Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ XVI: Lᴇᴇ Mɪɴʜʏᴜɴ

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Soobin pensaba seriamente qué había cambiado desde que él había llegado a Seúl. Miró a su hermano sentado en el sillón más grande de la sala mientras pasaba sus dedos por las hebras rubias de Beomgyu mientras él enviaba mensajes en su celular. Se preguntó qué había hecho ese omega para poder ablandar la roca que llevaba por corazón Yeonjun, ansiaba saber qué debía hacer para ganarse el corazón alguien...

-Beomgyu, necesito ir al baño- Habló Yeonjun y Beomgyu ni siquiera le dio importancia.- Levántate, Beomgyu...- Intentó levantarlo, pero sólo se ganó un gruñido por parte del omega- Por favor- Rodó los ojos y Beomgyu sonrió victorioso y se sentó en el sofá para darle espacio suficiente a Yeonjun para levantarse, y cuando el alfa se fue, se tiró de nuevo en la suave superficie.

-Beomgyu~- Susurró Soobin sin dar en su objetivo de atraer la atención del omega de su hermano.- Estoy hablándote- Se levantó y arrebató el celular de las manos de Beomgyu.

-¡Yeonjun~!- Comenzó a gritar y el peliazul apareció de inmediato.

-¡Soobin! No molestes a Beomgyu- Reprendió al menor.

-¡Sólo quería hablar con él! Y por usar esta cosa, no me presta atención. No sé cómo lo soportas- Bufó y lanzó el teléfono de vuelta a su dueño.

-Es verdad, Beomgyu. Dijiste que querías pasar tiempo conmigo antes de volver a clases y estás aquí tirado ignorando la película que tú mismo trajiste- Beomgyu miró con ojitos brillantes a Yeonjun y el alfa se acercó a él y lo abrazó.

-Lo siento, NingNing no se ha estado sintiendo bien últimamente y sólo trataba de subirle el ánimo un poquito- Soobin sintió su piel erizarse y no pudo evitar sentir culpa por lo que le pasaba al omega.

-Uh...-Comenzó Soobin- Creo-Me... me gustaría hablar con él- Beomgyu lo miró de arriba a abajo tratando de descifrar qué le sucedía al castaño.

-Podría decirle que venga ¿puedo?- Miró a Yeonjun y una vez que el peliazul asintió, Beomgyu tomó su celular y marcó el número de su mejor amigo.

-No seas cretino, Soo- Palmeó su hombro y pasó su vista a las caderas de Beomgyu quien se movía de un lado para otro en su cocina.

-Eso intento, hyung...-Se mordió el labio inferior para evitar que temblase y demostrara su nerviosismo.

•••

-Creo q-que mejor vendré luego-Intentó darse la vuelta, pero fue detenido por un fornido brazo rodeando su cintura.

-Entra, Kai. No te arrepentirás- Soobin habló en el oído del omega utilizando el tono seductor con el que lo había hecho caer aquella vez.

Beomgyu y Yeonjun se habían ofrecido-obligados por el castaño-a ir por pizza a la pizzaería del centro comercial que estaba exactamente a treinta minutos del apartamento de Beomgyu. Soobin quería tener una conversación madura y decente con Kai para aclarar qué había pasado en el apartamento de Beomgyu y cómo manejarlo.

-Esperaré a Beomgyu aquí afuera, gracias- El delgado chico dio un codazo al abdomen del mayor causando que de inmediato lo liberara.

-No seas infantil, vamos pasa. Ya ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos, además, el lobo no te comerá la lengua... otra vez. A menos que quieras- Guiñó su ojo derecho y el rostro de Kai se encendió.

-¡Kim Soobin!- Gritó Yeonjun- ¿Qué clase de comentario es ese?- Se apresuró a entrar al apartamento con las dos cajas de pizza en sus manos.

Un Omega para YeonJun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora