★ Golden Experiencie Réquiem [+18] ★

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El taxi por fin nos dejó en la puerta del hotel, Frank explicó a los policías del aeropuerto que mi acción violenta era un acuerdo de los dos, gracias a eso nos dejaron ir después de 2 horas de demora y con una severa advertencia, podría haber usado a GER pero quería que conservara este recuerdo ese maldito maníaco. Al final quedamos con él de encontrarnos mañana junto con Pucci en algún lugar, pero por ahora estaba disfrutando de mi libertad.

Desde anteayer estuve reteniendo muchísimo mis sentimientos por culpa de Frank, incluso no le conté nada de nada a Mista, pero si notó mis cambios raros en mis actitudes, como por ejemplo no comer mucho porque me sentía asqueado, dormir demasiado y tener desánimo todo el tiempo, me llenó de preguntas por supuesto pero, por suerte comprendió que debía decírselo apenas llegáramos al aeropuerto de Miami y así fue... Menos lo del causal encuentro.
Hicimos el check-in y subimos a la suite presidencial de 5 ambientes compartida con nuestros amigos. Apenas entré y dejé todo en el living de la habitación para irme a nuestro cuarto privado, Sheila E y Fugo querían hablar conmigo pero al final Mista se quedó hablando con ellos de lo sucedido para transmitirles que todo estaba bien. En la recámara matrimonial tenía una hermosa vista panorámica con todos los lujos de un hotel 5 estrellas pero yo estaba más allá de todo eso, no vengo a vacacionar, me limité a tomar una botella de agua del minibar mientras mis ojos se nublaban por mis contenidas lágrimas. Por culpa de Frank no he podido digerir bien los últimos acontecimientos, no he podido descargarme bien... Fueron demasiadas sensaciones desagradables. Todavía tengo el estómago revuelto por el reencuentro con mi madre. Lo contenía, me hacía el fuerte delante de mi acosador, mi pareja y mis amigos pero fue demasiado extenuante para todo mi cuerpo. Además, no dejo de pensar en los crueles decretos de ella, sé que lo dijo con ira pero aún así, ni siquiera sumergida en la desesperación fue capaz de respetarme aunque sea un poco, ni aunque la hubiera torturado hasta la muerte hubiera reconocido ni un gramo de mi persona. He visto y presenciado cosas repugnantes de todo tipo en este negocio, pero el orgullo, el desprecio y la crueldad de esa mujer hacia mi, su propio hijo, es algo que me da tanto asco. A veces me pregunto, ¿por qué Dios me dio una madre así?, ¿por qué me afecta tanto...? Si ella no es más que parte de la escoria de la sociedad... ¿será porque por dentro aún anhelo que me reconozca de alguna manera...? ¿Tan desesperado es mi ser...? ¿Tan triste soy...?
Encima estoy doblemente asqueado por la comida del avión, fue la pasta más repugnante que haya probado en mi vida, solo bastaron dos bocados para dejar el plato aparte reteniendo mis ganas de ir a esos reducidos baños, en la comisaría del aeropuerto lo pude controlar bien pero ahora, otra vez el asco se estaba saliendo de control, dejé todo para ir rápido al baño, cerré la puerta, saqué la cinta sanitizante del inodoro, levanté las dos tapas para devolver mi malestar, casi no llego.

- ¿Giorno? - preguntó Mista tocando la puerta. - ¿Estás bien? Te vi corriendo.

- Si... - alcancé a decir tosiendo algo ahogado.

Trataba de ser silencioso pero era en vano.

- ... Yo te escucho bastante mal. - dijo moviendo el picaporte. - Voy a pasar.

Diablos, debí cerrar con traba la puerta, pensé que se quedaría mucho más hablando con los chicos. Necesito estar solo para curar todas estas sensaciones.

- Oye... ¿qué pasó?, ¿te cayeron mal los ravioles? - se burló- Por eso pedí el pollo.

- No hables de comida ahora, por favor.- pedí tapando mi boca con la mano.

Perdiendo su aura de burla se puso serio, tocó el botón para que el agua fluyera, acto seguido sostuvo mi frente con cariño y mucho cuidado para ayudarme, corriendo mi cabello a la espalda.

- Será mejor que saques todo lo que te hizo mal.

Mis arcadas ya no podían ser contenidas...

Al terminar mi acción, toqué el botón avergonzado y fui urgentemente a cepillarme los dientes con los cepillos que nos brindaba en hotel, notaba que mi cuerpo temblaba aunque no tenía nada frío. Que desgracia que Mista me haya encontrado de esta manera, últimamente no hago nada más que preocuparlo.

☆En la mente de Giorno Giovanna☆JOJO☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora