Hoy Serena había ido con su papá a ver una nueva casa, y cuando estaba por comenzar a ver Dear John en mi DVD, recibo una llamada de mi nuevo falso novio.
-Hola novia. –Casi podía verlo sonreír con su sonrisa de idiota.
-Hola. –Dije cortante.
-Esa no es manera de tratar a tu novio
-Luke solo dime para qué llamas.
-Bueno, mañana llevaré a Mia por un helado y quiere que vayas. Oh también para decirte que te recogeré en diez minutos. Te veo en tu casa, adiós.
Y antes de que yo pudiera objetar algo, Luke ya me había colgado. Subí a toda prisa a mi habitación y me cambié el pijama por un vestido color azul y unas pequeñas zapatillas de bailarina que quedaban con mi vestido.
Minutos después, tenía a Luke tocando la bocina estacionado en la calle. Bajé las escaleras y cuando subí a su camioneta y me puse el cinturón noté como no había dejado de mirarme en todo el trayecto desde la puerta de mi casa hasta el coche.
-¿Qué?
-Nada, solo que eres linda.
-Viniendo de la persona que me obliga a fingir ser su novia, no sé si deba considerarlo un halago o no.
-Eres una aguafiestas.-Rodé los ojos.- oye, vi ese gesto y no me gusta.
-¿Qué vas a hacerme? ¿Esposarme a una cama y darme latigazos? No eres Christian Grey ni Jamie Dornan, cuando lo seas me avisas. –Le guiñe un ojo y miré al camino. Ni si quiera me di cuenta que ya no estábamos frente a mi casa sino en la carretera.- ¿A dónde vamos?
-Mis padres organizan un almuerzo familiar o algo así, pero antes haremos una parada a mi lugar favorito en el mundo.
-¿Qué es…?
-No te lo diré o dejaría de ser sorpresa. Solo siéntate ahí, espera y disfruta del viaje. –Encendió la radio y en ella comenzó a sonar una canción de Train.
El viaje se me hizo largo y cuando quise saber, ya me había quedado dormida. Horas después, que en realidad parecieron minutos, Luke me despertó. Dijo que ya habíamos llegado, pero en realidad solo estábamos a mitad de la carretera con el bosque frente a nosotros.
-¿Y este es tu lugar favorito en el mundo? ¿Eres millonario y te gusta ver árboles? Eres un desperdicio para tantos millones.
-No, éste no es mi lugar favorito. Tenemos que caminar para llegar a él –Rodé los ojos y comenzamos a caminar en línea recta por en medio de entre tantos árboles.- ven por aquí
Me tomó de la mano y me encaminó hacia cierto lugar. Hasta quedar parados frente a una laguna en donde descansaban varios patos y cisnes, además de que bajo la luz del atardecer se veían increíbles.
-Ahora sí, este es mi lugar favorito.
-Es increíble. –Suspiré apoyando mi cabeza en su hombro y entrelazando nuestros dedos.- ¿Luke?
-¿Si?
-¿Qué no dijiste que tus padres organizaban un almuerzo familiar? –Pregunté apartándome de él, para mirarle a los ojos.
-Y eso hacen, ¿Por qué? –Frunció el ceño.
-¡Porque son las seis de la tarde! –Exclamé alterada mirando mi muñeca- Dudo mucho que tu familia almuerce a esa hora.
-Oh tú creíste que… bueno, quizá debí aclararte que el almuerzo es mañana. Lo siento. –Se disculpó encogiéndose de hombros y rascandose la nuca.-
-¿Qué?
-Emm, sí. Ahora volvamos al coche, tenemos que llegar al hotel antes del anochecer.
Estaba a punto de objetar algo, pero eso nos retrasaría aún más y odio viajar por la carretera de noche. Cuando llegamos, las cosas se ponían mejores, solo les quedaba una habitación y era con solo una cama.
-Oh vamos Riley, ya hemos dormido juntos en la misma cama
-Sí, pero en ese entonces estaba inconsciente
-No prácticamente.
-¡Estaba ebria! –Exclamé.- tú duermes en el sofá y yo en la cama. –Tomé una toalla y me metí al baño, luego salí vestida con ropa de Luke, ya que él sí había traído ropa y me metí a la cama.
Me cubrí con una frazada mientras escuchaba caer un trueno, alcé mi vista y vi a Luke sacándose la remera que llevaba puesta y dejándola por ahí, luego se metió en el sofá y cubrió con unas cuantas frazadas más.
El agua comenzó a caer, estábamos en el segundo piso por lo que las gotas golpeaban contra el techo y la ventana. Los truenos se oían más fuertes y estruendosos. Las lluvias jamás me habían gustado.
-¿Luke? … ¿Estas dormido?
Luego de un constante silencio contestó.- No, ¿por qué?
-Es que no me gustan las tormentas. –Musité cubriéndome la cabeza con las frazadas.
-¿Quieres que duerma contigo?
-¡No! Bueno… sí. –Admití desde debajo de las cobijas. Minutos después sentí como Luke me destapaba para meterse a mi lado y cubrirse también.- si intentas algo te cortaré las manos.
-¿Qué podría intentar? Ya te he besado, he dormido contigo, eso del sexo obligado no es mi estilo, estaré listo cuando tú lo estés.
-Luke
-¿Si?
-No somos novios realmente.
-Claro, aún no. –Me quedé en silencio, agradecía que la habitación estuviera oscura y que yo estuviera de espaldas a él, para que no pudiera verme sonrojarme.- ¿Riley?
-¿Si, Luke?
-¿Puedo abrazarte? –Y volvíamos al Luke que conocí el segundo día en la escuela.
-¿Qué clase de novio falso serías si no lo hicieras? –Pregunté dándome la vuelta para mirarlo, aunque solo viera una gran sombra.
-De los peores, supongo.
Sentí su mano en mi cintura y como me atraía hacia él. Apoyé mi cabeza en su pecho y sus brazos en seguida me rodearon y en esa posición me quedé dormida, siendo acunada por los fuertes brazos de Luke.
Corto, lo sé. Pero es para darle una introducción a lo que viene...
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Quiero Robarme Tus Besos
NouvellesCuando Riley se muda a Chicago con su madre lo único que quiere es largarse de allí en ese mismo instante. Pero luego de una semana allí las cosas cambian, y a quien ella llamaba ❝idiota❞ pronto le llamará ❝bebé❞, ❝cariño❞, ❝amor❞. Los cambios en la...