¿Menma tiene un gemelo?

25

El segundo semestre estaba por terminar y los proyectos junto a los exámenes estaban demasiado cerca, todos estaban nerviosos y solo esperaban que los profesores los atiborraran con mucho trabajo en especial el rubio quien no era nada bueno en la escuela, incluso si Menma se ofrecía para ayudarlo este no iba a tener progreso alguno pues probablemente terminarían haciendo nada ya que seguramente Naruto convencería a su hermano en hacer alguna otra cosa.

Al empezar la hora del almuerzo ambos gemelos comenzaron a guardar sus cosas para poder ir a comer algo pero sus acciones se vieron interrumpidas cuando Shikamaru se puso frente al rubio.

— Hoy después de clases te esperamos para poder ir a hacer el trabajo de español— habla con seriedad, ambos jóvenes debían aparentar que nada había pasado entre ellos.

— Está bien, supongo que los espero en la salida— habla el rubio algo incómodo, por otro lado ambos morenos observaron la escena, Sasuke estaba preocupado, no quería que Shikamaru le hablara pero ahora que el profesor los había puesto en un trabajo juntos no podía hacer nada.

— Entonces nos vemos al rato— Naruto asiente, Shikamaru pasa su vista en Menma  pero este no se inmutó y mejor volteo hacia Sasuke quien estaba junto a Sai.

— Mi parte se la enviaré a Sai— habla Menma quien toma su mochila y comienza a caminar a la puerta.

— Pero Menma este trabajo lo tenemos que hacer los tres, debemos de realizar una novela— habló Sai, el chico suspiro, no quería hacer el jodido trabajo junto a Sasuke.

— Como sea— dicho eso salió del salón.

— No cambiado nada— habla Sai con cierto cansancio, probablemente se estaba mentalizando para poder lidiar con ambos enojones.

— Perdón por las molestias que Menma pueda causar— habla el rubio algo apenado, Sai lo mira asombrado y luego niega.

— Realmente no has...— deja las palabras en el aire cuando siente un tirón por parte de Sasuke— supongo que gracias Naruto— habla antes de desaparecer del salón.

Ambos jóvenes suspiran y al mismo tiempo se recargan en una mesa, casi casi se están desparramando en ella.

— Mierda, hay demasiada tensión entre los dos— habla Shikamaru.

— Lo se, aparte fue difícil aparentar que apenas nos conocemos, pensé que nos iban a atrapar.

— Que dices, pareces un maestro del engaño— le da un leve golpe en el hombro al rubio, ambos sonríen y de nuevo se reincorporan para que cada quien se vaya por su lado.