a centrarse en Liam y en el móvil.-
Cuando me dieron un golpe pequeño en la cabeza, miré. Era Diego, que estaba sonriendo.
── ¿qué tal, hermano?
── bien, ¿dónde estabas? -pregunté.-
── arreglando la cama para que la señorita no me regañe -dijo refiriéndose a Alison.- dice que si me levanto de último tengo que arreglar la cama.
Sonreí.
── ella siempre ha sido así, cuándo vivíamos con nuestros padres, se metía en mi habitación todos los días a dormir conmigo, en la mañana se iba antes de que yo despertase y luego me decía que no iba a arreglar mi cama porque me levanté de último.
Ella se rió.
── eso siempre ha funcionado -dijo ella.-
── mañana me voy a levantar primero -dijo él.-
── ya veremos, cariño.
Alina entró y los saludó a todos, se sentó al lado de Josua y continuamos hablando.
── Diego, tengo hambre -dijo Alison sobre el medio día.-
── ¿qué quieres?
── que preparen la comida -dijo ella.-
── ¿nosotros? -preguntó él.-
── por supuesto -dijo Aurora.- siempre que quedamos, cocinamos nosotras tres, les toca a ustedes por una vez en la vida.
── a mí me parece bien -dije sonriendo.-
── ¿y qué quieren comer? -preguntó Josua.-
Ellas se pusieron de acuerdo.
── arroz tres delicias -dijo Alison.- tienen todo en la cocina -los tres nos pusimos de pié.- amor, ¿puedes traer un vino y varios copas? -le pidió. Él sonrió y se acercó a ella, la besó y acarició su mejilla.-
── ahora mismo, preciosa -ella sonrió.-
Me alegro de verlos así, es mi hermana, mi hermana que está con mi mejor amigo, y me gusta verlos felices a los dos. Me gustaría mostrar mi felicidad, pero Alina y yo no estamos listos todavía.
Antes de salir del salón, la miré, me guiñó el ojo sonriendo.
