Capítulo cuatro: Mirada serena.

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Cabaret Demons.

En los pasillos oscuros del cabarert se puede ver la figura de Shinobu Kochou, quien es sujetada por detrás por Giyuu Tomioka. Y aún cuando está entre las manos de uno de las cabecillas de la mafia mantiene la cabeza en alto.

Aunque por dentro teme tener un final parecido al de su hermana: tirada en el suelo, desangrándose mientras cara a cara a tu asesino.

—¿Me matarás? —pregunta Shinobu por décima vez consecutiva. Miró por sobre su hombro encontrando un rostro sereno, demasiado sereno en realidad.

Desde que la había pillado la había agarrado y comenzó a guiarla sin decirle ninguna palabra. En otra ocasión lo hubiera golpeado y someterlo, pero con decenas de personas armadas por todo el lugar aquello solo sería una posición suicida.

Continuaron caminando hasta cruzar por un pasillo con una ilutación tenue. Al final está una enorme puerta con una placa dorada la cual tiene las palabras grabadas: "REY DE LOS DEMONIOS".

Giyuu abrió la puerta dejando ver un amplio estudio con excelente iluminación. En las paredes grises se pueden ver cuadros donde está la botella Annie, quien es la protagonista de unas pinturas donde se puede ver a las personas desangrándose y morir mientras intentan alcanzarla. Como si el querer llegar a esa bebida es un camino lleno de muerte y desdicha, cosa no muy alejada de la realidad.

«Este debe ser el despacho de Muzan Kibutsuji», concluyó Shinobu al notar doces sillas alrededor de una mesa redonda carmesí, el mismo número de las cabecillas del conocido rey de los demonios.

—Toma asiento. —Habla por primera vez Giyuu, provocando que Shinobu lo viera plasmada.

Dudosa se sienta en unas de las sillas mirando con recelo al Tomioka quien va caminando alrededor de la estancia, pasando sus dedos sobre las mesas de noches, estantes y cualquier superficie de interés.

—¿Cómo te llamas? —pregunta sin despegar la mirada de un librero que comenzó a capturar su atención.

Shinobu tragó en seco ante aquella pregunta, ¿debía decirle su nombre verdadero? ¿A un mafioso? No, eso sería una condena de muerte. Aunque el mentirle a un mafioso cuenta también como sentencia.

—Mi nombre es... —Comienza a dudar mirando alrededor de la estancia intentando decir algo rápido, hasta que sus ojos púrpuras cayeron en una botella puesta delante suyo. Una carmesí y con un nombre en grande—. Annie, mi nombre es Kochou Annie —responde rápidamente, tanto que se terminó maldiciendo por usar su apellido real.

«Ni modo, mejor no me retracto si no quiero que sospeche», alza el mentón más segura sin despegar sus orbes púrpuras de la figura de Tomioka. Quien parecía bastante ajeno a los nervios de la joven

—Entonces tengo razón, eres una Kochou. —Toma un libro grueso y comienza a revisar las página, mostrándose aún más ajeno a la situación—, es tan pequeño el mundo.

—¿A qué te refieres?

—Hace tiempo conocí una Kochou, aunque no tenía nombre de extranjero. —Regresa la mirada hacia el librero; tomando otro libro esta vez de color púrpura oscuro y con tapa gruesa—. ¿De dónde previenes?

—Pues nací aquí, mi padre es de Japón y mi madre es extranjera, pero no fue una relación muy buena. No conocí a mi familia paterna y solo tengo a mi madre en esta ciudad.

—Entonces debo suponer que no conoces a nadie del apellido Kochou.

—Sí.

—Hmm, ¿ni si quiera a Kochou Kanae?

Shinobu aguantó la respiración al escuchar el nombre de su hermana lo que hizo que el mafioso levantara la mirada del libro y la mirara con interés, mientras que ella no podía creer lo que sucedía.

¿Él conoció a su hermana?

—Por tu reacción debo suponer que a ella si la conoces. —Se recarga en el librero sin despegar la mirada en ella.

—Era una prima, nada más.

—Ya veo —dice regresando la mirada al libro entre sus manos, descolocando a la Kochou.

«¿Por qué se ve tan relajado? ¿Será que sabe que le estoy mintiendo? No, no le he dado mucho motivo para que piense que lo estoy engañando. Solo debo calmarme y esperar el momento oportuno de salir de este lugar, nada del otro mundo, de seguro perderá el interés en mi», levanta el mentón mientras va calmando sus nervios de a poco.

Ella no debería sentirse acorralada. Por lo visto Tomioka no se había mostrado tan interesado en ella sino en su búsqueda por el despacho y los libros, de seguro la dejaría salir en unos cuantos minutos.

En eso la puerta sonó provocando un sobresalto de Shinobu quien giró la cabeza viendo hacia la puerta. Provocando que sus nervios regresaran con aún más fuerza.

—Pasen.

La puerta se abre provocando que toda la adrenalina chocara con fuerza por todo su cuerpo, gracia en gran medida a lo que sus ojos observan. Ahí en el umbral de la puerta ve con horror a un hombre albino repleto de cicatrices quien, paras u desgracia Shinobu conocía demasiado bien: Sanemi Shinazugawa, el novio de su hermana y el padre del bebé que ella estaba esperando cuando la asesinaron.

Junto a él va un chico bajo con un cabello negro bastante largo y ojos cian bastantes profundos; por sus rasgos pudo intuir que debía ser un niño lo que la desconcentró aún más al ver alguien tan joven en medio de un mundo tan horrible.

Pero lo peor no fue eso, sino el ver como ambos tienen sujetos contra su voluntad a dos personas. El jovencito tiene sujetado por la espalda a un chico con la misma ropa de Sanemi y el desconocido. No pudo distinguirle su rostro al estar tan concentrada en lo que Sanemi tiene sujetado: Mitsuri Karonji, manteniéndola sometida gracias a un cuchillo que el albino amenaza en cortar la garganta de la joven en cualquier momento.

Giyuu alzó la mirada curioso viendo a las cuatros figuras en el umbral, pero mirando con mayor interés a Mitsuri y Obanai, el cual fue arrojado con fuerza hacia el suelo.

Rápidamente todo el suelo se fue manchando de sangre, provocando un chillido de pavor por la Karonji al ver a su amado desangrándose frente a sus ojos y no poder hacer nada.

Shinobu quedó estática en su lugar, mirando todo el escenario perpleja al no entender como su mejor amiga y el novio de su hermana está en aquella situación mientras un hombre se desangran frente a sus ojos.

Mientras que, en el caso del Tomioka, este mantuvo su mirada serena. Aún cuando ve a su propio compañero morir frente a sus ojos.





¡Nuevo capítulo! Y en este caso vemos al fin a Shinobu y a Giyuu aunque este se mostró más interesado en leer que en otra cosa xd. También Shinobu al parecer se hará llamar como Annie, ¿creen que esto terminará en algo mal o será un percance menor?

¿Qué opinan de la escena final? Hubo muchos detalles interesantes por ahí y quisiera saber si tienen alguna teoría sobre la información de que Sanemi era el padre del bebé de Kanae.

Y antes de que se me olvide, ¿Qué tal la nueva portada de la historia? ¿Prefieren esta o la anterior? Es que de verdad que estoy muy, pero MUY indecisa por cual irme.

Por un lado la anterior me encanta por el bar y la silueta de Giyuu y en esta tenemos a Giyuu nostálgico. Y no lo sé, ambas me gustan pero no se cual poner. Así que me sería de gran ayudar si me dicen cual es mejor, si esta o la anterior.

Sin más que agregar, ¡nos vemos el próximo viernes!

Smooth criminal [#1 S.AM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora