Capítulo 4 2/3.

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Paulina sentía tantos celos que a veces era imposible disimular pero cuando entraba en razón se daba cuenta que no podía dejar que los celos la delaten, ella sabía que esa señora a la que amaba tanto era sólo un amor platónico, sabía que jamás iba a poder tenerla como ella quería, así que era mejor tragarse los celos y tenerla cerca como amiga y jefa...

Paulina: Buenos días (entrando a la recámara) ya despierta?

Angélica: Te estaba esperando, creo que ya me acostumbré a despertar más temprano.

Paulina: Estoy orgullosa de mi alumna (riendo).

Angélica: Gracias a ti cambiaron muchas cosas y no sólo en la casa y en el trabajo sino en mi vida, eres como un ángel Paulina, ya no podría estar sin ti.

Paulina: No exageres.

Angélica: No exagero nada, lo juro.

Paulina: Angi perdón por lo de ayer, es que me sentía mal y no quería hablar.

Angélica: Es por tus papás?

Paulina: Si por eso (mientiendo).

Ángel: Ven, siéntate aquí (señalando la cama).

Paulina se sento junto a ella y moría de nervios al verla tan cerca, con sus ojitos tan hermosos...

Angélica: Si te aman de verdad ellos se acercarán a ti algún dia pero mientras me tienes a mi, no estas sola porque ahora somos amigas (la tomó de la mano).

Paulina: Gracias (trago saliva y sonrió nerviosa).

Angélica y Paulina se miraron por unos segundos...

Angélica: Me...mejor voy a ducharme.

Paulina: Si, te espero abajo (salió rápido).

Angélica estaba parada frente al espejo del baño tratando de encontrar una respuesta a lo que había sentido hacía unos segundos pero se mojó la cara y prefirió no pensar...

Rato después...

Angélica: Hoy tenemos algo importante?

Paulina: No, sólo las grabaciones y la entrevista por teléfono para La radio.

Angélica: Gracias a Dios que será un dia tranquilo.

Suena el celular de Paulina...

Paulina: Perdón.

Angélica: No te preocupes, atiende.

Paulina: Eli como estas?

Eliana: Bien Pau, estas en tu depa?

Paulina: No, recuerdas que te dije que estaba trabajando.

Eliana: Si, lo había olvidado pero es que me quede sin trabajo y necesito un lugar para quedarme.

Paulina: No tienes ni que pedir Eli, quédate en casa.

Eliana: No quiero molestar pero es que no tengo a quien más recurrir.

Paulina: No seas tonta somos amigas, la llave esta donde siempre ve y nos vemos el domingo.

Eliana: Gracias Pau, te quiero.

Paulina: Bye.

Paulina: Era mi amiga Eliana.

Mi Asistente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora