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*Narra Alison*

llegamos.

Me bajé del coche y saqué a Liam, lo tomé de la mano y fuimos hacia el supermercado.
Cogí un carrito y dejé mi bolso en este.

─ tía, ¿puedo empujarlo?

─ es muy grande para ti, mi amor.

─ pero yo soy grande y tengo fuerza -sonreí y lo miré.-

─ pero tienes que ser más grande -cogí una bolsa de tomates y la metí en el carrito.-

─ ¿y cuándo sea más grande voy a poder?

─ por supuesto mi amor.

Me acerqué a las cebollas.

─ no me gustan las verduras, yo quiero chocolate.

─ ahora te compro el chocolate.

─ voy a buscarlo.

─ no, espera.

Cogí una cebolla, pero la dejé y cogí otra porque esa estaba mala. Volví a empujar el carrito.

─ ¿sabes que ya falta poco para que venga Santa Claus?

Cogí varias lechugas.

─ ¿lo sabías? -me giré a ver.- ¿Liam? -fruncí el ceño. Cogí mi bolso y salí del pasillo.-

─ ¡Liam! -corrí por los pasillos. Fuí al de los chocolates y ahí no estaba. Me acerqué a una cajera.- perdone, acabo de perder a mi sobrino, ¿puede llamarlo por megáfono?

─ ¿cómo se llama?

─ Liam.

Ella dijo por el megáfono su nombre y le pidió que viniese.
Pasaron unos minutos y nada.

─ ¿hay cámaras?

─ por supuesto, en seguida te llamo al gerente.

─ gracias.

Miré la hora con nerviosismo, son las dos. Dentro de nada Vince pasará a buscarlo.

─ hola, venga conmigo.

Lo seguí.

─ ¿ya le había pasado antes? -preguntó.-

─ sí, una vez fuimos a un supermercado y lo perdí de vista, pero imaginaba que estaría en el pasillo del chocolate, porque le gustan mucho, y así fué, lo encontré en el pasillo del chocolate, pero ahora estoy muy asustada, no lo encuentro.

─ ahora sabremos por dónde pasó.

Entramos a una oficina. Él rebobinó hasta que lo vimos.
Estuvo un momento en el pasillo del chocolate, quería un huevo Kinder, pero no lo alcanzaba. Un hombre con una gorra negra lo cogió y se lo extendió, hablaron un momento y luego tomó a Liam de la mano.

─ no, no, no, no, no -me llevé una mano a la cabeza con los ojos llenos de lágrimas.-

*Narra Vince*

Después de firmar, subí a la oficina de Diego. Justo cuando iba a tocar, él abrió la puerta.

─ iba a buscarte, pasa.

─ ¿encontraron algo?

─ algo no, encontraron mucho. Después de mucho trabajo por parte de mi equipo, sabemos quién os está siguiendo, están en peligro, Vince.

─ ¿quién es?

─ Grayson, el ex esposo de Alina.

─ pero...él está preso.

─ ya no, pagó su fianza y salió hace unos días, a alquilado el coche con su apellido, Jones, por eso sabemos que es él, gracias a los contactos de mi padre, contactomos con la cárcel y nos dieron la información de que pagó su fianza.

─ pero ese hijo de perra se quedó sin dinero, a Alina se lo dieron todo, y ella se deshizo de él.

─ yo no sé cómo la pagó, él caso es que está libre.

Mi móvil empezó a sonar. Lo saqué y miré.

─ es Alison.

─ hola -la escuché llorar, en seguida pensé en Liam.- ¿qué pasa? ¿por qué lloras?

Liam.

─ ¿qué pasa con mi hijo?

se lo han llevado.

Me quedé inmóvil. Sentía que me faltaba el aire. Diego me quitó el móvil y empezó a hacerle preguntas. Tiró de mí y salimos de su oficina.
Al bajar, nos montamos en su coche.

─ iremos al supermercado y miraremos el video -lo escuché decir.-

Miré mi teléfono porque estaba sonando, en la pantalla ponía "princesa".

Limpié mis mejillas y contesté.

─ Vince, ¿dónde estás?

─ princesa, voy a buscarte ahora, ¿vale?

─ ¿estás lloran -no terminó de hablar porque se coltó la llamada.-

*Narra Alina*

¿estás lloran -no terminé de preguntar porque me quitaron el móvil. Cuando miré, mi cuerpo se puso rígido.-

─ hola -dijo sonriendo.-

─ Grayson.

─ te ha sentado bien ser madre, si antes tenías tetas, ahora tienes el doble -dí varios pasos para atrás. Mi móvil, que él lo tenía, empezó a sonar. Miró la pantalla y sonrió.- tú hijo se parece mucho a él, creía que era sólo un rollo, que no estarías con él porque es más joven, ya sabes, eres muy acomplejada, así que me esperaba eso.

─ no hables de mi hijo.

─ ¿por qué no? es precioso, y tiene los ojos de su padre -sonrió.- y es muy cariñoso.

Fruncí el ceño.

─ ¿te acercaste a mi hijo?

─ mejor que eso, lo tengo en el coche, así que camina.

Sentía que el corazón me iba a mil. Me tomó con fuerza del brazo y tiró de mí.

─ cómo grites o intentes hacer algo, considera a tu precioso Liam muerto.

Se me hizo un nudo en la garganta.

Me soltó de su agarre y corrí hacia el maldito coche cuando ví a Liam por la ventana. Abrí la puerta y lo abracé.

─ mi amor -Grayson me empujó hacia a adentro. Abracé a Liam a mí.
En una mano, me puso una esposa, la otra punta, la puso en un agarradero que estaba en el techo.-

─ mami -limpié su preciosa carita con mi mano libre.- él dijo que va a matar a mi papi.

Miré al maldito de Grayson y luego miré a mi hijo.

─ es mentira, tranquilo, todo va a estar bien.

─ ¿por qué le mientes? -preguntó sonriendo.- voy a matar a tu papi, luego a tu mami, y por último, te entregaré a una familia en cualquier otro país.

Liam empezó a llorar.

─ calla a ese maldito mocoso -cerró la puerta y le dió la vuelta al coche.-

─ es mentira mi amor -limpié sus mejillas.- ya verás que tu papi vendrá a buscarnos.

Limpié mis mejillas.

─ ¡que lo calles! -gritó asustándonos a los dos. Abracé a Liam a mí.-

─ shhh, no llores bebé, tranquilo.



Segunda oportunidad. |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora